Vecinos

1. El comienzo.

1, EL COMIENZO

-Ya viste a los vecinos? –Preguntó mirando por la ventana- El chico no esta nada mal.

-¡Molly! –Gritó Jessica cerrando la cortina-

-¡¿Qué?!

-No los espíes como una psicópata.

-No seas así, Jess, pero tienes razón –Hizo una pausa- iré a ayudarlos a bajar las cosas del camión.

Molly apresuró el paso y en menos de un minuto ya les estaba ayudando a bajar las cosas a los vecinos.

Jessica fue a la cocina/comedor, donde estaba su mamá preparando la cena.

-Mmm –dijo inhalando- huele delicioso.

-Lo sé, estoy haciendo queque.

-¿Ah, si? ¿Por qué? Hace mucho que no preparabas.

-Para darle la bienvenida a los vecinos.

-De tal palo tal astilla –Cruzó los brazos-

-¿De que hablas? –Mónica se quito el delantal de cocina dejándolo a un lado-

-Molly fue a ayudarlos con las cajas.

-Oh, que amable.

-Mamá…

-¿Qué? Deberías aprender de tu hermana.

-Ni en sueños,  es la mayor pero la más inmadura –Jessica se sentó en la mesa-

-Solo es un año mayor que tu, y bájate de ahí –apuntó a una silla- para algo existen.

A pesar de ser una casa amplia, su padre la remodeló para que la cocina y el comedor estuvieran en el mismo sitio, permitiendo que el living fuese más grande.

Jessica rodeó los ojos y obedeció.

-¿Les irás a dejar un trozo de queque?

-Ni en sueños –Su madre rió-

-Uff, gracias por un momento creí que andarías repartiendo galletitas como una chica scout. –Comentó aliviada-

-Tú irás.

-¡¿Qué?!

-No te hagas la sorda.

-Mamá, por favor, ¡sabes que odio conocer gente!

-Tendrás que compartir el resto de tu vida con ellos, cariño, se mudaron aquí por alguna razón y no creo que se vayan pronto.

-¡Pero mamá!

En cuanto se puso de pie, sonó algo similar a un timbre.

-¡El queque esta listo! –Exclamó Mónica-

La madre de Jessica era muy entusiasta y con 39 años lucía un cuerpo de alguien de 28, era preciosa,  con el pelo negro completamente ondulado y ojos cafés claro.

-Mamá, ni sueñes que iré a dejarles eso.

-Ve, y aprovecha de decirle a tu hermana que la cena esta lista. –Le entregó el queque en un plato bajo-