One-shots del papucho este (Alastor x t/n)

💃Este es mi hogar🍴

Acababa de llegar a Lousiana una mujer mayor de 60 años, la señora Anna Felcht.

Ella era muy reconocida por tener grandes compañías mineras en todo el continente americano, junto a ella viajaba su ama de llaves y única amiga, que rescató de una mina del altiplano.

Se llamaba t/n, una joven mujer de piel morena, no era ni gorda ni delgada, la suficiente masa como para cargar algunos muebles y las cosas de campo para Anna, sin duda era trabajadora y alegre

La joven le cantaba algunas canciones de su pueblo y bailaba para entretener a las visitas de su patrona.

Su "alegre bailarina", asi la llamaba al presentarla a sus visitas de fin de año.

t/n acompañaba a la señora Anna a todos sus viajes de negocios, cocinaba para ella, y la ayudaba a caminar cuando no tenía un perro guía, pues ella no veía tan bien como hace 30 años.

Anna dejaba a t/n mucho tiempo encerrada en su casona, para recompensarle le dejaba cantar en el balcón o usar el tocadiscos con sus mejores canciones de fiesta.

Solo la ponía cuando su señora estaba de viaje, pues la música no era mucho de su agrado, t/n tenía influencia gitana por parte de unas sirvientas que vivian con ella en la casona anterior, ellas la criaron por 10 años, pues Anna la acogió en sus brazos cuando era una niña que apenas podía hablar correctamente.

Pov t/n

Ya estabamos llegando a nuestro nuevo hogar, la señora Anna me dijo que era un lugar fresco y que este tenía tantas habitaciones como la anterior ha de ser muy espaciosa.

Ibamos en un carro negro yo tenía a la mano el abanico de mi señora y una cesta con algunos bocados para el camino pues no habíamos comido nada desde que llegamos a la ciudad.

Acomodé algunos mechones de mi cabello que se escaparon del agarre que les hice, no me gustaba mucho este tipo de lugar, cada vez hay menos  árboles y flores, las ciudades tienen un aspecto a muerto.

No tienen mucho color, no inspira alegría, pero bueno, quien piensa en alegría  en estos tiempos.

Anna estaba transpirando de nuevo, abrí el abanico de plumas y le hice aire para que no se ahogara o algo por el estilo, ella traía una pañoleta en el cuello, eso le daba más calor pero se negaba a quitarselo, era un regalo de su hija que ahora se encuentra en Europa con su familia.

Después de media hora llegamos a nuestro destino, era una bella mansión de 3 pisos con terraza, todo de colores claros, tenía muchas flores y árboles frutales algunos los conocía pues eran comunes en mi país.

Sabía que lo había hecho por mí, pues Anna desconocía de los frutos de mi tierra natal, debió mandar a conseguir plantines o semillas, se ven tan bien cuidados.

t/n: Oh señora Anna, es tan bello aquí las flores la casa.- la tomé del brazo para ayudarla para bajar las escaleras

Anna: Pequeña me alegra que estés así de alegre -.se apoya en la mecedora que está cerca del patio-. este lugar se siente muy bien.

t/n: Así es, quédese aquí un momento, iré a acomodar sus cosas en su habitación.

Anna: t/n espera un momento, tu no sabes cual es mi habitación.

t/n: Pues conociendola a usted debe ser una con el marco de puerta más
elegante del lugar, además que debió encargar plantar jazmines cerca de su ventana.

Anna: Aveces pienso que debería conocerme mejor a mi misma, pero tu me ganas. Esta bien, ve querida yo haré unas llamadas a unos amigos de por aquí. Talvez nos den un tour rápido, para no preguntar cada vez que alguna salga de aquí.

t/n: Claro, con permiso -. me retiré a la puerta de ingreso y veo pasar por ahí algunos pajaritos, realmente bello.

Tomé un par de cajas con sus retratos y cosas de tocador de la señora Anna y fuí a buscar su habitación. Suerte que no me equivoqué con lo de los jazmines, este lugar a ratos confunde, pero me tengo que acostumbrar. Después de todo es mi nuevo hogar.

Para al final de la tarde cuando la luna empezaba a asomarse en el cielo logré terminar de acomodar todos las cosas, seguro la señora iría a conseguir más adornos para rellenar los espacios vacios, a ella no le gusta dejar nada sin decorar, pues siente que ahí estaría la soledad vigilándola.