Quiero besar tu sonrisa

Capítulo 9

Los dos pacientes que ingresaron anoche les acabo de dar el alta.

Michael, sige en coma... Y lo seguirá durante unos días, sus pulsaciones, el electro marca bien su frecuencia cardíaca pero el cerebro apenas da respuesta,esto es largo...

Habitación 212

"Señora Aurora, vengo a decirle que mi turno acabo vendré mañana por la mañana,  sobre su hijo estate tranquila esta en buenas manos,  yo llevo todo su historial clínico soy su doctora si necesiga mi ayuda,tenga este es mi número de teléfono no dude en llamarme, afuera verá más médicos pero si necesita que yo le atienda en algo, házmelo saber, por lo demás va mejorando la noche la paso mejor sus pulsaciones tienen mejor pinta y su frecuencia cardíaca va subiendo,por lo demás háblale, hoy por hoy independientemente del grado de procesamiento y comprensión de los estímulos que le lleguen, producen algún tipo de reacción mientras haya una mínima actividad cerebral. Por ello algunos médicos recomendamos el contacto físico y el hablarles con el fin de que perciban nuestra presencia. Es un proceso parecido al que hacemos con un bebé recién nacido, que de seguro no entiende ni una palabra de las que digamos, pero que se calma y se serena en los brazos de su madre o que se altera si del exterior recibe demasiados estímulos o de mucha intensidad”

" Gracias Doctora Miller si necesito su ayuda, contactare con usted señorita"

"Nos vemos mañana Aurora"

"Chelsea, ¿vienes?"

C subió a mi coche como de costumbre por el camino hablamos sobre aquella noche la que pasamos con mucha intensidad nervios y angustia, la vida de ese hombre estaba en peligro y nosotras llevábamos sus riendas.

"¿Quieres venir a casa y conoces a Maya?"

"Perfecto, tengo muchísimas ganas de verla, aunque estoy muy cansada no tardaré en irme a casa"

¡MAYA,  mamá esta en casa!

Ay venia mi bolita de pelo tan pequeñita y a la vez tan grande, mi casa era otra su presencia inundaba todos los rincones de la casa de felicidad.

Después de haber pasado un rato en casa con Chelsea viendo a Maya,  la lleve hacia su piso, allí nos despedimos hasta mañana donde nos esperaba otro gran dia de trabajo.

Ya en casa no podía dejar de pensar en el en ese muchacho al que hace apenas horas la vida le salve, por suerte o desgracia consciente no estaba, pero su corazón latía que era lo importante.

Tenia algo en mi cuerpo que no era normal,  llevava sin sentirme asín desde hacía mucho tiempo, tenia necesidad de ir a verle de ir ha hablarle y de acariciar su rostro.

Habitación 212...

Allí está parece un ángel caído del cielo, nose por que pero tengo la sensación en mi cuerpo de que el, formará parte de mi vida de un día para otro mi vida a cobrado sentido, quisiera saber el color de sus ojos, quisiera escucharle hablar,quisiera conocerle y que por alguna razón no saliese de mi vida ¿Pero como puedo pensar todo esto? Apenas lo conozco, de echo nunca he entablado ninguna conversación con el, no le conozco pero aun sin haberle conocido creo que me he enamorado de el,  mi vientre experimenta sensaciones que nunca antes he llegado a experimentar, mariposas revolotean por dentro de ella.

Tan solo... Quisiera que abriese los ojos y me dirigiera alguna palabra.

Aquí me encuentro acariciando su pelo mientras a la vez voy diciéndole

todo lo que mi cuerpo siente y esta experimentando por dentro, el porque vine a verle, lo necesitaba, apenas lo había conocido y ya le echaba de menos, necesitaba estar a su lado y que el sienta que desde que entró aquí jamás me he querido separar de él, jamás.

"Doctora Miller" era Aurora. ¿Que hace usted aquí señorita,no vendría mañana?

"Aurora, no podía sacarme de la cabeza a su hijo,necesitaba venir a verle no se por cual razón, pero mi corazón me lo pedía a gritos, y... Y de paso le traje un termo con zumo de naranja y unas tostadas con mermelada de fresa, esa receta era de mi madre,no son normales las típicas, tienen un pequeño secreto ya sabes... Una receta de madre e hija" Le sonrió mientras le doy todo lo que traje para ella.

"No tenias que molestarte señorita, es usted muy agradable y muy buena al haber venido haber a mi hijo,sea cual sea la razón por la que necesitabas verle lo has echo y llevarás casi un día entero sin dormir,y aquí estas eres muy simpática doctora.

"Kathe,me llamo Kathe,  llámeme asín, no se moleste en decirme siempre Doctora"

"¡Kathe que bonito nombre!,  sabes me he pasado toda la madrugada hablándole no he dejado ni un solo segundo en hablarle. Se que saldrá de esta mi hijo es muy fuerte,todo lo que se ha propuesto en la vida de una manera u otra con lucha y perseverancia lo ha conseguido, así que confío en el" Me decía mientras me sonreía con ojeras en los ojos.

"¿Aurora quiere irse a casa a descansar un rato? Aunque sea un par de horas me quedare con su hijo siempre que quiera"

" Oh no, por dios Kathe deberías de irte tu a descansar que no has tenido una noche muy tranquila,mañana será otro día y te tendré aquí todo el día para ariba para abajo descansa de verdad no te preocupes por mi "

"Esta bien Señora Aurora, mañana nos veremos si necesita algo ya lo sabe" Asentio con una sonrisa pequeña en su cara.