Éramos todavía muy pequeñas cuando empecé a fijarme en Rossie, una niñita de piel pálida y labios suaves como los duraznos,su cabello oscuro y sus lindos ojos la hacían alguien adorable y delicada.
-Vamos Hanna, necesito alcanzar el columpio-dijo con voz tierna-Apúrate
-Dame solo un momento Rossie,no puedo correr tan rápido como tú.
La pequeña tomó mi mano,miré al suelo nerviosamente y seguido a eso su rostro, sus pequeñas manos y su adorable expresión lo eran todo para mi, simplemente me sonrió y yo sentí como miles de mariposas empezaban a hacerse notar dentro de mi.
Ella se logró montar en el columpio y para mí, ese momento fue mágico, simplemente verla sonreír y escuchar su encantadora risa me hacía muy feliz, hacía que me quisiera quedar a su lado siempre y nunca abandonarla, ser su ángel guardián.
-Hanna...-escuché decir mi nombre en voz baja.
-Si?-pregunté para ver si solo era mi imaginación
-Sabes? Estoy feliz,me haces feliz-dijo nerviosa pero al mismo tiempo mirándome con una sonrisa
-Y tu a mi tontita-respondí con seguridad.
-Soy muy afortunada de tenerte-seguía sonriendo.
Volvimos a mirar el cielo y a quedar en silencio,aunque esta vez sentía que algo dentro de mi no se sentía igual de como solía ser antes de venir al parque,algo cambió.
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Your Taste Is My Drug
RomanceMe acuerdo el primer día que la vi, simplemente pasó enfrente mío como si nada, y desde ese momento me atrapó, su pelo, el sonido de su risa mientras se tapaba la boca con su mano, su manera de caminar, todo hizo que mi corazón diera mil vueltas en...
