HINATA
—¿Escuchaste? Esa enfermedad esta acabando con varias personas. ¿Puedes creer que ya haya tres estudiantes con ella?—Lo sé, pero hasta ahora los mantienen ocultos. ¡Deberian decirnos siquiera quienes son!
—Al parecer los mantendrán en secreto. De solo pensar que hay chicos con esa enfermedad en nuestra clase... ¡Diablos, no quiero que nadie se me acerque!
—Pero, ¿no creen que es ridículo morir por unos sentimientos? Osea, hasta se podría decir que el solo tener sentimientos amorosos hacia alguien es tu condena. ¡Si es así, prefiero no enamorarme!
—¿Acaso eres tonta? ¿Qué te hace creer que puedes tomar esa decisión por encima de lo que desea tu corazón?
No pude ver con un poco de irritación a mis compañeras, luego de saber el tema que con tanta intriga tenían entre ellas.
Pero solo pude recibir una mirada con reproche como respuesta.
Será mejor que deje el aula.
Hanahaki. Una enfermedad que está tomando la vida de varios jóvenes enamorados.
Parecía una enfermedad de ensueño. Nadie creía en ella. Todos los jóvenes, incluyéndome, dudabamos de que tan cierta era.
Hasta que casi todas las noticias abarcaron sobre las víctimas de ésta. Día a día era común ver a jóvenes llevados en camillas a los hospitales, ver cifras indicando cuantos enfermos había en el día y lastimosamente, ésta aumentaba cada día más.
Ya no podíamos negar su existencia.
Todo la preparatoria estalló cuando el vicedirector anunció que había 3 estudiantes que lo padecían. Desde que lo dijo, todos comenzaron a esparcir rumores y sobre todo, a intentar averiguar las identidades de esos chicos enfermos.
No negaré que también tengo curiosidad, mucha curiosidad de saber quiénes son los estudiantes enfermos... Pero creo que es un poco cruel usarlos como entretenimiento.
Pero obviamente no todos piensan de la misma manera.
Lo pude comprobar al salir de mi salón. El ver el pasillo lleno de personas hablando del mismo tema era una condena.
¡Quiero saber! ¡Quiero que alguien me explique! Pero... sigo considerando que eso es cruel. No debe ser agradable estar postrado en una cama, mientras que tus compañeros paran usandote de material para unas charlas casuales.
Simplemente corri. Corri con todas las fuerzas que me permitían mis piernas. Solo quiero llegar a un lugar en donde permanezca el silencio. Un lugar en donde una conversación no despierte mas mi curiosidad y termine haciendo aquello que tanto critico.
Tal vez sea por la costumbre, pero al acabar mi huida, me percate que estoy parado frente al portón del gimnasio del club. En eso, escucho los sonidos que emite el balón al ser lanzado al suelo una y otra vez.
¿Quién podría ser a esta hora? En unos momentos empezarán las clases... ¿Será otro que también esté cansado del tema?
Poco a poco voy acercandome al portón, al menos quiero saber quién es. Tal vez sea un amigo y podemos pasar juntos las horas de clase que nos saltaremos.
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Aún no es tarde - KageHina
Fanfic¿Morir de amor? Claro que a nadie le gustaría hacerlo. LITERALMENTE. Pero, a mí no me importaría hacerlo. Por el amor que siento por él, creo que valdría la pena soportar el dolor por el que estaría destinado a pasar. Puede sonar absurdo, pero es la...