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"¿Cómo te está yendo en el trabajo?"

Jungkook alza la cabeza hacia su padre que lo mira mientras mastica de forma lenta y con la boca abierta la carne que su madre ha preparado. Su mirada está llena de curiosidad e interés, esperando a que su hijo menor le cuente acerca de su nueva vida como adulto independiente.

Jungkook no lleva mucho tiempo fuera de casa; quizá ocho meses. Ha terminado la universidad hace un par de años, pero ante la crisis financiera no ha podido encontrar un empleo en lo que le gusta. Jungkook también estaba pasando por una pequeña crisis existencial, sintiéndose insuficiente e incompetente.

Ha cambiado de trabajo por quinta vez desde que ha terminado la universidad. La diferencia es que ahora se encuentra viviendo solo, cerca de las afueras de Busan. Sus padres han tenido que extenderle un par de billetes para sobrevivir los meses que estuvo desempleado.

Es fin de semana y Jungkook ha decidido ir a casa de sus padres ante los ruegos de su madre. No es que no los quiera, es que siente que les debe demasiado y le da mucha vergüenza llegar a casa viviendo de forma tan patética. Sobreviviendo, mejor dicho.

"Sí, es... Interesante" Jungkook murmura, comiendo con un poco de kimchi. "Voy a devolverles el dinero que me prestaron en cuanto pueda."

"Oh, no te estoy cobrando eso" el hombre murmura, haciendo un gesto con la mano para restarle importancia. Y sonríe de nuevo. "¿Cómo te está yendo en el trabajo?" insiste.

Jungkook mira a su madre que come en silencio, mirándole también con otra sonrisa.

"Está bien; veo rostros nuevos todos los días, y estoy obligado a hablar, así que, estoy mejorando un poco en esto de socializar" Jungkook comenta de forma veloz, mirando a su padre de nuevo. "¿Pasa algo?"

"¿Por qué?"

"Bueno, están viéndome mucho..."

"Nos preguntábamos" su madre empieza esta vez, limpiándose la boca con una servilleta de tela. "Si vas a buscar un trabajo, ya sabes, en lo que te has especializado."

"¿No vendrá Junghyun?" Jungkook cuestiona y su madre aletea sus pestañas. "No me gusta que la atención esté sobre mí; ya estoy fuera de casa, voy a devolverles el dinero y trataré de que no pase de nuevo."

"No te estamos cobrando nada, es solo que... Esa casa" ella murmura, mirando a su esposo en busca de ayuda.

"Es espantosa" termina. "Vives en un lugar horrible, y todo porque es barato. Ni siquiera está bien pavimentada la calle."

"Pero podría comprarla en un futuro; a mí me gusta. Tiene su encanto."

"Te podría conseguir un apartamento cerca y ayudarte a pagarlo" su padre propone.

"Papá, mamá, yo los amos, pero realmente no quiero nada de ustedes más que cariño y apoyo, pero no que me resuelvan la vida. Necesito equivocarme para aprender... Yo-"

Algo cae en el sótano y el sonido es sordo. Los tres miran hacia la puerta que da a la cocina, porque por ahí se llegaba al sótano.

"¿Qué ha sido eso?" Jungkook cuestiona.

"Es el gato" su madre responde y recibe una mirada de su hijo, ella se ríe. "Sabes lo loco que puede ser ese condenado animal."

Jungkook no pregunta más y siguen comiendo, decidiendo, por el bien de todos, cambiar de tema por fin. Cuando la cena termina, su padre le ofrece llevarlo a su casa luego de soltar un comentario acerca del viejo y horrible carro de Jungkook que lo esperaba a fuera y Jungkook se niega diciendo que estará bien.

Herencia Familiar - TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora