Teen Love

Capítulo 4

Narra Jungkook:

Me revolví dentro de las mantas. Estiré mi cuerpo, esperando que con eso el sueño se fuera, por lo menos un poco. Me senté sobre el colchón y tomé mi teléfono, observando que todavía quedaba una hora para que mi alarma sonara. Solté un suspiro para luego, levantarme y sacar algo de ropa, dirigiéndome así al baño.

Caminé en silencio por el pasillo, las luces de la casa estaban apagadas, pero los rayos que, apenas comenzaban a asomarse y se filtraban por las rendijas de las ventanas, me ayudaban a ver por dónde iba. Al llegar, y luego de regular el agua de la ducha, me deshice de mi ropa y, casi al instante, metí mi cuerpo bajo el agua tibia. Pasé las manos por mi cabello, comenzando a recordar la noche anterior.

Flashback:

- Por favor, habla con tu hermano ¿de acuerdo?. – Las manos de Tae rodeaban con cuidado mi cintura. Asentí y el mayor se acercó a dejar un casto y suave beso sobre mis labios.

- Te veré mañana. – Hablé y luego de despedirnos, atravesé la puerta de entrada. Un suspiro salió de mis labios y me dejé caer por la puerta, ya cerrada, hasta llegar al suelo.

- ¿Todo en orden?. – Ni siquiera me moví al escuchar su voz.

- ¿Llegué tarde?. – Pregunté levantando por fin la mirada. El mayor se sentó a mi lado y pasó uno de sus brazos por mis hombros, acercándome así hasta él.

- No, tranquilo. – Apoyé mi cabeza en su hombro.

- ¿Jimin está aquí?. – Nuestras voces salían en un tono bajo y tranquilo.

- Se quedó dormido en mi cuarto. – Asentí y nos sumimos en un silencio durante algunos minutos.

- Hyung...

- Jin me avisó... - Al decir aquello, me apegó aún más a su lado. – Viste a ese infeliz ¿verdad? – Asentí. - ¿Te hizo algo?

- Solo... - Suspiré. – Me tiró al suelo en uno de los salones, pero Tae llegó a tiempo y él se fue por una de las ventanas.

- Te juro que en cuanto lo vea...

- No Hyung... - Susurré interrumpiendo lo que decía. – Tae dijo que sus padres tienen demasiados contactos...si le haces algo, ellos.

- No permitiré que te dañe a ti o a Jimin.

- Pero tu trabajo...

- Escúchame... - Se colocó frente a mí y me miró serio. – Lo más importante para mí eres tú, y no dejaré que ese niño mimado se salga con la suya.

- Y yo no dejaré que por su culpa pierdas lo que tanto te costó. – Su mirada se suavizó y me atrajo hasta abrazar por completo mi cuerpo. – Prométeme que no harás nada.

- Solo si tu prometes que te cuidarás ¿de acuerdo?. – Asentí y ambos sonreímos.

Fin del flashback

Una vez listo, caminé de vuelta a mi cuarto y preparé mi mochila, junto al uniforme, para luego recostarme por un par de minutos más.

Narra Jimin:

Sonreí ante la calidez que rodeaba mi cuerpo. Abrí mis ojos y éstos se enfocaron en el rostro pálido del mayor. Con cuidado, pasé mis dedos por su mandíbula, hasta llegar por detrás de su oreja, donde comencé a dejar leves caricias.

Presionó sus ojos hasta que, lentamente, fue abriéndolos y enfocándolos en los míos. Dejé un casto beso sobre sus labios, sintiendo como mis mejillas se calentaban, al momento en que sus brazos se presionaron en mi cintura, atrayendo mi cuerpo más cerca del suyo.