∞CAPITULO 2∞

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Entonces tome un viejo cuadernillo y escribí: META A CONSEGUIR (BAJAR 12KILOS O MAS EN DOS MESES) PESO RESIENTE 90 KG; EDAD 10 AÑOS, PESO DESEADO 50KG. PARA ELLO DEJAR CARBOIDRATOS-GASEOSAS-GOLOSINAS-TODO LO QUE CONTENGA AZUCAR.

Y cada día anotaba mi peso, era enfermizo y obsesivo,  pero los dos meses pasaron y ni siquiera había conseguido bajar un gramo; así que deje de lado la dieta, lo que hiso que me deprimiera aun mas, deje de usar vestidos y polleras para usar jeans aunque fuera verano e hiciera 34°c yo llevaba pantalones y punto. Era deprimente ver a mis amigas delgadas y yo bueno era la feita del grupo.

Mi madre, oh que decir sobre ella…era una ebria y una zorra; no hay palabras más precisas para describirla. Se acostaba con medio pueblo (intuyo que lo hacía por dinero<<es para que podamos huir… Solo no deben decirle a papa ¿de acuerdo?>> había dicho una vez; huir ¡já! Si claro…para que ella pudiera comprar tequila y así huir de la realidad. Jamás le importo que mi hermano y yo estuviéramos en la habitación continua así como jamás le importo llevar 9 u 11 tipos por día y acostarse con ellos en la misma cama que todas las noches compartía con mi padre. Mi padre, hombre trabajador aunque casi nunca estaba en casa y si estaba peleaba con mi madre : mi hermano y yo teníamos un código <<patata>> eh íbamos al altillo y pasábamos ahí horas y horas hasta que el miedo se esfumaba; patata si papa y mama peleaban; patata si mama estaba ebria o agresiva o las dos cosas juntas; patata si nos había ido mal en la escuela y se aproximaba el cinto, en fin casi siempre era patata, no se puede vivir con patata porque eso no es vida.

Jamás tuve un cumpleaños con globos y pastel y regalos y gente que te quiere, ya saben lo normal. Tuve que madurar muy de golpe; cocinar, lavar, limpiar, planchar, hacer las compras con las pocas monedas que papa me daba, tuve que criar a mi hermano desde que el era bebe porque mi mama estaba demasiado ocupada absorbiendo alcohol como una esponja.

Cuando tenía unos 14 años mi padre se quedo sin trabajo, comenzó a beber y a golpearme y las cuentas a crecer así que empecé a trabajar tenía dos trabajos no ganaba mucho pero servía para sobrevivir, así que dejaba a Bry (Mi hermano: la luz de mis ojos, es el único que me hace sonreír, por él yo sigo en pie. Tiene unos 5 años pelo azabache y ojos grandes color caramelo) en una guardería y por supuesto yo pagaba la cuota.

 Ese mismo año conocí a Thomas Johnson (ojos azules, alto, corte taza, pelirrojo,  nariz aguileña, delgaducho y blancucho); estaba en el bufet de la escuela, sentada en la mesa más alejada de todos los orangutanes y las perras falderas (apodos que les puse a los integrantes del equipo de futbol americano y a las porristas),  revolviendo mi comida y dándole vueltas a unos de mis mechones de pelo que sobrevivió al ataque de Daniel Coast (líder de los orangutanes) quien puso en mi cabello una especie de engrudo chicloso la semana pasada; ni siquiera le suspendieron, obviamente con el poco dinero que tengo no pude pagar un peluquero pero hice lo mejor que pude con la tijera de podar y el gran espejo del pasillo, desde entonces soy el hazme reír de toda la escuela.

<<y entonces le dije ¡limpieza en el pasillo emooo!>> exclama Coast, y aunque no fue muy gracioso sus perritas falderas y orangutanes vitoreaban su hazaña con carcajadas, fingidas por supuesto. Le eche una de mis miradas matadoras y seguí revolviendo mi plato de, bueno en realidad no se lo que era, la cocinera le llama * el menjunje* entonces un chico pelirrojo se sienta en frente mío, espero unos segundos pensando que se ha equivocado pero sigue allí, hace sonar su garganta y le miro arqueando una ceja.

-¿se te perdió algo?-le pregunto demandante. Supongo que es un amigo de Daniel, que viene de su parte para hacerme una broma.

-no, gracias por preguntar. Soy Johnson…em Thomas Johnson-se presenta y me sonríe. Esta nervioso, lo noto de inmediato (le sudan las manos como puerco).

-Vale, Felicitaciones te sabes tu nombre.-Le respondo y miro sobre su hombro: Coast mira hacia aquí, esta apretando la mandíbula.

-Y… ¿Tu nombre es?-Me pregunta, ignorando mi sarcástico comentario. Entrecierro los ojos hacia él, le examino lentamente con desconfianza.

-Elizabeth Jackson, ¿eres nuevo o algo?-Digo bruscamente. Desconfío de él y de todo ende que habite fuera o dentro de esta escuela.

-Sí, me echaron de mi antigua escuela, Instituto Nacional, por mal comportamiento.-Me explica, aunque no se lo haya pedido.

*Suena la campana para el reinicio de clases y me levanto de golpe, haber si entiende la indirecta cosa que no sucede, el se levanta también, colgando su mochila en el hombro*

-Entonces… ¿Cuál es tu próxima clase?-me pregunta.

-Bien, mira, abre bien tus oídos y escúchame; si eres uno de los orangutanes sin cerebros de Coast es mejor que vuelvas con tu grupito de uni-neuronales y me dejes en paz.-Le advierto, perdiendo la paciencia.

*El arruga su nariz, claramente confundido por mi actitud*

-¿Un orangután? Coast… No sé quién es. Yo solo te vi y quise ser amistoso contigo.

-¡No necesito tu lástima!-le chillo y él se sobresalta-Disculpa, no quise gritarte, solo… Aléjate.-No era una amenaza, más bien un consejo.

*Y emprendí rápidamente mi viaje hacia la clase que me tocaba*

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Hola,me acavo de levantar. Si les gusta voten o comenten please, me siento ignorada :/ pos pos ya tengo el tercer cap y estoy escribiendo el cuarto. ¡Beshos!

∞My Fucking Life∞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora