Clean// Tom Holland

19

Tom

El fin de semana fui a ver a Eleanor como prometí, estaba preocupado porque Jazmine no había insistido desde ese día que me llamó molesta.
Fui solo, Harry se había quedado en Cleveland.
Ya fuera de la casa de su madre toqué el timbre y Jazmine abrió.

—Hola— saludó cortante.

—Hola, ¿para que soy bueno?— pregunté intentando ignorar su mal humor.

—Para nada, exactamente para eso— la chica me dejó entrar y me quedé esperando en la sala.

La madre de Eleanor bajó del segundo piso y se dirigió hacia mí, se notaba que había estado estresada, espero que no fuera nada grave porque me preocupaba mucho Eleanor.

—Tom, me alegra que hayas venido, debemos hablar antes de que hables con ella— habló en un tono muy bajo.

—Claro, lo que sea puede decirme— respondí.

—Pero no quiero hablar aquí, ven al estudio— caminé con ella hacia su oficina.

Cerró la puerta de tras de mí y me invitó a sentarme en una silla, ella se sentó en la que estaba a un lado y parecía estar ansiosa, como si no supiera que decir y eso era extraño viniendo de la madre de Eleanor.

—Señora Dunne, no es porque la quiera presionar pero usted y Jazmine me asustan— comenté, ella rió amargamente.

—Es que ojalá fuera fácil decirlo— comenzó a sollozar— Tom, sabes que Eleanor es una persona que no ha tenido una vida fácil, más que nada por todos sus problemas de salud, de cierto modo ha salido adelante o eso al menos creíamos hasta...— hizo una pausa para intentar calmarse—... hasta que Joshua abusó de ella.

Me quedé helado en mi lugar, la señora Dunne comenzó a llorar, no sabía que decir, ¿en serio eso le habían hecho a Eleanor?

—¿A que se refiere?— pregunté creyendo que había oído mal.

—Joshua, su ex jefe estuvo abusando de ella, la violaba y nunca dijo nada, si no fue hasta que Jazmine lo descubrió por accidente, de lo contrario ella lo hubiera seguido manteniendo el secreto— articuló como pudo la señora Dunne.

—Debo verla y ver si está bien— exigí.

—Espero que quiera hablar contigo porque no ha querido hablar con nadie, ha estado teniendo pesadillas y no quiere decirme sobre que son, estoy muy preocupada— asentí, de haber sabido hubiera tomado el primer vuelo a verla.

—¿Donde está?— pregunté.

—Todas las tardes de las ha pasado en el patio de atrás, sólo mira a la nada y a veces se queda dormida, espero que esté despierta, puedes pasar— me invitó.

Salí hacia donde me había indicado la señora Dunne, y en efecto, ahí estaba ella sentada en un camastro justo a la piscina mirando hacia la nada, usaba un vestido y un cardigan, su cabello estaba despeinado por el aire y su rostro no tenía ni una gota de maquillaje, se veía tan humana, mi Eleanor estaba lastimada y no sé si yo era el indicado para ayudarla.
Me senté en el que estaba junto a ella, no me miró, pero sabía que se había percatado de mi presencia.

—Supongo que ya te dijeron— habló después de unos minutos en silencio.

—Sí, lo sé todo— respondí, la castaña siguió sin mirarme.

—¿Te contaron que él...— hizo una pausa y respiró hondo como si decirlo doliera—... me violó?

—Si no quieres hablar de eso no lo hagas, no debes decir nada— me acerqué a ella.