Mi Vida, Mi Obra

Capítulo 21: ¡Trágate esa Harry!

Ese lunes era el día de las ciencias en la escuela, era un día en el que se hacían diferentes actividades durante todo el horario de clases. Para muchos significaba un día en el que se podían aprender sobre muchas cosas interesantes, para mi significaba perder clases que detestaba, o sea, lo amaba.

No me importaba si teníamos que pasar el día viendo proyectos de ciencias o tonterías de esa clase, me salvaría de las matemáticas y, lo mejor, es que no estaría todo el día sentada en una sala, escuchando a alguien hablando con la intención de enseñarme algo.

Jason, Corah, Harry y yo tuvimos que presentar el proyecto de química frente al curso, igual que los demás grupos. Para nuestra suerte, había sido todo un éxito, especialmente porque habíamos puesto la canción de "CSI Las Vegas" de fondo cuando revelamos las huellas digitales de nuestros compañeros en distintas cosas, algo que incluso a la profesora le había causado mucha gracia.

El día fue divertido, bastante más de lo que hubiera imaginado. Incluso la charla que habíamos oído en el auditorio sobre astronomía había logrado mantener mi atención casi por completo, especialmente por las fotografías tan maravillosas que habían enseñado.

Para las últimas horas, todos los alumnos de último año debían presentar sus proyectos a toda la escuela, por lo que salimos por horarios a ver las presentaciones. Ellos tenían que escoger un proyecto de cualquier ciencia y se les agregaría una nota extra a la materia que hubieran elegido.

Los proyectos de la feria, la que habían montado en la cancha techada de basquetbol, eran mucho más exigentes y grandes. Había robots pequeños, mini paneles solares y muchas cosas más que incluso podrían tener un buen futuro.

Terminé de ver todo cuando aún quedaban veinte minutos para entrar y al notar que Harry estaba solo en una esquina, viendo su celular, fui a su lado.

—Hola —lo saludé, con una sonrisa.

Después de lo que había pasado en su casa, apenas habíamos cruzado unas palabras. Yo me había ido un rato después de que hubiéramos terminado y Jack habían insistido en ir a dejarme, por lo que no me había quedado de otra que aceptar. Cuando me había despedido de Harry ese día, todo parecía bastante normal, pero también podía sentir una pequeña tensión.

—Hola —dijo, sin mirarme.

—¿Los viste todos? —le pregunté, con la intención de comenzar una conversación.

—No, no me interesan.

—¿Y el de tu hermano?

—Vi cuando lo hacían.

Algo andaba mal con él, era tan obvio cuando estaba molesto. Él siempre tenía una sonrisa en la cara cuando estaba normal, en ese momento, estaba tan serio que no parecía el mismo.

—¿Qué pasa? —pregunté entrelazando mi mano con la suya—. Estas actuando extraño desde el viernes.

Harry soltó de inmediato mi agarre.

—Estamos en público.

—¿Y qué? —pregunté molesta—. No estamos teniendo sexo, sólo te tomé de la mano como lo hemos hecho muchas veces.

Incluso cuando éramos niños nos tomábamos de la mano cuando caminábamos juntos, para mí no era nada extraño. Éramos amigos desde toda la vida, no tan cercanos, pero amigos al fin y al cabo.

—No quiero que piensen que somos novios o algo por el estilo... —dijo—. Me causaría un problema.

—¿Un problema? —pregunté, más molesta aun—. Tranquilo, yo no sería novia de un creído y necesitado de atención como tú.