Felices sueños, Lara

21.Mi día con Alex.

-¿Lara estás bien? -Se acercó corriendo Alex. -No. -Dije confusa. -¿Qué te pasa? -Preguntó Lorena preocupada ante la situación.

Empezé a pensar en todo lo que acaba de suceder, quizás si me controlaba podría contar todo lo que me acababa de pasar pero, quizás también si lo contaba me tomarían por loca o dirían que son imaginaciones mías. Estaba bastante confusa pero aun así, conseguí relajarme.

-Na-da. -Dije pausadamente mirando a mi alrededor.

En ese momento apareció Javier por el parque con las manos en los bolsillos y no dudé en saludarle con una amplia sonrisa.

-¡Hola! -Dije entusiasmada directa a darle un abrazo. -Vaya. -Dijo bajando las manos a la cintura y mirándome pícaro, algo raro en él. -Yo también me alegro de verte. -Sonrió mientras me ponía cerca de él.

En ese momento Alex me agarró de la muñeca y con un movimiento brusco me tiró hacia él mientras le ponía mala a cara a Javier.

-¿Te importaría poner las manos a otra chica? -Dijo él fulminándole con la mirada. -Fue ella la que se acercó. -Dijo levantando las manos en alto para hacer como si no tuviera culpa. Lorena se dedicó a reir.

-Lara, creí que le habrías reconocido. -Dijo riéndose. -¡No puede ser! -Dije poniéndome las manos en la boca. -¿Es Xavier? -Pregunté anonadada era un parecido increíble.

-Son iguales. -Dije riéndome. -Aun que de carácter, bastante diferentes. -Dije rodeando los ojos. -¿Y que lo digas? -Añadió Xavier.

Para aclarar la situación, Xavier era el hermano gemelo de Javier, le llegué a ver una vez de lejos a los dos juntos y ya me contó Javier que no estaba viendo alucinaciones y que si que tenía razón, que él tenía un hermano gemelo, desde entonces siempre quise volver a verle y poder conocerle, pero no creí que fuera de esta manera.

-Bueno después de esta situación tan extraña, si nos dejáis, nosotros nos vamos. -Dijo andando Alex mientras me llevaba de la muñeca que no me había soltado desde entonces. -Adiós. -Dije mientras me llevaba a rastras.

-Podrías haber sido más amable. -Dije reñandole. -Es que si me pongo más amable quizás Xavier, me mal interpreta. -Dijo entonando su nombre con asco, estaba realmente celoso y no pude evitar sonreír.

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Sería prácticamente las 7 de la tarde y según él habíamos perdido tiempo hablando con ese tal Xavier así que volvimos a tumbarnos en la hierba pero esta vez prometí no dormirme asique me senté apoyándome también en el árbol.

-¿Cuando es tu cumpleaños? -Me preguntó mientras me acariciaba la mano. -Puff. -Resoplé diciendo que quedaba mucho tiempo. -En abril. -Dije mordiéndome el labio sabiendo que me iba a regañar.

-¡No me puedo creer que haya sido tu cumple en este tiempo que ha pasado y yo sin felicitarte y sin enterarme! -Fingió que estuviera molesto. -No importa. -Sonreí. -¿Y el tuyo? -Pregunté apoyando la cabeza en su hombro.

-En agosto. -Respondió mientras tomaba su botella de agua -¡Ah si! -Levanté la cabeza para mirarlo. -¿Qué día? -Pregunté con interés ya que también era el cumple de mi madre. -El día 8. -Respondió dejándome perpleja. -¡¿Enserio!? También el de mi madre. -Añadí con ilusión. -Qué casualidad dijo riéndose mientras me soltaba la mano.

-¿Por qué me la sueltas? -Dije arrugando la frente. -Hace frío. -Respondió riéndose. -Bueno pues meto las manos en tus bolsillos. Comentó divertido y yo me reí. -¿Qué es esto? -Preguntó sacando la nota de Javier que me mandó en clase que me tuve que guardar en el bolsillo.