𝙎𝙄𝙉𝙁𝙐𝙇 𝘿𝙀𝙎𝙄𝙍𝙀 『 𝙏𝙖𝙚𝙆𝙤𝙤𝙠 』(revisar)

CAPÍTULO ÚNICO

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Su traviesa sonrisa lo sedujo cual imán, el contoneo de su cuerpo lo hipnotizó y su mirada lo atrapó.

Jungkook lamió descaradamente el lóbulo de su oreja e hizo un recorrido con su lengua hasta sus labios, pasando por su mentón. –Eres todo mío, Kim Taehyung. –susurró sobre su piel.

Taehyung se estremeció ante la húmeda y cosquilleante sensación y con ambas manos sobre el trasero del menor, apretó ambas nalgas y terminó por colisionar ambas bocas. Deseoso de aquel dulce pecar frente a sus ojos, se dejaría guiar por el mismísimo diablo hasta el infierno.

–Rompeme, Taehyung. –suplicó en su acelerado respirar.

Taehyung soltó un gruñido y lo empujó sobre la cama. Una sonrisa creída vislumbró de entre sus labios cuando vió a Jeongguk abrirse para él, listo para ser tomado.

–Vamos, no te hagas de rogar. –gimoteó, rozando con las yemas de sus dedos la erección bajo sus pantalones. –Te necesito dentro.

Taehyung mordería una y otra vez la manzana prohibida si con ello pudiera tomarlo y decir que él era plenamente suyo.

Porqué él era la reencarnación del pecado. Su amada perdición.

Sus manos acariciaron la piel ajena con cuidado, disfrutando de su suavidad. Relamió sus labios y jadeó al momento de introdicir su miembro.

Sus labios, sus fuertes gemidos y expresiones fueron suficiente combustible como para sentir que toda la habitación estaba en llamas.
Ambos en el interior, se consumían entre las llamas de aquel amor secreto y agridulce que tanto amaban, que tanto disfrutaban.

Jeongguk gritó de placer cuando la dentadura de Taehyung se hundió bajo su piel, lo suficientemente fuerte y profundo para hacerle sangrar. –¡Taehyung! ¡Más!

El mencionado paladeo el metálico sabor sobre su lengua y lamió la herida antes de dejarle otra mordida que hizo que el menor de nuevo se estremeciese bajo su cuerpo. Las embestidas aceleraron su ritmo y fuerza a medida que Jeongguk suplicaba ser comido por él.

Taehyung lo mordería una y otra vez, como a su preciada manzana prohibida y saborearía el carmín entre sus labios, a medida que ambos llegaban a su éxtasis.

El sudor sobre su cuerpo perlaba su piel, haciéndola brillar ante su hambrienta mirada. Las heridas sobre ella y los suaves moretones solo la hacían ver todavía más bonita.

Taehyung sentía que estaba a punto de estallar con aquella simple imagen. Pues no hay nada más bello que ver a tu mayor deseo mostrando sumision y total control. Solo para él. Solo por él.

Todo para él.

Estaba dispuesto a arder.
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『 𝙆𝙖𝙡𝙞𝙨𝙨𝙝𝙖 』