Art • SoonHoon

It was like a million times

En esta ocasión no hubieron más reclamos ni gritos, solo están ambos viendo algún punto de aquel lugar. Cualquier cosa que dijeran podía rompan más aquella amistad.

—Debes irte.—Jihoon había roto el silencio.—te esperan.

—No me iré hasta saber que estarás bien.—Soonyoung si parecía preocupado.—eres mi mejor amigo y no te quiero perder.

—Ya no será lo mismo, pero aquí estaré siempre.—ni el mismo Jihoon podía creer lo que decía.— se feliz.

Soonyoung no pudo evitarse ir hacia su lado y abrazarlo, no quería sentir que aquello era una despedida, perder a Jihoon solo era algo que aparecía en sus peores pesadillas. Ambos se necesitaban para estar bien, eran el complemento del otro.

—Ve.—dijo el bajito aún siendo abrazado por Soonyoung.

—Vendré a visitarte.—esa promesa era algo que Jihoon sabía que su amigo no cumpliría.

Unos segundos más de aquel abrazo que era uno distinto a todos, una mirada preocupada de Soonyoung acompañada de una sonrisa forzada y al final la silueta de este saliendo de su casa. Jihoon volvía a estar solo y a pesar de que Soonyoung había vuelto ya no era solo suyo, su amor no sería solo para el. No quería compartir a su amigo con nadie.

—¿Estas mejor?—la voz de DongYul sacó de sus pensamientos a Jihoon.

—Jamás vuelvas a llamar a Soonyoung, así yo me esté muriendo.—ordenó el bajito.

—Pero es tu amigo y se ve que se preocupa por ti, esta mañana fue el primero en querer venir a verte.—explicaba DongYul.—no creo que debas alejarlo. Es tu mayor apoyo.

Claro Soonyoung era su mayor apoyo, de hecho el único, pero no podía verlo con alguien más y no quería hacer partícipe aquel individuo extraño en su vida pues ya no ocupaba más críticas y opiniones, ya tenía mucho con que controlaran su trabajo.

—Solo no lo hagas.—dijo Jihoon viendo seriamente a su representante.—algún día Soonyoung tendría que irse de mi lado.—él jamás pensó que algún día diría aquello.—iré a trabajar un rato.

Jihoon volvió a su taller de trabajo, tenía que limpiar e intentar crear algo, solo así DongYul lo dejaría en paz unas semanas.

Los pinceles y pinturas estaban listas, pero Jihoon seguía estando estático no sabía que hacer y ninguna idea fluía por su mente, solo tenía la imagen de Soonyoung y su nueva pareja. Wonwoo. Aquel chico que parecía tenerlo todo pues había logrado conquistar el corazón de Kwon Soonyoung y así llevándoselo lejos de él. Con aquella imagen tomó un pincel y su primer color, empezando a realizar su primera pintura en la que dejaría plasmado cómo se sentía en ese momento donde estaba pensando en aquel intruso.

Aquello sería la inspiración para su futura exposición, siempre le decían que no debía mostrar tanto lo que sentía mediante la pintura, pero ya se había cansado de eso y ahora quería mostrarle a todos que no era el artista perfecto. Ese primer cuadro era para Jeon Wonwoo.