Clean// Tom Holland

20

Eleanor

Ya habían pasado dos meses desde que Joshua me atacó, habíamos levantado una demanda, era una situación muy inestable.
Decidí no involucrar a Tom en esto porque ya tenía suficientes cosas en qué ocuparse.
Habían las pruebas contundentes pero no entendía por qué a las autoridades les constataba tanto trabajo creer el hecho de que alguien abusó de mí, no ganaría nada culpando a Joshua.

—Señorita Dunne, ¿podría describir el ataque? Porque tenemos informes de que usted tiene trastorno bipolar y puede que todo haya sido parte de un episodio psicótico— señaló el abogado de Joshua.

—O sea que pretende decir que lo inventé, ¿no?— dije molesta— le diré una cosa señor Wuntch, yo no gano nada estando aquí sentada siendo objeto de burlas de parte de la defensa, no gano nada intentando culpar a Joshua, si cree que es por dinero, adivine, no lo necesito, lo único que quiero es que se haga justicia por mí, por todo el daño que me causó, de lo contrario no lo estaría haciendo perder el tiempo como ese monstruo lo hace defendiendo lo indefendible, he repetido los sucesos miles de veces esperando a que esas personas ahí sentadas— señalé al jurado— se den cuenta de que lo que digo es verdad. Ustedes, los abogados defensores, arruinan miles de vidas de muchas mujeres haciéndolas sentir inseguras, vulnerables, como si el crimen que cometen los violadores se pudiera tapar con un dedo, no me queda más que claro la basura de seres humanos que son, ganan miles de dólares dejando libres a agresores, y no es justo, ¿acaso creen que yo merezco esto? ¿La pesadillas? ¿Los ataques de pánico? Ustedes sólo me ven como a una loca a la que pueden callar, pero no, no me conoce y no voy a descansar hasta lograr que ese hombre vaya a la cárcel por lo que me hizo.

—Señorita Dunne, no respondió mi pregunta— dijo sarcástico.

—¿Qué quiere que le diga? ¿Qué Joshua Buchancow me arruinó la vida porque me violó? El señor Buchancowe violentó dejándome lastimadas mis partes íntimas, al igual que varias partes de mi cuerpo, ya tienen el diagnóstico del médico y la fotos, incluso el ADN del señor Buchancow que estaba dentro de mí, ¿Qué más quiere saber?— respondí a ese loco.

—Muchas gracias, señorita Dunne— sonrió victorioso.

—Esperaremos el veredicto del jurado, mientras los demás tomemos un descanso— dictó el juez.

Estaba harta de sus acusaciones queriéndome llamar loca, de verdad ya no soportaba más esto, estaba fuera del juzgado con mi abogado, mi madre y Jazmine, Lucy estaba en la escuela.
Tom había estado llamando toda la mañana pero no me sentía fuerte mentalmente para hablar con él.

Necesitaba respirar un poco, estaba sentada en una banca mientras me fumaba un cigarrillo, mi madre se oponía pero lo necesitaba, sentía mucha ansiedad y no podía calmarla más que por eso.

—Eleanor, tengo malas noticias— se acercó mi abogado a hablarme.

—¿Qué sucede?— pregunté.

—Oí alardear al abogado de Buchancow qué tal vez sólo le den unos meses de servicio a la comunidad y que lo declaren culpable— me quedé helada, mis ojos comenzaron a cristalizarse dejando caer pesadas lágrimas.

—No, no, Holt, esto debe ser un error— comenzó a decir mi madre.

Entré en shock y me ensordecí, lloraba con fuerza mientras mi madre intentaba calmarme pero oía nada.
Mi madre y Jazz me guiaron dentro de la sala de nuevo, al parecer el jurado ya había tomado su decisión y en serio esperaba que Holt estuviera equivocado, rogaba al cielo que sólo fuera un error, era lo único que pedía.
Sentía los minutos eternos, la sala comenzaba a llenarse de nuevo, Joshua me miraba victorioso como si supiera que ya había ganado, yo sólo miré fijamente un punto en la pared.
Nunca había sentido tanta ira como hoy, me sentía derrotada, él iba a hacerme daño de nuevo.