Tu lluvias, mis lagrima, tus planes, mis deseos carnales, una gran diferencia al momento de unir mis deseos con los del eterno, pensamientos profundos y tan altos que no logro imaginar la longitud de sus planes conmigo.
Descubro nuevamente los gustos de Dios, escudriño ese gigante corazón que me ama tanto. Siento tantas fuerzas de correr bajo las lluvias, justo este momento llevo mis lagrimas, lagrimas distintas, renovadas con todo el sentido posible como para describir el brillo que ellas llevan, lagrimas tan cercana a esa cruz, ese acto de perdón y reconciliación.
Lagrima de paz, gozo y una profunda libertad porque te he hallado nuevamente.
Cada vez que te descubro siento el primer amor nuevamente, siento el calor de mi padre, mi señor, tan fresco es este lugar. Me siento en tus regazos y olvido cuanto dolía estar sola, lo cuanto dolió ver mis heridas y no nuestra barca, esta vez las lagrimas no son melancólica sino una liberación que me invita tu persona, el Espíritu santo, enciendes el gozo constante. Fresca lluvia de bendición, lluvia de amor por mi, tu amada quiere seguir amándote Dios.
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El diario de una inconstante.
Tâm linhSiempre llega ese momento donde deja de llover dentro de ti, deja de ser una tormenta, dejas de ser una esclava de temores, dejas liberar tu mente, porque entiendes que el destino no cambia, los caminos... Seguirán siendo caminos, con sus maravillos...