SELFISH | HARRY STYLES

parte única

Los pensamientos de Heather están en cursiva

...

Después de un largo día de trabajo en una cafetería en la zona central de su ciudad, espera llegar y recostarse en su cama, pasar un agradable momento con su prometido y tal vez hacer el amor como antes. Debido a sus horarios tan estrechos les era imposible tener un momento intimo y ahora que había salido un poco antes de su trabajo, deseaba darle una sorpresa a su novio.

Pero antes de llegar siquiera a abrir la puerta del dormitorio escucha un par de sonidos que la dejan helada.

No, el no podría.

¿Como iba a hacerlo? Si iban a casarse en unos meses. ¿Como seria el capaz de tal acto siendo que predicaba su amor eterno a ella cada mañana?

No, el no podría.

Con la mano temblorosa y aguantando la respiración, tomo la manilla de la puerta y la giro lentamente tratando de hacer el menor ruido posible.

La sorpresa ya no era hacia el, era para ella.

Su amado, su prometido, el que ella creía que era el amor de su vida se encontraba envuelto en las sabanas con la enfermera que trabajaba con el, la misma chica que había cenado en su mesa hace unas semanas junto al resto de doctores y enfermeros que Harry había traído a casa para una reunión informal.

¿Cuanto tiempo llevaba de esto? ¿Cuanto tiempo llevaba viéndole la cara de imbécil?

Ella no era una chica de celos, confiaba en Harry ciegamente, por lo que nunca se le pasó por la mente que algo pudiera ocurrir con aquella joven chica y su novio.

Que tonta fui.

No sabia cuanto tiempo estuvo parada en el umbral de la puerta viendo la escena que rompía su corazón. Tal vez segundos o minutos pero para ella se sintieron años.

Retrocedió y cerro de un portazo para que notaran su presencia. Tomo asiento en su sala de estar pensando en cual seria su siguiente movimiento, era una chica muy sentimental pero en este momento pensaba con la cabeza fría, demasiado fría.

Escucho pasos rápidos y supo de inmediato que era Harry.

—Amor— Iba a tomar su mano pero Heather la aparto rápido y con una mueca de asco.

Asco.

Después de analizarlo por unos minutos concluyo que eso era lo que sentía en ese momento, Harry le daba asco.

—Tienes 10 minutos para irte de aquí junto a ella, voy a entrar al baño y cuando salga no quiero ver nada tuyo Harry ¿entiendes lo que digo? no vas a volver aquí a buscar nada, te lo llevas todo ya— El la miraba con lagrimas en los ojos, estaba arrodillado listo para pedir perdón pero el sabia como era Heather y pedir perdón no cambiaría nada.

—Si me dejas explicarte yo...— Ella solo pone su mano en el aire haciéndolo callar.

—No quiero escucharte Harry, no quiero. Solo quiero que tomes tus cosas y te largues de aquí, no me interesa el resto— Se volteo para entrar al baño pero se detuvo para mirar nuevamente a Harry quien tenia las mejilla empapadas en lagrimas de arrepentimiento —Ah y Harry, por favor no me busques después de esto, espero no encontrarme contigo jamas.

Dicho esto volteo y entro al baño tapando su boca tratando de silenciar sus fuertes sollozos.

Fueron mas de 10 minutos los que estuvo en su baño llorando y maldiciendo al cielo, preguntando el porqué de las cosas, no tendría respuesta pero le reconfortaba poder decir sus preguntas en voz alta.