butterfly. / namjin ff.

Prólogo.

La idea era simple, pero a Seokjin no le parecía en absoluto lo que su tío quería hacer con la empresa de su padre. Pero no había demasiado qué hacer, Seokjin no tendría el control hasta cumplir la mayoría de edad en Corea, y él tan solo tenía 18 años.... Tres años era demasiado tiempo para dejar una empresa tan poderosa a cargo de alguien tan inútil como su tío. 

Sus ojos dolían en conjunto con su cabeza, que bombeaba desenfrenadamente al ritmo de su corazón cada vez que recordaba que su padre había muerto hace dos días y él tenía que estar ahí, discutiendo sobre dinero en lugar de estar consolando a su madre y su hermana pequeña en el entierro de su padre. Dolía, dolía y muchísimo, pero se aseguró de consolarse bajo el refugio de las últimas palabras de su padre.

''Hijo, esto es por ti, tu hermana y tu madre, asegúrate de hacer lo correcto, confío en ti.'' Y aunque sus pensamientos fueron dispersados por la voz de su abogado y su psicóloga, quiénes pararon la reunión para asegurarse del bienestar mental de Seokjin, el heredero. 

''Estoy bien.'' Dispersó con una sonrisa las miradas preocupadas de su equipo de trabajo, aquellas dos personas en las que podía confiar plenamente después de su madre y su hermana, porque ellos dos, le juraron lealtad a su padre Kim Seojoon en el lecho de su muerte con Seokjin y su familia presente. Juraron proteger el legado Kim y con eso a toda la familia. 

''¿Seguro?, te prometo que podemos hablar de esto mañana o el abogado puede hacerlo por ti, Jinnie.'' Dijo en un tono de voz amable la psicóloga, Irene, a quien Seokjin sonrío y acaricio su mano con cuidado.

''Te lo prometo noona, estoy bien, podemos seguir.'' Sus ojos demostraban otra cosa, aún así Irene conocía el caracter de Seokjin, tampoco desistiría tan rápido, en tanto, su tío resoplo al viento, esperando por su querídisimo sobrino. 

''¿Y entonces la decisión está tomada?'' Interrumpió Youngjae. 

''Sí, los abogados de la familia Kim administrarán todo lo relacionado a la empresa, usted solo será el CEO en lo que Seokjin cumple 21 años y culmina sus estudios, una vez graduado de la universidad, absorverá todos los derechos de la empresa según lo dicta el testamento de Kim Seojoon.'' Youngjae asiente, no muy convencido.

''También quiero agregar, que acorde al testamento de mi padre, puedo cambiar los empleados. ¿Cierto?'' Todos asintieron, a la expectativa de lo que el pequeño de los Kim podría decir. ''Me gustaría contratar personas nuevas, me gustaría empezar con eso mañana mismo, si no es problema, también me gustaría que se asigne una sola vena a mi tío, no puede hacerse cargo de toda la compañía, es demasiado.'' 

Youngjae resopló.

''Lo siento si no estás de acuerdo, tío, pero yo tengo el poder de hacer este tipo de cambios, lo único que no puedo hacer es asumir como presidente hasta los 21 años, pero mientras no haya presidente, la firma de abogados asumirá por mi, usted debe decidir bajo qué vena de la compañía queda como CEO, lo siento, pero no puedo otorgarle el poder total de la empresa de mi padre, eso me pertenece a mi y a mi familia.'' Seokjin dice, serio, con su mirada fija en los ojos oscuros de su tío.

Incluso Irene está consternada ante el cambio en la actitud de Seokjin, los rasgos de su padre saliendo a flote. Kim Youngjae suspira y rendido asiente.

''Me encargaré de la parte de entretenimiento.'' Dice con una media sonrisa, solo Seokjin e Irene comprenden la doble intención de sus palabras.

''Solo para dejar en claro que sigo siendo yo quién decide por sobre cualquier CEO, con su permiso tío, me retiro, mi madre y mi hermana me necesitan.'' Seokjin dice, para levantarse, tomando su café y siendo seguido por su seguridad, su abogado personal e Irene, esta última camina a su lado, animándolo.

