- 6:30 p.m. -
En la casa donde lo normal es una palabra tan rara como lo es ¨honestidad¨ en una estación de policía del centro de la ciudad, el tercero de los hermanos recién sale del baño con un nuevo aire fresco y pensamientos renovados, pues a pesar de esperar casi una hora a que tanto sus hermanas menores como sus tutores lo desocuparan para asearse, todavía le cedió su lugar a su hermana, ya que desde el regreso en el bus la había notado algo decaída.
Justo antes de que Derek entre en su habitación (que para ser más exactos es un antiguo armario el cual ni siquiera está acondicionado, en donde aún son visibles las grietas recorriendo las paredes de arriba hacia abajo y viceversa, evidencia de la antigüedad de la casa), su hermana mayor asoma su cabeza por el marco de la puerta de esta misma.
—Derek, ¿Ya vienes?, ¿O tienes algo más que hacer?
—Voy enseguida, solo dame un poco de tiempo para vestirme al menos, por favor —con un tono un poco juguetón
—¡Pero si así te vez bien! —exclama siguiéndole el juego a su hermano
—Ja, ja, si, si, claro... —entrando a su cuarto y cerrando la puerta— ¡dame 5 minutos!...
-15 minutos después-
Se oye como una mano golpea la puerta de joven chica en tres ocaciones de manera rítmica y consecutiva para en seguida y sin esperar respuesta lanzar una pregunta a través de la puerta cerrada.
— ¿Puedo pasar? —con voz suave tratando de parecer arrepentido
No se escuchó respuesta alguna a la pregunta del arrepentido chico que había tardado más de lo esperado, por lo que este comenzó a abrir la puerta de poco en poco previniendo entrar en un mal momento o hacer ruido en caso de que su Hermana ya se encontrace durmiendo.
—Dani...—dijo el chico más a manera de pregunta a la vez que abría la puerta y asomaba la mitad de su cuerpo— no estarás enojada, ¿Verdad?
Ante la incógnita de la peculiar situación el Derek se decidió a entrar por completo en la habitación de su herman con precaución y sigilo, al percatarse de que la habitación estaba inundada en una completa oscuridad sin una sola luz encendida como normalmente lo está a esas horas más el hecho de que un silencio amenazante y ensordecedor acompañaba tal oscuridad, lo cual hizo que Derek se preocupara un poco, tal vez debido a la gran cantidad de videos de toerro que solía ver en youtube o puede que por todas aquellas peliculas y anime sde terror en donde no puede faltar una situacion similar, pero dejando de lado todas aquellas tontas sugiestiones Derek realmente estaba alertado y con la preocupación latente en su corazón, nom por lo qu ele pudiese pasar a el, no, si no por lo que ocaciono que aquella habitación se encintrara de esa forma y lo que le pudo haber sucedido a su querida hermana, pues era ella quien realmente le preocupaba.
—¿Dani?, ¿No te habrás dormido ya, o si?, recuerda que aún ni siquiera hemos empezado con el repaso diario de histo-
Enseguida, Derek es atrapado por algo que se le cuelga de la espalda, justo en el momento en que sintío como unos brazos fríos y delgados rodeaban su cuello y lo apresaban pasaron por su mente los peores escenarios, su hermano, su tutor o tutora, o algún descocido que pudo haberse colado a la habitación de su hermana, todas aquellas posibles situaciones y pensamientos generaron que la adrenalina comenzara a fluir y su mente se opacara, pero, en cuanto logró reconocer el suave tacto de unas manos lisas, un poco más pequeñas que las de él, algo frágiles y con un aroma inconfundible a rocío de flores silvestres las cuales se paseaban por las clavículas del chico le hizieron recuperar la conciencia casi de inmediatoy darse cuenta casi de inmediato, aunque con un poco de frustración por haber tardado tanto en reconocer a su querida hermana
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HERMANA ¡TU ERES MI PROPÓSITO! (EN PAUSA POR CORRECCIONES)
Teen FictionDerek, 18 años, un chico normal que no tiene un propósito en esta vida. Daniela, 20 años, una chica normal que no es el propósito de nadie en esta vida. Tres hermanos, uno mayor y dos menores mas dos padre que no saben si quiera controlarse a ellos...