LA ÚNICA OPORTINIDAD

160 8 1
                                    

Estaba en el escenario, detrás de la cortina escuchando a la gente gritar, mirando por un pequeño espacio carteles, chicas y chicos sin parar de gritar e inclusive algunos lloraban, seguramente porque era la primera vez que me veían en vivo.

Ser una celebridad no era nada sencillo, con el tiempo aprendí a separar lo profesional de lo personal, dejando mis emociones a un lado cuando se trataban de criticas ofensivas contra mi trabajo. Solo había un mensaje que aún no me sacaba de la cabeza y a veces era dueño de mis pesadillas.

"Te quitaré todo lo que amas"

Nunca contraté a alguien que investigara la procedencia de eso, solo me pondría mas nerviosa, en especial si era de alguien conocido.

Entre la multitud miré a Adrien, y, a lo lejos, casi al fondo me pareció ver otro rostro, una silueta con cabello café largo y recogido en una coleta que le llegaba a la cintura. La perdí de vista y un par de manos en mis hombros me hicieron saltar de susto.

—Ey, tranquila, soy yo

Volteé a ver a Luka, tenerlo aquí en un inicio me había gustado, pero ahora tenía un poco de miedo, si el plan fallaba, -aunque me había asegurado de tener todos los escenarios posibles cubiertos- mi novio saldría lastimado.

Me abrazó y susurró en mi oído lo más bajo posible para que solamente yo fuera capaz de escucharlo.

—Todo saldrá bien, y si no es así se nos ocurrirá algo

Anette me dio mi ultima llamada encendiendo mi micrófono y dándome una palmada en el trasero con suavidad en señal de ánimo.

Respiré profundo y caminé hacia el escenario saliendo de la cortina y recibiendo gritos aún más altos en señal de recibimiento.

—¡Buenas noches París! —mi micrófono se escuchaba perfectamente, justo como en el ensayo, puse mi mejor cara y di un pequeño paseo por el escenario, mi escenario —Es un placer estar en casa, pero no vengo sola, esta noche, en mi último concierto de la gira me acompaña Luka Couffaine

Extendí mi brazo derecho para que entrara Luka, caminaba con una sonrisa y en cuanto llegó hasta mí me dio un beso frente a la multitud. Nuestra relación era algo novedoso, ya que no habíamos tenido apariciones en los conciertos del otro. Sin embargo ya se corrían rumores de que nos reconciliamos.

—Muy bien, que comience la fiesta

Luka había hablado dando la señal no solo a mi y los musicos, también a nuestros amigos en la multitud.

Empezó mi primer tema, el que me puso aquí, la canción que comenzó todo, nuestra canción.

Con el público haciéndonos el coro nos la pasamos increíble, después de eso mi novio tocó la guitarra y a veces hacía algun acompañamiento vocal. Si las circunstancias fueran diferentes esto definitivamente sería de las mejores cosas que me han pasado.

Para la mitad del concierto nuestro enemigo empezó a moverse, desapareciendo, aunque al rubio le tomó algo de tiempo, sus ojos se quedaron fijos en mí mucho más de lo necesario. Cuando estuvo fuera Alya y Nino también lo hicieron para transformarse y vigilar mejor desde arriba.

Al momento las luces y sonido se apagaron, generando pánico entre los espectadores, aprovechanado la oscuridad me transformé y Viperion apareció a mis espaldas.

—Todo va bien, ahora solo queda esperar su jugada

Hice girar mi yoyo, y nuestros amigos hacían lo suyo también.

Una ráfaga de aire para nada natural llegó desde mi derecha, en ese momento silbé dando la otra señal. Anette restauró la energía y encendió las luces del escenario, dejando ciegos a nuestros enemigos recién llegados, exceptuando a Chat Blanc.

Negué con la cabeza, no podía creer que fuera en serio, se disculpaba pero volvía a equivocarse, como un sendero de flores continuo hasta la eternidad, nada era diferente. Nada cambiaría.

Comenzó la batalla, yo lidiaría con Mayura, Viperion con Chat, Carapace con Hawk Moth y Rena esperaría, no podíamos arriesgarnos a usar su poder.

Pero había alguien más en el grupo, algo que cambiaba nuestros planes.

Volpina.

Mi chico me miró preguntando si seguir o no con el plan acordado, asentí, aunque ahora tendría una batalla nada justa, dos contra una.

—Oy Ladybug, no sabes qué gusto me da el pelear contra ti

Ignoré su comentario, hace bastante tiempo sus palabras dejaron de importarme.

La batalla fue dura, logré vencer a Mayura quitándole el miraculous de pavoreal, pero Lila se me adelantó y tomó rumbo hacia la azotea.

Deje a mis compañeros para que se encargaran del resto, persiguiendo a Volpina. Al alcanzarla estaba de pie en medio de múltiples copias de ella misma.

Sin esperar me lance contra ellas, pero me rodearon poco a poco.

—Te advertí que te quitaría todo lo que amas, y no parare hasta conseguirlo 

Voltee a mirar a todos lados, todas habían hablado al mismo tiempo, me sentía en una casa de espejos.

Busqué la fuente de las ilusiones pero al no tener más alternativa hice girar mi hoyo desapareciendo todas las copias y dejándome cara a cara con la original.

—¡Amuleto encantado!

Unas llaves se hicieron aparición.

No había nada que pudiera hacer con eso, que se supone que debía hacer, ¿cerrar la puerta para que no tuviera de otra más que quedarse aquí hasta el fin de la eternidad? No, estas llaves eran de auto, eso no serviría.

—Pobre Marinette, no tienes salvación

En ese momento se me ocurrió una idea al mirar por el borde del edificio.

—Aún no se me terminan las ideas Lila

Sonreí volviendo a pelear con toda la fuerza que aún tenía, acorralándola en el borde de la azotea.

De un tirón le arranque el collar y lo rompí liberando al akuma.

En medio de la confusión tambaleó hacia atrás, extendí mis manos para capturar la mariposa y sostener a la chica de la solapa de su chamarra.

Lo que no tenía en cuenta era que ella iba a tirar de mí hacia abajo, causando nuestra caída.

Era un edificio muy alto, por lo que enredé mi yoyó en un pilar, pero era muy tarde para Lila, su cuerpo cayó al piso dando fin a su vida.

Mi tiempo también se acababa, pues mi Miraculous parpadeo y mi transformación terminó. Y mientras caía al vacío aún con las llaves en una de mis manos esperaba que a mis amigos les fuera mejor que a mi.

Un sonido seco marcó un dolor muy fuerte en todo mi cuerpo. Mi cabeza empezaba a perder la razón, solo veía manchas, y una color naranja se me acercó con velocidad.

Abrí la mano donde aún tenía el amuleto, mi amiga no perdió tiempo llamando a una ambulancia y gritando para que no me desvaneciera por completo. Terminando su transformación en el proceso.

————¡Hola! ————

Aquí la autora reportándose :D faltan exactamente dos capítulos para que esta historia llegue a su fin, y prepárense, porque aún quedan preguntas sin respuesta y asuntos que resolver para nuestra protagonista.

Mientras llega el final quiero agradecerles por leer y acompañarme en este viaje, aún y con el relativamente poco número de lecturas que tiene esta historia siento que el esfuerzo valió la pena, incluyendo las lagunas sin creatividad o actualización.

¡¡¡De verdad muchas gracias y a seguir leyendo de esta historia la semana que viene!!!
<3

Autora fuera.

Al Compás Del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora