"El nuevo arcade de videojuegos, Deathscape, abre sus puertas en el centro de la ciudad. Cientos de niños estan aguardando a que abran las puertas para poder disfrutar una increible experiencia. Podría decir que todos los jóvenes de la ciudad estan aquí hoy.."
Patrick apagó la televisión y dejó el control sobre su cama en lo que pasaba a su lado hacia el baño. Abrió el espejo revelando un botiquín y rebuscó en el, sacó un cigarrillo. De su baño privado fue en dirección al balcón y se apoyó en el borde para quemar la punta del cigarro con un encendedor de plata. Mientras que con una mano manipulaba el cigarrillo, con la otra sostenía el encendedor, moviéndolo entre sus dedos. Dejó salir el humo de su boca, creando una delgada nube que desapareció enseguida, entonces bajó la mirada contemplando la altura.
-¿Cuantas veces lo consideré un medio de escape?- dejó caer las cenizas desde el balcón- Que iluso
-¡Patrick,por el amor de Dios!
Rodó los ojos y volteó, su madre había ingresado a su cuarto, vestida para quien sabe que evento al que seguro se veía obligada a asistir. Eleanor Melrose se abrió paso esquivando ropa y objetos hasta llegar a la entrada del balcón.
-¿Podrías ponerte algo encima?
Patrick se miró, estaba igual que como había llegado al mundo. Arrancó una hoja de la planta que crecía allí como única decoración y la puso frente a su entrepierna.
-¿Mejor?
-Santo Dios. ¿Por qué haces esto?
-Es propiedad privada, nadie entrará al jardín y me verá desnudo
-Tu padre lo hará y se pondrá furioso
-David puede meterse en sus propios asuntos. Ademas me ha visto así varias vec..-
Una bofetada le cruzó el rostro, el cigarrillo cayó por el balcón. Eleanor mantuvo el ceño fruncido por unos segundos, pero cambió enseguida al darse cuenta de lo que hizo.
-Patrick,lo siento mucho. No quería..-
-No,no. Está bien- se volvió para apoyar los brazos en el borde- ¿A qué fiesta van esta vez?
-..Fue invitado al festejo de un Buffett de abogados
Patrick no respondió. La mujer se tomó las manos con pena, soltó un suspiro y dio la vuelta para irse.
-Madre
Eleanor giró a verlo, aunque solo pudo ver su espalda
-Te ves hermosa
-Gracias,tesoro
Cuando estuvo solo otra vez, volvió a mirar hacia abajo. Otra vez veía una piscina en el suelo, la cristalina agua le insitaba a saltar. Sus manos se aferraron al borde con fuerza, sacudió la cabeza y se empujó con las palmas para regresar a la habitación.
Revisó con la mirada su cuarto, se decidió por un polo azul oscuro, pantalones caqui, zapatos negros y lentes de sol. Su cabello lo había dejado crecer un poco, se lo echó hacia atras, arregló el flequillo y finalmente guardó el encendedor en su bolsillo trasero junto a su teléfono.Abrió la puerta sigilosamente, miró al rededor y se escabulló con mucho cuidado de la casa. Una vez salió al gran patio que rodeaba la mansión, tomó carrera y huyó del lugar pasando por las grandes rejas que cerraban la propiedad. Ya fuera, encendió otro cigarrillo y mientras fumaba sacó su teléfono para enviar un mensaje. En su espera vio como el cielo se volvía gris y el clima humedo, pesado, su cabello probablemente estaba rizado y no simplemente ondulado como lo había dejado. Las primeras gotas comenzaban a caer cuando su amigo apareció.
-¡Patrick!- Johnny detuvo su moto frente a él y le lanzó un casco- ¡Deprisa!
Se puso el casco y subió detras de su amigo, se sostuvo de su cintura. La motocicleta avanzó por el asfalto mojado, la lluvia caía fuerte sobre ellos, el sonido de las gotas contra los cascos hacían eco dentro de estos. Johnny alzó una mano para hacer una seña a Patrick y redujo la velocidad para doblar en una esquina, cuando divisaron una multitud supieron que habían llegado.
Johnny encadenó la motocicleta a un poste de luz y siguió a su amigo entre el mar de gente. Patrick arregló su cabello, se puso los lentes oscuros y se acercó a la entrada. Entre el viento, la lluvia y la larga espera los muchachos comenzaban a cansarse de estar ahí, pero nadie cedía. Nisiquiera los reporteros, que seguían allí con cámaras, micrófonos y ahora paraguas. El arcade no era exclusivo para alguien en específico, pero con un poco de persuasión algunos podían adelantar su ingreso, así lo hizo Patrick. Sobornó al guardia y este le dio el paso a él y su amigo, pero un chico mas entró con ellos.
-Oye- Patrick volteó al oir al guardia. El hombre sostenía en alto a un chico del abrigo,- ¿viene contigo?
Patrick lo miró, el chico colgaba como un cachorro asustado por ser atrapado. Le pareció patético.
-No
Se dio la vuelta adentrándose mas al lugar, el chico fue regresado a la multitud. Patrick pasó entre las máquinas de videojuegos, revisando y analizando, Johnny caminaba a su lado.
-Creí que no tenías permitido venir- comentó el de rulos
-No tengo permitidas muchas cosas- sacó un cigarrillo de su bolsillo junto al encendedor de plata
-¿A dónde fueron esta vez?
-Un Buffet de abogados
Una alarma sonó, se escucharon gritos de emoción. Patrick abrió el encendedor que automáticamente mostró una llama y lo acercó al cigarrillo. Una multitud de chicos de todas las edades irrumpió en el lugar, los amigos fueron empujados y el encendedor cayó de su mano.
-Mierda
Alguien que los empujó pidió disculpas y pasó por su lado pateando el encendedor hacia el mar de zapatillas. Patrick no pudo hacer mas que maldecir y tirar irritado su cigarro al suelo. Ahora estaban rodeados de chicos riendo y ruidosas maquinas soltando chillidos, Patrick se quitó los lentes irritado, solo podía esperar a que se vaciara el lugar y rogar porque nadie lo haya tomado. Ese simple objeto era demasiado importante para él.
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Eso es mío (Lestrick)
أدب الهواةHay un evento al que todo niño y adolescente quisiera asistir, la inauguración del Arcade mas grande de la ciudad. Miles de chicos esperan en sus puertas para luego acumularse en el interior, cualquier cosa puede pasar allí dentro y habría pocos tes...