Prologo

3 1 0
                                    



 aquí estoy yo Eiden Revnkov, un chico de Klaipeda de ojos celestes, pelo rubio y alto. donde vivo es en una ciudad  de tan solo 152.000 habitantes, quizás piensen que es mucho pero créanme que no.

Seguramente se preguntaran como es mi vida, bueno no muy interesante realmente. mi padre me abandonó cuando era tan solo un niño y ...¿mi madre? bueno ella se unió al mundo del alcohol y las drogas. 

Ahora mismo estoy caminando por el hermoso bosque, aquí es donde me escapo de las personas, los problemas, todo.

Últimamente asocio los problemas con las personas, porque son sus acciones las que conllevan a un problema, no? creo que la peor especie son los humanos, al tener el conocimiento tenemos poder, ese poder que no sabemos controlar, somos egoístas, tratamos de controlarnos pero luego todo explota como una granada en plena guerra y ahí es donde todo empeora, al controlarnos tanto tiempo en un momento esa acumulación de enojo, ira, fama, ganancia simplemente sale y es donde no podemos controlar ese"poder".

     Lia smirnov

- Realmente tengo que ir a ver al abuelo mamá?- pregunté resoplando

- Sabes que no lo vemos hace mucho Lía- mi madre arruga su nariz mientras dobla la última tanda de ropa para poder llevarlo hacia su valija.

suspiro y camino hacia mi espaciosa pero no tan grande habitación.

Mis padres están separados así que me tocaría este verano estar con mi mamá, no es que me queje pero desde el divorcio de mis padres, mi mamá ha estado muy cargosa, cree que voy a caer en alguna depresión o algo así pero la realidad es que no me importa, de hecho dudo mucho que ellos se hubiesen amado alguna vez, recuerdo un dia en primaria, la profesora nos dijo que hagamos un dibujo de amor, todos dibujaron a ellos con sus padres, yo dibuje un helado de fresa. eso es lo que significa el amor, nada, no creo en el amor, es una excusa estúpida que inventan los humanos para poder estar con alguien y no morir solos.

Me dirijo hacia el comedor y me quedo observando el gran cuadro donde está  colgada en la gran pared blanca de yeso, ese cuadro debe valer una fortuna, pienso. mi mirada se dirige ahora hacia el sillón negro de cuero donde ahora descansan maletas y mochilas, solo nos iremos unos meses pero mi madre siempre exagera con la frase "es mejor llevar de más a que falte".

Doy una última mirada a la casa, agarro mis pertenencia no sin antes ponerme mis auriculares e irme hacia aquel auto negro que nos llevaría al aeropuerto.


Eiden Revnkov

Doy un portazo avisando que ya estoy aquí, observo todo a mi alrededor, botellas tiradas, papeles en el piso, alguna que otra jeringa.Subo las escaleras de madera vieja,  la cual ya tendría que pintar, camino por el gran pasillo de paredes verde oscuro dirigiéndome hacia mi habitación, estoy por abrir mi puerta y..

- Tu padre vino- Habla aquella mujer de ojos celestes y pelo negro, la cual es mi madre.

- Que quiere?- Pregunto con un tono cansado y agobiado.

- Dijo que tiene una misión para ti, una chica, hija de un Ángel que tuvo con un mortal.- Se agarra la cabeza y camina hacia mi.

- Y que quiere que haga? no entiendo- Le dijo ya enojado.

- Lo que quiere es que.... lo que quiere es que la enamores y la mates- dice tartamudeando.

- Está loco si cree que hare eso- me rió irónicamente.

- Lo tienes que hacer Eiden, no tienes otra- me agarra de las manos y me observa.

- Y si no?- la miro amenazante con mis ojos celestes que hipnotizan.

- Sabes que ese truco no funciona conmigo, soy tu madre - suspiro y ella agrega- si no lo haces tu padre te llevara para que ocupes su lugar en el infierno, y los dos sabemos que tu no quieres eso.


 mierda, Asi que tendre que matar a esa chica.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 25, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Inside The DevilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora