reencuentros parte 1

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Luego de aquel desayuno lleno de juegos y de muestras de afecto. La mujer sale del baño colocando su bata blanca de seda, taconeando hacia el sofá, resoplando al ver al menor casi ya cambiado.<- Sabes que no me gusta que hagas estas cosas, ni que fuera un servicio lo que me das. ->Se sienta en el diván frente al sillón de un cuerpo, cruzando sus piernas, extiende su pie hacia el pecho del joven. Llamando por completa su atención.<- No fue mi intención, pensé que estabas apresurada debido a tu agenda. -> Tomando suavemente el pie, comienza a hacerle un leve masaje, manteniendo su mirada sobre la mayor, quién se reacomoda al sentir aquel mimo.<- Las visitas de ese tipo no me apresuran en lo absoluto… mmm~ es el baile nocturno el que me tiene preocupada. ->Relame leve y lentamente su labio inferior, sintiendo un gran relajo debido al masaje.<- ¿Otra fiesta más? ->Bufa cual pequeño, sabiendo que en esas ocasiones no deja de ser solo un adorno junto a ella.<- Quiero que te veas muy bien, y cuida tus acciones. La última vez que ofrecí aquel gran banquete, muy mal me has dejado en sociedad. -> Levantándose del diván, se coloca sus zapatos nuevamente, caminando hacia el vestidor. Dejando al joven para que se termine de acomodar la ropa y poder acompañarle.<- ¿Sabes algo, Seung? Iremos de compras, pues de seguro que está visita no tendrá nada bonito que ponerse. ->Dejando la puerta entreabierta, comienza a cambiarse sin apuros, una blusa y un pantalón ajustado; siguiendo por secar sus rulos y terminando por maquillarse. Saliendo de allí, se coloca sus alhajas, caminando luego hacia la puerta de la habitación. En cuanto el menor le abre, ella sale primero, manteniendo su postura firme, mirando al joven de reojo, detallando que nada este fuera de lugar. Dejando así su mirada enfrente, baja hacia la sala principal, observando que a los pies de aquella escalinata, se encuentra el mayordomo con una bandeja de plata y una carta sobre esta. El joven detiene sus pasos al ver dicha escena, esperando que aquel mensaje no esté relacionado con asuntos de transmissiya.

Tan solo despertar,sintio el frio que seçki colaba por la ventana, se había quedado dormida frente a su laptop en el escritorio, esta trabajando en un diseño de una oficina para un cliente regular, teniendo días sin dormir, basto solo cerrar sus ojos para descansarlos, miro la hora en la pantalla y se levanto al ver que ya era tarde, fue al baño abrio la ducha caliente, cinco minutos después estaba fuera de la ducha envuelta en su toalla, vistio una camisa lila satinada, un pantalón negro y tacon, tomo la secadora, seco su cabello y lo dejo de forma libre con unas ligeras ondas, un maquillaje sencillo y baki a la cocina tomo un pan tostado lo puso en su boca, busco en la sala la carpeta y la metio a su maletin de trabajo, dirigiendose a la puerta, al abrirla choco con con una superficie dura, levanto ıa vista para ver de frente a su puerta, creyendo seria algún vendedor pero al escuchar su voz, sacandola de su error— ¿Hae Soo, estas bien? -ayudo a incorporarse, al parecer no había daño alguno- Ehh, s.. Si, lo siento, se me hizo tarde, pero ya iba en camino! -aseguro, quitando el pan de su boca- Se nota ¿no has desayunado? No importa, sube al auto, te llevare a desayunar y después iremos a donde acordamos —¿acaso no es perfecto? No sólo vino hasta mi casa por mi, se preocupa por mi, desde que murieron mis padres en ese trágico accidente, el me ha apoyado al cien por ciento, nunca me deja sola— subio al auto dejando el suyo en el garaje- ¿Y? A donde iremos a desayunar? Italiana, francesa? -el reía encantador cuando subió al auto, abrocho primero el cinturon de seguridad de ella, despues el suyo- Te parece un bistro francés? El café allí es delicioso Bistro será! -condujo hasta el sitio, el edificio era elegante, fácilmente identificas una bandera francesa y una coreana ondeando arriba del inmueble, entrando los recibio un empleado este los guió a una mesa, un camarero les llevó la carta de desayunos donde ordenaron café, jugo de cítricos y para mi ella tartaleta de pan de almendras con salsa de pistachos.

Ella susurra a su sirviente, volteando hacia el menor, con una sonrisa ladina.- Vamos encanto, el chófer nos espera, no queremos atrasar una agenda ocupada, ¿O si? -Solo asintiendo ante sus palabras, el joven apresura sus pasos, hasta quedar junto a la mayor.- Noona, a quien menos quiero hacer esperar, es a usted. -Perdiéndose en la mirada de la mujer, el chico camina como su estuviese hipnotizado por ella, procurando cuidar cada detalle en su camino.- Seung Hyun… eres hermoso pequeño, eres exactamente lo que siempre espere. -Acariciando suavemente la mejilla de su acompañante, la dama sonríe dulcemente. En lo que camino hacia el centro comercial, ambos conversaron de ciertas controversias, y acordando nuevas actividades para hacer en sus tiempos libres. -Bien cariño, se ve que la visita de hoy vendrá más tarde, ya sabes, gente que no sabe respetar horarios y demás, por lo que te agradecería que me ayudes a elegir algo para ella. -Baja del auto cual corona, tomando luego el antebrazo del joven, dirigiéndose así, hacia adentro del recinto. Ya sabiendo que este está infestado de securatas, además de que solo personas prestigiosas ingresan a este sitio.<- Será todo un honor ayudarte, en todo lo que me dejes. -Acariciando levemente la mano suave y cálida de la mujer, le observa cual Van Gogh.- Pórtate bien, y tendrás una recompensa en la noche. -Susurra ingresando a visitar a su diseñador favorito, quién la espera con telas que siquiera aún han visto un filo.

Por qué derepente tan serio? ¿Eh? No es algo importante anda termina de almorzar o llegaremos tarde Esta bien -continuo con aquella tartaleta, pero se sentía inquieta, todo estaba normal desde que llegamos al bistro pero un mensaje lo ha puesto serio, a veces quiero que el me tenga más confianza- penso mientras terminaba su tartaleta- ¡Listo, vamos!- Muy bien, cariño -el llamo al mesero y lo vio buscar algo y derrepente, la miro sorprendido y apenado- cariño, pensaras que soy un tonto, olvide mi billetera, pagas esta ocasión? te devolveré el dinero en el auto -sonrie divertida y de su bolso tomo su cartera, saco su tarjeta y se la dio al camarero- !eres tan distraído, no te preocupes, esta vez invito yo! -regreso el camarero con su tarjeta y salieron del lugar- Y... ¿como va el trabajo? -Va bien, de hecho anoche me quedé hasta tarde diseñando la oficina de varias maneras para darle a mi cliente varias opciones, espero que elija una- el camino s su lado notando como ella empieza a balbucear gracias a su nerviosismo, en un momento dado antes de subir al auto le rodeo con sus brazos y la envolvió en su sola esencia- tranquila todo irá bien, eres buena, anda vamonos ya-beso su frente y abrió la puerta del auto, en cuanto subio ella, el cerro la puerta y el tomo su lugar en el volante, realmente ella no cree merecerlo.- 12/01/20 9:58 a. 

Hola ¿Como estan? Espero que bien estamos en cuarentena recuerden mantener su sana distansion y lavar sus manisaspor con agua y jabón

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⏰ Última actualización: Aug 26, 2020 ⏰

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