Capítulo 1

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¡Hola! Como ya mencioné esta es una traducción autorizada, el link de la historia en su idioma original, inglés, se encuentra a continuación.

https://archiveofourown.org/works/16148483/chapters/37731332

Espero disfruten de la historia de PurrV.

La actualización de los capítulos podría ser cada dos días, dependiendo de lo que me demore. Igualmente son libres de ir link para leer la versión en inglés. Además recuerden por favor no hacer spoirles a quienes decidan esperar por la traducción. Dejemos que todos disfruten de esta bonita historia.

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Cada reino tiene un Rey. Cada rey tiene una reina. Tienen un Jack que les sirve y un As que les ayuda en las sombras. Así ha sido siempre en los cuatro reinos que gobiernan el mundo.

El rico Reino de Diamantes.

El hermoso Reino de Corazones.

El vasto Reino de Tréboles.

El poderoso Reino de Picas.

Cada uno tiene un rey, cada uno tiene una reina y juntos gobiernan su amado reino como uno solo. Ha sido así durante eones, ya que esta era la ley natural del mundo.

Sin embargo, el Reino de Picas no ha tenido una reina durante cien años.

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"¿Es realmente necesario hacer esto?" resopló Alfred, abrochándose el chaleco y apretando la corbata, "Quiero decir, ¿cuál es el punto? ¿Hay un punto? ¿Cuál sería el peor de los casos si no hiciera esto?" El rey de Picas miró por encima del hombro. "¿Bien?"

"Es una tradición", respondió Wang Yao, el Jack de Picas está parado cerca mientras observaba al hombre más alto vestirse él mismo, "Como rey, es tu deber defender y mantener nuestras tradiciones".

"Lo sé", resopló Alfred, poniéndose el abrigo y mirándose en el espejo, "Es solo que esta tradición en particular requiere una... ya sabes".

Yao puso los ojos en blanco, sin saber si el Rey estaba comprobando si era estúpido o algo así, después de todo, el rey hacía la misma rutina cada vez que se llevaban a cabo ciertos eventos y ceremonias. "Soy muy consciente de que esta ceremonia requiere la presencia de una reina"

"¡Exactamente!" Alfred se apartó del espejo y se acercó al sereno Jack. "No hay reina, ¿¡Por qué estamos haciendo esto!?"

"Porque es tradición", repitió Yao, alzando la voz levemente mientras la actitud del joven rey comenzaba a estresarlo. "Además, sabes muy bien que dado que carecemos de una reina, los otros reinos nos prestan su reina, y no se quejan porque es-"

"¡Tradición! Sí, lo entiendo." Alfred golpeó el suelo con el pie, dejando una grieta en la piedra decorada y murmuró palabras obscenas para sí mismo. Sabía que esta próxima ceremonia era importante, sabía que dado que su reino carecía de una reina, los otros reinos le prestaban sus reinas... simplemente le molestaba tener que hacer esto con una. En lo que a él respectaba, el Reino de Picas parecía estar funcionando bien sin la presencia de una reina.

"Recuérdame de nuevo, cuál reina es..."

"Reina Erika del Reino Diamantes," respondió Yao.

"Oh, sí", murmuró Alfred, recordando instantáneamente que recibió una carta hace unas semanas de Francis, el rey de Diamantes, que expresaba su entusiasmo por verlo una vez más. "Eso me recuerda que será mejor que haga que los chefs traigan esa reserva especial que le gusta".

Yao parecía preocupado ahora. "Mira, ¿Podrías por favor, POR FAVOR, trata de concentrarte en la tarea que tienes entre manos?", Suplicó, "Una vez que termine, puedes ir de fiesta, comer y beber, coquetear, no me importa. Solo haz esto bien".

Exceptis CentumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora