Una pintura más, otra fiesta a la que ir y de nuevo una noche con pesadillas. Dos semanas sin Soonyoung y la vida de Jihoon ya era una tormenta, siempre era lo mismo a cada hora la tentación de llamarle y rogarle porque volviera a su lado aparecía y esa sensación de culpabilidad lo detenía. El pensar que él estaba feliz lograba tranquilizarlo un poco y borrar la idea de buscarlo.
—¿A donde vas?—DongYul observaba cómo Jihoon buscaba rápidamente sus llaves.—¿iras de fiesta de nuevo?
—Ya tengo muchas pinturas listas así que creo que me merezco salir.—Jihoon lo encaro.—en unos días más estará lista la nueva exposición.
—Todas las noches sales, me preocupa que no estés descansando bien.—explicó DongYul realmente preocupado.—¿no puedes quedarte hoy?
—No.—respondió rápidamente Jihoon.—me voy, cierras cuando te vayas.
Jihoon bien sabía qué DongYul se preocupaba por el, pero realmente quería estar fuera de casa y olvidarse de todo un rato, él era consciente que no siempre podría estar haciendo aquello y que en algún momento tendría que aprender a vivir como uno solo.
Habían tantas fiestas a las que Jihoon podría ir aquella noche, pero aquella noche no logró dar un paso más allá de la entrada al lugar, en cambio solo siguió su camino sin rumbo el cual durante las últimas semanas parecía su mejor opción. Él sabía bien que estaba triste, pero no podía dejarse caer ni en ese momento porque entonces ya no podría regresar aquella imagen fuerte que tanto estaba intentando cuidar.
Ya no quería seguir así, quería también encontrar a alguien y amarlo de verdad, pero le daba miedo jamás hacerlo o solo engañarse y engañar a otra persona. Solo no quería romperle el corazón a nadie.
—¿Jihoon?—delante del bajito estaba Soonyoung con un elegante traje color negro y a su lado Jeon Wonwoo también portando un elegante traje. Ambos se miraban recién sacados de alguna revista, de esas donde solo salen familias adineradas.—¿a donde vas?
—Yo.—Jihoon estaba formulando las mejores excusas para no quedar como un solitario delante de Soonyoung.—Solo quería tomar algo de aire antes de regresar.—una sonrisa falsa adornaba su rostro.
—¿Quieres entrar con nosotros?—en un estado normal Jihoon diría que no, pero aquella noche sentía que necesitaba compañía aunque fuera de Soonyoung y Wonwoo.—será divertido.
—Claro.—esta noche estaría llena de mentiras.
El ruido de la música se escuchaba incluso estando a la entrada y todas aquellas luces de colores que amenazaban con dejarte ciego hicieron que Jihoon se arrepintiera, pero ver la sonrisa de Soonyoung lo hizo querer quedarse, al menos un rato más. Por un momento Jihoon se había olvidado de Wonwoo y sentía de nuevo aquella conexión con su mejor amigo.
—Vas a bailar conmigo, lo prometiste.—la voz de Wonwoo había hecho que Jihoon dejara de sonreír.
—Lo se y siempre cumplo mis promesas.—agregó Soonyoung alegre.—primero busquemos un lugar para los tres.
Claro no todo podía ser perfecto, Jihoon era el que estaba fuera de lugar aquella noche, y lo podía sentir pues la pareja tenía sus propias conversaciones, él era invisible en ese momento.
—Vamos.—Wonwoo realmente parecía emocionado.
—¿No quieres ir?—pregunto Soonyoung mientas observaba al más bajito negar.—¿seguro?
—Ve.—fue lo único que Jihoon pudo decir.
Aquella noche sería larga y la única forma de soportarla era ahogándose en bebidas que contenían tanto alcohol como para dejar mal a cualquiera y Jihoon quería aquello, necesitaba algo para soportarlo todo. Siendo así en cuanto la pareja se fue el bajito fue directo a la barra a pedir cualquier cosa igual todo iba a tener el mismo efecto, hacerlo casi inconsciente de su situación.
Soonyoung y Wonwoo parecían tener el mejor momento de sus vidas, sus sonrisas lo decían todo. La amplia sonrisa de Soonyoung era sincera y Jihoon casi podía asegurar que jamás había recibido esa sonrisa, pero parece que hacía tiempo él ya no era tan importante en la vida de su amigo.
—¿Podría estarme llevando más de esto a mi mesa?—pregunto Jihoon al bartender quien solo asintió.
La mirada de Jihoon estaba fija en la pareja, específicamente en Wonwoo, quería encontrarle algún defecto por más mínimo que fuera solo para sentirse mejor consigo mismo. Gran error. Entre más lo miraba más se odiaba a sí mismo porque Jeon Wonwoo no tenía defecto alguno y quizá por eso Soonyoung lo amaba.
Soonyoung solo merecía tener a su lado la persona más perfecta y parecía que ya lo había encontrado, eso era una realidad ahora ya no tenía porque esperar a un día encontrar a esa persona que lograr hacerlo sentirse completo, pues ya estaba Wonwoo a su lado.
—Será una noche larga.—dijo Jihoon para sí mismo.