''Lo hiciste excelente, Jinnie, estoy muy orgullosa de ti.'' Seokjin le dedica una sonrisa cansada y asiente, reverenciando ante ella antes de sostener su mano y apretarla en un abrazo cariñoso.

''Gracias, noona, no hubiese sido posible sin tu ayuda. Te llamaré cualquier cosa, ¿si? Por favor, descansa, has tenido mucho estos días.'' Dice, sonriendo en todo momento, con ojos brillosos.

''No, Jinnie, es mi deber ver por ti y la familia Kim. Te tengo mucho cariño, te he visto crecer frijolito, por favor déjale saber a tu madre que mañana iré a tomar el té con ella, saluda a Jisoo de mi parte.'' Seokjin asiente, haciendo una última reverencia, antes de dejar atrás a la mujer y permitir que su seguridad lo escolte hasta el auto.

Es extraño, para Seokjin es extraño todo lo que sucede, ya no está su padre acompañandolo con chistes malos en su camino, ahora es él, el chófer y la seguridad que lo rodea. Afuera de la compañía de entretenimiento Kim, hay algún que otro paparazzi curioso, pero su equipo hace un buen trabajo para mantener su privacidad resguardada.

Su carrera como cantante está francamente estancada, lo más probable es que el lanzamiento de su primer álbum se vea retrasado debido al luto que guardará por respeto a su padre, y en ese tiempo Seokjin planea componer nueva música. Seguro sus fans saben que se viene un álbum cargado de sentimientos, justo como a él le gusta.

Desde que tiene uso de razón, su vida gira en torno al entretenimiento, desde muy pequeño sabe tocar el piano, la guitarra, el violín, también sabe bailar y lo más importante, heredó el talento de su familia, el canto.

Su voz ha sido considerada de plata por paneles importantes como el jurado de los Grammys, y aunque ningún álbum ha sido suficiente para darle uno, cree que el próximo año lo va a lograr. Sonríe ante ese pensamiento fugaz de su cabeza y cierra sus ojos, recargando su espalda del asiento, sintiendo un momento de pequeña relajación mientras el auto para en un semáforo.

El silencio se ve interrumpido por un bajo y una voz, una voz que penetra sus oídos y lo hace abrir los ojos.

Dos chicos están rapeando en el semáforo, el más alto parece de su edad, o quizás es mayor, lo que sí nota Seokjin es su peinado, se ve cool, piensa. 

Está forrado en cadenas que parecen fantasía, simulando ser oro y muy brillantes, lentes oscuros y una camisa de basketball negra, pantalones cortos y tan pronto como abre sus labios, su voz suena jodidamente bien. Ese chico rapea muy bien. 

El más bajo empieza a mover su boca siguiendo el beat del alto, y Seokjin no puede estar más impresionado, tanto que baja su ventanilla aún cuando sabe que no debe hacerlo, y tan pronto como los chicos se acercan con sus gorras pidiendo dinero a los autos, él saca de su bolsillo un billete, no está seguro cuál es porque todo sucede muy rápido, pero tan pronto como deposita el mismo en la gorra, el chico más bajo lo mira con ojos asustadizos.

''No podemos recibir esto, s-señor, gracias.'' Seokjin niega, devolviendo el billete a la gorra.

''Es para ustedes, son muy talentosos.'' Sonríe, notando que quedan quince segundos para que el semáforo cambie. 

''Muchas gracias, de verdad. ¡Que tenga un lindo día!'' Y la sonrisa de gatito que esboza el chico, llena el corazón de Seokjin.

Se ríe internamente cuando su ventanilla es subida y nota como los dos chicos caminan lejos del semáforo, bajo un árbol a contar el dinero que han ganado. El más alto mira sorprendido y señala en dirección al auto.

Y este mismo arranca y Seokjin los pierde de vista, aún no sabe con exactitud que billete les dio pero por su expresión está seguro que fueron 500 wones. Pero algo en su cabeza le dice que debe volver, sin embargo se ríe, su idea es muy alocada, por ahora solo necesita dormir.

Es eso, sueño.

Seokjin necesita dormir para sentar cabeza, ha tenido días difíciles.