Prólogo

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—¿Alex, eres tú?— pregunto con cierto sigilo para que los demás reclusos no me escuchen

—Mmm, déjame en paz— la respuesta sin ánimos de Alex me hace entrar en desesperación

Como puede tener una actitud tan tranquila? apesar de que morirá en 48 horas si no logro sacarlo de aquí

—¡No vine a esta cárcel a la una de la mañana para nada! PARATE— alzo la voz captando toda su atención

—¿Mikaela, que haces aquí?— Noto como la sombra de su cuerpo se levanta lentamente de la cama donde estaba durmiendo para no hacer ningún ruido

—Cállate. Te voy a sacar de éste lugar, no creo que tú lo hayas hecho— Le digo mientras trato de abrir su celda con las llaves que le quite al guardia

Se preguntarán porque estoy en una cárcel a media noche tratando de sacar a alguien sentenciado a muerte que puede ser o no inocente.

Pronto lo descubrirán

Bajo las sombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora