La cruda realidad

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- Necesito una respuesta, su silencio solo me demuestra su culpabilidad. Dijo Kevin.

...

Empecé a reír, y  respondí;

- ¿Sabe? Tengo ciertas ideas, pero no estoy segura, así que señor Kevin, no contestare nada hasta ver el cuerpo del Señor William, también me gustaría ver el de mi hermana y mi supuesto vecino, la intriga me mata., porque aunque parezca falso, no lo recuerdo bien.

- ¿Por qué crees que haría tanto por tu testimonio? Todas las pruebas apuntan claramente que usted es la culpable.

- No nos engañemos, yo también se mentir muy bien, pero lo que me compara de usted señor Kevin, es que yo reconozco un mentiroso, no creo que con tantas pruebas usted haya venido a buscar mi testimonio y no llevarme a prisión. Respondí sin pensar. Debe ser porque algo no le concuerda.

- Es inteligente señora Clara, pero piense bien ¿Por qué me la llevaría si esta delicada de salud?

- Mmmm tiene razón, Doctor Marcos ¿Cuánto tiempo llevo en coma? y ¿Qué lecciones suficientes como para estar en cuidados intensivos?

- Llevas aquí aproximadamente 4 días, Pero si te soy sincero, es muy raro que hayas quedado en coma, no fue un accidente grave, ni tuviste golpes que te dejaran en coma. No tenemos argumentos de el porque tu corazón se haya parado tantas veces o la explicación del porque despertaste ahora. Es por eso que el señor Kevin no te puede llevar, en eso el tiene razón.

- Lo ves Clara, aunque por otro lado yo si tengo la respuesta de el porque su cuerpo reacciono como el ¿La quiere saber Clara?

- Cree usted Kevin insinúa usted que va a resolver algo que nosotros personas estudiadas no sabemos. Contesto con impotencia. 

Kevin se acerco al Doctor Marcos y lo tomo de la su de su camisa, mientras lo hacia pode notar que el detective Kevin tenia una pistola entre el pantalón y su camisa. 

Una idea paso por mi cabeza y sin analizarla bien o pensarla a detalle, llame a todo pulmón diciendo;

- ¡Señor Kevin! ya lo recuerdo todo...

Ambos se quedaron en completo silencio y me miraron, Kevin soltó la camisa de Marcos, me miro seriamente y me respondió;

- ¿Qué recuerdas?

- Creo que prefiero decírselo exclusivamente a usted, se que he hecho muchas cosas malas y sinceramente no me gustaría que un hombre tan bueno y amable como el doctor Kevin se diera cuenta, bueno no se si usted lo entienda a la perfección, pero son cosas de damas.

- No me iré de la habitación Clara, se lo dije al oficial Kevin y te lo repito a ti. no me iré de esta habitación mientras este hombre este aquí. Interrumpió Marcos en nuestra conversación.

- esta bien te entiendo Marcos, me basta con que el señor Kevin se acerque para poder decirle mi confesión con por lo menos un poco de privacidad si no es mucha molestia. Conteste poniendo en marcha mi plan mal armado.

Marcos y Kevin se miraron y movieron su cabeza en señal de afirmación, Kevin se empezó a acercar a mi pero tenia su mano izquierda entre su camisa y pantalón, es decir estaba tomando la pistola.           

Después de dar unos cuantos pasos   adelante Kevin estaba al frente de mi, y bajo su oreja cerca de mi rostro, bueno era normal, pero no lo que tenia planeado, mi mente quedaba en blanco mientras el esperaba que le dijera algo que yo ni siquiera había planeado.

- ¿Vas a hablar o no? dijo el oficial mientras se empezaba a alejar su oreja de mi rostro.

Entre en pánico de que mi plan no funcionara, además dude en que volviera a tener una oportunidad así. decidida  mientras Kevin se ponía recto para alejarse mi, tome su cadera con mis piernas y asegure que no se escapara con mis pies, con mi mano  que tengo disponible, tome su rostro y le di un beso.

Supongo que fue por la sorpresa o tal vez solo por impulso, pero puso ambas manos sobre la almohada dé la camilla, descuidando la pistola, en ese momento aproveche y la tome. Solté a a Kevin y lo empuje con mis piernas lo mas fuerte que ellas me lo permitieron.

- Bien es hora de descubrir la cruel realidad porque esto no me gusta nada. dije mientras le quitaba el seguro a la pistola, me apunte a la cabeza.

Cerré los ojos y tire del gatillo, pero absolutamente nada paso.

- Estas loca mujer, la mayoría de sospechosos culpables intentarían matar al doctor y detective para lograr escapar, pero tu preferiste apuntarte a ti misma. Tal vez porque si eres la culpable y te sientes mal por tus crímenes, pero las palabras que dijiste no tienen nada de sentido, es como si no le tuvieras miedo a morir. ¿A que te refieres con descubrir la cruel realidad? Bueno en realidad no importa. La verdad no se en que piensas. Dijo Kevin.

__Le agradezco por participar en mi pequeño experimento, ya comprobamos que Clara es una mujer hábil, inteligente, además sabe como funciona una pistola, supongo que ahora esta de acuerdo en que la debemos dejar esposada de ambas manos. continuo diciendo Kevin.

- Siempre supe que ¿ella era una mujer inteligente detective, a pesar de perder su memoria sigue teniendo muchos rasgos psicológicos de ella, pero le vuelvo a decir que dudo que ella haya cometido tales crímenes de lo que la están acusando. Respondió el doctor Kevin.

En cuanto a mi, yo solo me quede viendo el como caí en una trampa tan sencilla.

- Bueno, en realidad no importa mucho su opinión yo me baso en los hechos, creo  que usted entiende eso. Respondió Kevin mientras se acercaba a mi.

Cuando estaba al frente de mi me sonrió y me dijo:

- Podrías pasarme mi pistola por favor. 

- Claro oficial, intente traerla cargada para la próxima. Respondí con rabia mientras le entregaba su arma.

- Te aseguro que la próxima vez si la traeré cargada pero ya no podrás ni mirar donde la traeré.

- Su seguridad me motiva caballero Kevin. respondí sonriendo.

- Pon tu mano aquí por favor. dijo mientras preparaba la esposa para ponerme en la mano que aun tenia disponible. - Los casos con personas como tu también me motivan a seguir esta carrera hermosa dama. continuo diciendo mientras me esposaba y guardaba la lleve en su bolsillo. -Por cierto besas muy bien es una lastima que estés donde estas. Termino diciendo mientras salía de la habitación.

CONTINUARÁ....



                    

¿UNA VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora