Casualidad o Magia | Larry Stylinson

4-Del odio al amor solo hay un paso

800,800 alumnos hay en Hogwarts y por culpa de la estúpida broma iba a tener que compartir habitación nada más y nada menos que con Tomlinson. No tenía él suficientes problemas ya como para sumar tener al chico a todas horas a su lado. Aparte de su evidente enemistad, últimamente el chico lo ponía más nervioso que de costumbre, todo por culpa de ese dichoso recuerdo. Había pensado hablar del tema con Liam y Niall alguna vez, pero no quería q nadie pensase que quería tener la mínima relación cordial con Tomlinson, claro que no era eso, simplemente él era muy curioso y no entendía porque el Slytherin cambió su actitud hacia de él de un día para otro, estaba claro que era eso ¿que otra cosa iba a querer él de Tomlinson?

Se dirigió hacia la sala común de Gryffindor buscando a sus amigos, el director les había dicho que al medio día, deberían de instalarse en la torre de los premios anuales, por tanto aún le quedaban un par de horas de libertad antes de hacer la maleta.

Se encontró con Liam y Niall contándole a Kendall lo sucedido en los sofás junto a la chimenea, era su sitio favorito de la sala común de Gryffindor, todo estaba forrado de rojo y dorado, y las estanterías y el fuego, ayudaban a que se sintiera muy acogedora, era muy habitual que Harry se sentará en uno de esos sillones a leer durante horas. Sabía que en su nueva torre también había un espacio similar, no se veía sentado charlando con el Slytherin junto a la chimenea, pero si que podría disfrutar de esos ratitos a solas consigo mismo que tanto le ayudaban a despejarse.

Se sentó junto a los chicos y les relató detalle a detalle todo lo que el director les había dicho, aún ni creyéndose él lo que Dumbledore le había dicho.

-Bueno Harry intenta mirar el lado positivo- empezó Kendall.

-Perdona Ken pero ¿tu te crees que esto tiene lado positivo?- Dijo Harry flipando con las palabras de su amiga.

-Que si H- siguió Liam- alomejor conseguís llevaros algo mejor.

-Del odio al amor solo hay un paso- terminó Niall.

-Pe-pero vosotros estáis locos? Tomlinson y yo somos como el perro y el gato o como el agua y el aceite, es imposible que nos llevemos bien- sentenció Harry.

-Bueno- dijo la chica- nosotros solo te decimos que no vayas de morros, sino si que será imposible.

-Que si que si,tengo que irme a hacer la maleta- les dijo despidiéndose- nos vemos a la hora de comer,deseadme suerte.

-Suerte!!!- le dijeron sus amigos al unísono.

Subió la escalera de caracol hacia su habitación y se apresuró a hacer la maleta, no quería cruzarse mucho rato con Tomlinson pero tampoco podía  arriesgarse a ir muy tarde por si Dumbledore se pasaba por allí a vigilar.
Metió sus túnicas y camisas en la maleta junto a algunas fotos de su madre y su hermana y metió los libros en la mochila, se despidió de su habitación y se dirigió al final del segundo piso, encima de compartir habitación con él, estaban tan alejados de los demás que si Tomlinson intentaba matarlo nadie se enteraría.

Entró en la torre y se encontró con una pequeña pero bonita sale de estar,junto a una cocina improvisada, ya que como los premios anuales tenían más responsabilidades que los demás, si algún día no podían ir al desayuno, lo hacían allí. En la sala había un sofá y dos sillones junto a la chimenea, una gran estantería con libros y una mesa comedor. Subió a la habitación y se encontró a una muy similar a las de Gryffindor, solo era un poco más grande ya que era para dos personas y los detalles rojos y dorados de su casa, eran blancos y negros, los colores del colegio.

Eligió la cama de la izquierda, ya que estaba más cerca de la puerta, por si en la noche decidía atracar la gran estantería de libros de la sala común. Mientras se acomodaba en su nueva habitación, llegó su compañero, del que solo recibió una mirada cargada de odio.

Louis sacó un par de fotos, las coloco en la mesita de noche y se metió en el baño a asearse. A Harry le picó la curiosidad y se acercó a observar las fotografías, una era de Louis junto a su familia, parecían muy unidos, en la otra estaba con sus 3 amigos posando haciendo el tonto. Pensó que era la primera vez que veía a Louis sonreír, bueno la segunda, pero desde esa vez en el andén, el muchacho había cambiado mucho. Debía admitir que tenía una sonrisa muy bonita. Un sonido detrás suya le desvío el pensamiento y al girarse se encontró con Tomlinson detrás suya.

-Se puede saber qué haces cotilleando mis cosas Styles?- Dijo Louis cabreado.

-Yo no estaba cotilleando nada Tomlinson- dijo Harry intentando aparentar seguridad- solo me he acercado porque me había parecido ver a alguien muy parecido a ti sonriendo en esas fotos, debe de ser tu hermano gemelo porque tú no eres capaz de quitar esa cara de imbécil ni esforzándote.

-Vete a la mierda Styles- Dijo Louis sorprendido por la respuesta del Gryffindor, era la primera vez que conseguía dejarlo en blanco.

-¿Y eso Tomlinson- aprovechó Harry que noto como su compañero se tensaba tras su comentario- te pongo nervioso?

Louis se quedó anonadado con el comportamiento del chico, había conseguido ponerlo nervioso de verdad.

Como respuesta, Harry solo recibió un gruñido y observo triunfante como su compañero se iba cabreado de la habitación. Ni siquiera él sabía cómo había sido capaz de decir todo eso sin desmayarse, pero se sentía genial, había dejado sin palabras nada más y nada menos que a Louis Tomlinson.

Louis salió de la torre lo más rápido que pudo, fue hasta el gran comedor y se sentó junto a las chicas a comer. No mencionó ni una palabra de lo que había pasado en la habitación, pero sabía que de alguna manera se lo tenía que devolver, si Styles quería jugar, jugarían.

Mientras tanto Zayn se dirigía a la clase de pociones, como castigo por la broma, a él a Liam y a Niall les habían obligado a limpiar todos los calderos de la clase anterior, para su mala suerte había sido una clase de primero,por tanto los calderos estaban asquerosos.

Los 3 chicos se pasaron la tarde entera limpiando, al principio Zayn se mantuvo al margen de las conversaciones de los Gryffindor, pero hubo un momento en el que no pudo evitar echarse a reír escuchando a Liam quejarse de que Niall no sabía limpiar un caldero porque era irlandés. Comenzaron a hablar y descubrieron que tenían bastantes cosas en común, no pudieron evitar tocar el tema de sus amigos, los que parecían no tener remedio ninguno. Entre risas acabaron antes de lo que pensaban y se despidieron prometiendose quedar algún día y seguir hablando.

Zayn dejó a los chicos y se fue a buscar a Louis. Se pasó un rato buscándolo por todo el castillo y nada, Gigi y Ele le contaron que después de comer se había ido sin decir palabra. ¿Donde se había metido este muchacho?