Un Encuentro con la Realidad

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¡Hora de retomar la historia! Hola a todos y sed bienvenidos al capítulo 27. Espero que lo disfrutéis.

- Otoya, no debes gritar en el comedor. -Dijo Ryuya entrando a la sala, luego de que todos accedieran.

- No se preocupe Ryuga-san, bajo nuestro consentimiento, pasaremos esto por alto. -Dijo Kaoru

- Lo siento, tendré más cuidado. -Dijo Otoya mientras se acercaba y se sentaba al lado de Masato.

- (Bien, ahora que Masato esta sentado a un lado de Otoya yo me sentaré, al otro lado) -Pensó Cecil.

- Cecil-san, usted irá aquí. Sentado a la izquiera de quien presidirá la mesa. -Dijo Aine mostrándole su asiento.

- Pero~

- Cecil-san, hágame caso~ -Intentó decirle Aine de forma agradable con una mueca en su cara.

- ¡Está bien! -Dijo Cecil tras chesquear la lengua.

Ya, cuando todos disponían de sus asientos en la mesa.

- Ringo-sensei, ¿a qué se debe que nos reunieran con tanta enjundia para la cena? -Pregunto Shibuya a su profesor, el cual estaba a su izquierda.

- Pues es bastante curioso. Yo aún no he podido conocerlo, pero se ve que el rey nos ha convocado a todos en la cena.

- ¿¡El rey!? -Dijo Shibuya sorprendida.- ¿Has oido eso Haruka? -Preguntó Shibuya a su amiga.

- Si, lo he escuchado alto y claro. -Dijo Haruka tambien sorprendida.- (Así que el padre de Cecil-san nos ha convocado, ¿eh?) -Pensó Haruka.

- Queridos huéspedes, sentimos la tardanza. Con ustedes, aquí llega, su alteza real, el rey Mhylom. -Dijeron Aine y Kaoru mientras abrían las puertas del comedor.

- Aquí esta tu padre, ¡hijo mío! -Dijo Myhlom mientras se reía a carcajadas en la puerta del comedor.

- ¡Ay, dios mío! ¡Líbrame de esto! -Dijo Cecil mientras se tapaba la cara avergonzado.

- Es usted, ¿el rey Mhylom? -Dijo Ren con cierta duda.

- El mismo que viste y calza. ¿No lo parece?

El comedor al completo se quedó en silencio por no saber que responder.

- Bueno, bueno. No pasa nada, simplemente quería dar una buena impresión de mí a los amigos de mi hijo. -Dijo Mhylom mientras se dirigía a su asiento.- Pero bueno, sin más preámbulos, quería daros la bienvenida a Agnapolis, en nombre de todo su pueblo.

- A buenas horas, llevamos dos días aquí.- Dijo Syo entredientes.

Tras esto, Kaoru tras el respaldar de Syo, le dio un puñetazo en la cabeza a su hermano mayor.

- Discúlpelo majestad, esta, es más bien, su forma de decir, que está encantado con la hospitalidad que ha recibido ja ja~ -Dijo Kaoru irónicamente mientras aún sostenía la cabeza de su hermano para que este, no se quejará.

- Sin problemas, mi querido Kaoru. Yo también pasé por la adolescencia, así que comprendo su actitud. En fin, -Decía Mhylom mientras se volvía a referir al grupo- También quería agradeceros el haber cuidado de mi hijo estos últimos años. Es un poco soñador, pero es un buen chico -Dijo Mhylom mientras agachaba la cabeza.

- ¡Papa! -Gritó Cecil avergonzado.- (¡Tierra, trágame!) -Pensó Cecil aún avergonzado.

- No se preocupe señor. Hemos disfrutado mucho al lado de Cecil, así que podríamos decir que más que una carga, ha sido un alivio por su parte. -Dijo Otoya sonriente.

Lo Alegre o Lo Serio: La Fuente del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora