Capitulo 121

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Santiago.

Iba a la casa. Era aun temprano para ir de regreso, pero en el trabajo nos dejaron salir temprano por la fiesta de pasantes.

Estaba mas feliz aun. Tenia un trabajo con que costear mis necesidades y ayudar a Jhon. Así me odiara en estos momentos.

Pase primero por nuestra casa, a cambiar de carro. Para una fiesta importante hacia falta un carro importante.

La casa estaba igual que como la habíamos dejado. Yo tenia dos semanas sin venir, otra de la razones por la que necesitaba el trabajo era mantener esta casa con el garage donde estaba mi colección de carros. A pesar de tener ya nuestro apartamento.

En el correo de la casa estaban varios paquetes. Parecidos a los paquetes que llegaron con las fotos de Lili hacia unas semanas. Los eche todos a la basura.

No dejaría que esto me afectara en estos momentos.

Saque mi ferrari 488. Preparado para dar acción esta noche.

En el apartamento la situación seguía tensa con Jhon. Solo me hablaba para cosas básicas. Mientras nos poníamos nuestros trajes, sabia que no se iba a querer ir conmigo.

Era tonto vivir juntos y no llegar en el mismo carro pero tampoco iba andar detrás de el para que cambiara de opinión. No le dije a Jhon ni siquiera por lo del trabajo. Le daría la sorpresa después.

El puesto de la moto de Lara se veia vació en el estacionamiento. Sentí nostalgia porque tal vez ella si tenia esperanzas de conseguirlo.

Recordé su cara de cansancio hoy con sus ojeras y su cabello despeinado. Las mujeres podían pasar horas maquillándose o arreglándose para verse bellas pero nunca tan naturales y reales como lo hacia Lara.

Ella solo no le importaba su físico, solo andar cómoda. Solo ser real ante las personas, lo mas increíble de todo es que sin una gota de maquillaje y su cabello despeinado. Su piel se veía igual de tersa, igual de limpia. Y sabia que todo el cansancio provocado era por mi trabajo. Tal vez si le debía unas gracias.

Como iría vestida hoy? Me iba a sorprender de todas las formas.

Sacudí un poco mi cabeza para dejar de pensar en patito feo. Era momento de pensar en las esculturales mujeres que estarían hoy en esta fiesta de gala. Con esos vestidos ajustados y escotes impresionantes.

Hasta se me hacia agua la boca.

Encendí el ferrari y me fui, tras el carro de Jhon que iba adelante.


Aléjate o déjate llevarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora