Ninfómana © [+18] (✔️)

Capitulo 39

Madrid, España.

Quince años después.

-Ya puede salir, ahora usted es libre- salgo por las grandes puertas del lugar donde estaba encerrada.

La luz del sol hoy se siente deliciosamente caliente, el cielo azul se muestra tan claro, como la vez que me entregué, cierro los ojos, mis lagrimas no son retenidas y exploto en llanto.

No sabía cuanto deseaba poder ser libre, siento unos brazos envolverme y su maravilloso olor llenan mis fosas nasales.

-Bienvenida Sammy, estas de vuelta- besa mi frente y me aprieta mas en su abrazo.

-Ya llegue, Maik- mis manos van a parar a su cuello, y su boca encuentra la mía para fundirnos en un beso lleno de sentimientos.

Extrañaba tanto esta sensación, se siente calido y extrañamente bien, nos separamos y yo me quedo tiesa en mi lugar viendo en una sola dirección.

-¿Como...¿Tu estas...Vivo? Pero...que- mi ojos no pueden apartar la mirada de él, es imposible, yo lo vi muerto, no respiraba.

-Pues ya vez que estoy aqui, quizás no entero pero vivo si estoy- lloro con mas fuerza y corro a su encuentro, me arrodillo para abrazarlo.

Mojo su camisa con mis lágrimas, el alivio y todo aquel dolor acumulado por su supuesta muerte son depositados en cada una de las gotas saladas que bajan por mis mejillas.

-Creí... que te había perdido- mi voz suena temblorosa- te extrañe tanto, no sabes cuanto deseaba verte de nuevo, con tu sonrisa y tu extraño humor- lo abrazo con mas fuerza, queriendo asegurarme de que está aquí conmigo.

-Ya, tranquila estoy bien- da palmaditas en mi cabeza, tratándome como una niña, nunca cambia.-Deja de llorar, no es para tanto.

-Idiota, ¿Como puedes decir eso? Claro que es para tanto, se trata de ti- hago un puchero, veo sus varoniles facciones, recordando sus lunares, pecas y las nuevas arrugitas en la esquina de sus ojos- No te vuelvas a ir, te extrañe, Lou.

-Lo se, siento no haber venido a verte, estaba en EE.UU, mis análisis para mis prótesis llevo muchos años, y aun ahora no las he estrenado, lleva meses acostumbrarme y la verdad quería estar presente en tu salida.

-Me diste una gran sorpresa.

-Y la que yo te daré, mucho mas- volteo hacia su dirección y está arrodillado en el suelo, una caja de terciopelo azul rey es abierta dando vista a un hermoso anillo de oro blanco con pequeños diamantes incrustados al rededor.-Sammy, te amo y te lo dije, te convertiría en mi esposa y aquí estoy, nervioso hasta la mierda pero con el valor de decirte...¿Quisieras ser mi esposa?

Mi boca queda literalmente abierta, la sorpresa esta completamente dibujada en mi expresión y las palabras no salen, quiero decirle que si pero solo sale un sonido de mi garganta, trago saliva y allí es cuando me lanzo hacia el para abrazarlo.

-¡¡Si!! ¡¡Si!! ¡Mil veces si!- lo beso y el me pone el anillo en mi dedo-Te amo, no sabes cuanto lo hago.

-¿A si? Pues dime, porque ahora ya no te dejaré ir- me agarra de mis caderas y yo de su cuello, nuestros rostros quedaron tan cerca que simplemente me perdí en su mirada.

-Felicidades chicos, en serio me alegro por su matrimonio pero no me ignoren ¿Quieren?- y nuestra burbuja de amor fue destruida por Louis, valla momento tan inoportuno- Lo siento, pero en serio, no estoy pintado en la pared, ahora acerquence.

-¿Para que?- la confusión aparece de repente.

-Pues para darles un abrazo de felicidades- dice con ese tono como que "Obvio y Duh"- vamos no se hagan de rogar- nos hace señas de que nos acerquemos.

-Bueno pues, ¿Que mas da?- dice Maik encogiendoce de hombros.

Nos acercamos y el abrazo llega con mucha fuerza, las sonrisas de nuestros rostros serán difíciles de quitar, la felicidad nos envuelve y luego de unos largos minutos al fin nos separamos.

-¿Y ahora yo para donde pego?- vengo a caer en cuenta que no tengo a donde ir, mi departamento lo mas probable fue vendido, mi auto también y mi dinero igual, no tengo nada.

-¿Como que adonde? Pues a nuestra casa- alzo la mirada que hasta hace un momento la baje inconscientemente- o acaso te olvidaste de que eras y eres mía- niego y lo miro con mucho amor- te tendré conmigo siempre- besa mi frente con cariño y al fin nos vamos.

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La casa es hermosa, con el espacio suficiente y su decoración me encanta, tiene un jardín amplio y una alberca para nadar en verano, las paredes exteriores son de color azul claro, ventanas blancas con vidrios tipo espejo, la puerta principal es de caoba y su interior me dejó encantada.

En el salón hay una alfombra de color negro con blanco y los sillones son muy acolchados de color blanco y café, con una mesa del centro de vidrio, las paredes son color rosa palo y hay una chimenea, que para un invierno es increible acostarse frente a ella.

La cocina es hermosísima y muy moderna, los muros son de una baldosa de mármol negro y las alacenas son blancas, es muy amplia y esta demás decir que el piso baldosa pulida blanca, el baño del primer piso es grande, tiene una ducha que sus paredes son de acrílico transparente, el retrete es azul y un lavamanos grande azul con tres cajones de madera.

Hay dos habitaciones en el primer piso y en el segundo hay cuatro, todas con baño propio.

-Ven, vamos a nuestro cuarto- Maik me coje de la mano y jala suavemente hacia las escaleras, pasamos por un pasillo y dejamos atrás tres puertas de madera negra y nos detenemos en la última habitacion, la del fondo, el abre la puerta y lo que veo me deja maravillada.

Los colores, blanco, negro y rojo predominan la habitación, hay un ventanal inmenso que da vista hacia la alberca en el patio trasero, hay dos puertas, abro una y es el baño, la bañera es mucho mas grande que la del primer piso y la ducha también, esta de mas decir que el baño es de color blanco y su piso negro.

Salgo del baño y abro la otra puerta, es un vestidor, en un lado hay ropa de hombre y muchos productos masculinos y el lado de el frente está desocupado a si que deduzco que es mi lado para poner mi ropa, Dios amo esta casa.

Salgo y observo detalladamente el dormitorio, hay una cama king size en el centro, y dos mesitas a los lados con una lampara encima de cada una, esta tendida con una sabana roja y almohadones negros, hay una alfombra que tapa casi todo el dormitorio de color negro y hay un tocador, un televisor pantalla plana gigante empotrado a la pared y un dvd con un cajón lleno de peliculas, en una esquina hay un sillón grande de color blanco y negro, en el techo, encima de la cama hay un espejo grande que descubro su función.

Miro a Maicol fijamente y le guiño un ojo señalandole el espejo, el me da una sonrisa coqueta que luego se vuelve sensual al morder su labio inferior.

Es una clara invitación para estrenar este lugar, lo cual no voy a rechazar.

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Gracias a todo aquel que llegó hasta aquí y los dejo con el Epílogo.

Se despide 》Sara Sanchez《

CORREGIDO.