INEFABLE/ ELITE

TODO VA A SALIR BIEN

Romina POV

Mire a Carla, Polo y Christian discutir en los pasillos, no sé cuál sería el problema que tuvieron pero Marina parecía muy interesada en escuchar todo. Carla se fue a los vestidores así que decidí seguirla y ver si podía ayudarla.

-Carla, ¿estás bien? –Pregunte tomando asiento frente a ella. – ¿Qué pasó?

-Se han perdido algunos reloj de mi casa, mi padre está como loco buscándolos pero no hemos podido encontrarlos –murmura mirándome. – con Polo pensamos que quizá Christian los había tomado

-¿Por qué son importantes esos reloj?

-No todos son tan importantes, solo uno –toma mis manos. – es un USB y tiene documentos, esto no se lo digas a tu novio... son papeles del negocio que tienen mi padre y el padre de Guzmán y como caigan en manos equivocadas justo ahora

-Tranquila Carla, yo te voy a ayudar

-¿Cómo podrías ayudarme, Ro?

-Tengo mis métodos, pero te ayudare a averiguar quién tiene ese reloj, somos amigas después de todo, ¿no? –Me sonrió abrazándome. –

- Las dos rubias más guapas contra el mundo –murmura en mi oído. –

Salimos de los vestidores y entramos a clases, las cuales pasaron normales, al terminar tome la mano de Samu y lo guie lejos de todos.

-Necesito pedirte un favor, Samu –Lo mire directamente a los ojos. –

-Claro que sí, puedo ayudarte en lo que sea

-Necesito que me ayudes a buscar quien tiene los relojes de Carla –murmure. –

Lo mire poniéndose nervioso, tomando sus manos las cuales sudaban, trate de darle la confianza para que me contara qué estaba pasando.

-Quizá si se quien tomo esos relojes –respondió sin más. –

-Te prometo que no diré nada, Samu... solo necesitamos un reloj

Sin más que decir, tomó mi mano y me condujo al estacionamiento frente a mi auto, nos subimos y comencé a conducir para salir de las Encinas.

-¿A dónde se supone que debemos ir?

-A mi casa

El camino hasta la casa de Samuel fue lento y silencioso por parte de los dos, podía notar aun los nervios en él, así que solté una mano del volante y tomé la suya, apretandola un poco. Cuando llegamos a su casa, nos encontramos con Marina y Nano sentados en la sala.

-¿Qué se supone hace ella aquí? –preguntó Marina mirándonos a los dos. –

-Lo mismo te pregunto a ti querida –sonreí falsamente. –

-Nano, necesito que me devuelvas un reloj –Soltó sin más Samuel, tomándome por sorpresa. –

-¿Tú los tomaste? –pregunte directamente a Nano. – pero que mierda tenías en la cabeza para hacer eso, ¿sabes acaso quién es el padre de Carla?

-Si yo los tome, no espero que una niña pija como tu lo comprenda –me miro serio. – todo lo planeo Marina y yo lo hice

-En verdad que puedes llegar a ser una perra –Le dije a Marina. – de todo lo que has hecho, esto es lo peor

-No eres nadie para venir a decirme o reclamarme nada –Se levantó de su lugar para quedar frente a mí. – no puedo ser como la "perfecta" Romina que todo lo hace bien y que todo mundo te adora

-Pues gracias a tu estupidez de niña tonta, tu padre podrá pasarse toda la vida en la cárcel... será muy gracioso cuando le contemos que su propia hija ayudó a hundirlo más

Choque con su hombro y fui a sentarme a los sillones, esta situación solo lograba estresarme cada vez más, Samu tomó asiento a mi lado

-Te dije que podíamos encontrar una solución –murmure a Samu. – yo podía haberlos ayudado a salir de todo esto

-¿Cómo pensabas hacerlo, Ro?

-Prestandoles el dinero que necesitaban –Dije sin más. – pudieron habérmelo devuelto en pagos, pero no tendrían este problema

-Bueno, si es tan importante, ¿Cuánto nos pagarían por él? –Pregunto Nano. – si, se les va la vida en ese reloj

-Eso es un chantaje –Lo mire incrédula de sus palabras. –

-Si

-¿Has perdido la cabeza? –Pregunto Samuel molesto. –

-No, la estoy usando. Puede ser la oportunidad para salir de la mierda

-O la de volver a entrar a la puta cárcel

-Parece que aquí todo mundo me ignora –murmure mirándolos discutir, voltee a ver a Marina quien se desmayó en ese momento. –

La tomó entre sus brazos Nano para subirla a mi auto, los lleve directo al hospital y luego de asegurarme que entraron conduje rumbo a mi casa, necesitaba pensar bien qué haría, marcar un plan.

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Llegue a las Encinas y mire a Guzmán sentando en las escaleras, así que fui y me senté a su lado

-¿Qué escuchas? –pregunte cuando el volteo a mirarme. –

Sin más que decir me dio uno de sus audífonos, para escuchar la canción que estaba sonando

-¿De verdad crees que con lo que ha hecho voy a verle a la cárcel?

-No se... se merece una oportunidad, ¿no? Para explicarse y es tu padre

-Es un ladrón –dice molesto. – le ha robado hasta a su familia, no se merece nada

-Mira, lo que merece debería decidirlo un juez, la familia esta para apoyarse siempre, ¿sino para qué sirve?

-¿De verdad crees que debería ir?

-Yo creo que es lo que él haría por ti y si no te sientes muy seguro, yo te puedo acompañar –murmuró tomando su mano. – siempre te voy a apoyar

Después de las clases, salí junto a Guzmán y lo lleve a donde se encontraba su padre, estaba nervioso podía notarlo por la forma en que movía su pierna, al llegar al lugar me quede en el estacionamiento para esperarlo. Pasaron por lo menos unos diez o quince minutos cuando el salió y me abrazo.

-¿Estas bien? –pregunte apenas lo tuve en mis brazos. –

-Mejor, gracias a ti

-No tiene importancia

-No, si tiene importancia Ro –Toma mi rostro entre sus manos. – siempre has estado para mí, apoyándome en todo, has sido un ángel en mi vida, no sabes lo mucho que te amo

-Siempre estaré cuando me necesites, somos Romina y Guzmán, ¿no? –me dio un beso. – yo también te amo

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He vuelto, después de mil años sin actualizar por fin pude hacerlo