Locura en sevilla, y una boda perdida!?--[WangXian]

𝓬𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓽𝓻𝓮𝓼

-Nie-xiong!!- Wei Ying saludó al Nie con una fuerte palmada en la espalda que casi hizo se cayera en la fuente.

-Wei-xiong... por favor no me asustes así- Huaisang parecía querer llorar por el susto, pero contuvo las lágrimas y en cambio limpió sus ropas de un inexistente polvo para poder recuperar la compostura -Volverás a China ahora que has dicho que irás a la boda de tu hermana?-

-Mmmm~ creo que es algo pronto para causarle un infarto a Jiang Cheng... además Lan Zhan aún tiene cosas que hacer por aquí, cierto?- preguntó al Lan que estaba detrás de él como si le estuviera escoltando y que simplemente asintió en respuesta.

-Mhm-

Huaisang tan solo pudo reír levemente tras su abanico al ver que esos dos seguían siendo tan apegados e incomprensibles como lo habían sido siempre, pero su diversión no duró mucho al ver como Wei Wuxian se acercaba a él de una forma ligeramente intimidante.

-Nie-xiong...- Wei Ying le miró achicando los ojos, acción que puso nervioso al Nie que no tenía ni la menor idea de lo que pasaba por su mente -... no te haré nada!! Tan solo quería decirte que los del convento te buscan-

Su risa llenó el lugar y tan solo entonces Huaisang se permitió suspirar con cansancio y cierta resignación. Ahora recordaba lo mucho que el gustaba a Wei Wuxian fastidiarlo cada que tenía oportunidad.

-Ah... Wei-Xiong!! Sabes que mi corazón no aguanta esos sustos- contestó en un infantil reproche al haberse preocupado por nada mientras Wei Ying lo molestaba por lo asustadizo que seguía siendo.

Una llamada al Nie hizo que este pusiera un semblante serio que pocas veces podía ser admirado en el bonito y tranquilo rostro de Huaisang que parecía no haber cambiado en lo más mínimo en esos años.

Su cabello seguía en ese tono indescifrable que no era ni totalmente negro ni café, sino más bien una extraña combinación de ambos y que llamaba la atención al ver sus delgados cabellos largos que llegaban hasta algo más debajo de sus hombros ondearse con el viento. Aquella manía de jugar con sus abanicos seguía en él, y ni hablar de la forma en la que recordaba a los hámsters que se asustaban con el más mínimo sonido.

Aunque habían pasado 5 años en los que no los había visto, Wei Ying sentía como si en realidad no los hubiera visto por tan solo un par de días, y eso de cierta forma le aliviaba.

-Qué ocurre? Problemas con tu familia de nuevo?- preguntó una vez Huaisang terminó su llamada y vio como se daba pequeños golpecitos en el mentón con su abanico, manía que tenía cada que tenía que pensar algo seriamente.

-No es eso... pero alguien se ha estado robando los restos de mis antepasados de sus tumbas, y aunque hemos tratado de dar con huellas o algún rastro que nos pueda guiar a algún sospechoso no encontramos nada... es como si fuera obra de un fantasma-

-Mhm... ya veo...- contestó con tranquilidad que contrastaba con el torbellino de pensamientos que era su mente aunque no lo demostrara -Nie-xiong, tengo una forma de encontrar a quien ha estado saqueando las tumbas de tu familia-

-En serio!? Cuál es!?- su emoción era tan notoria que incluso no dudó ni un segundo en tomar las manos de Wei Wuxian en busca de aquella solución que le prometía.

-No es nada fácil... pero para empezar necesito 3 cabras... una tocara la flauta mientras la otra baila y otra hace esto- dijo haciendo un movimiento extraño y a la vez gracioso con sus manos.

-Podemos ocupar las cabras del convento-

-Perfecto! Y yo puedo enseñarles a tocar la flauta y a hacer esto- de nuevo hizo aquel extraño movimiento con sus manos y ambos no pudieron controlar su risa.