Los días, semanas y meses iban pasando y las citas con el dermatólogo también, la mejoría de Kyungsoo era notoria y éste estaba muy feliz, no sólo porque su cara ahora lucía más limpia, sino porque ahora podía sentirse mejor consigo mismo y eso lo hacía sentirse confiado como siempre lo había hecho.
Sus amigos y el salían más a menudo y ellos agradecían a Dios, al cielo, y a Jongin porque el humor de D.O había mejorado, ahora sólo era serio y un tanto reservado »ellos lo habían aceptado hace mucho tiempo atrás, y aun así le querían«. pero lo gruñón había quedado en el olvido, a menos que Kai fuera demasiado meloso como para desesperarlo y hacer que se desquitara con sus amigos.[-¡Deja mi cara en paz! Quiero dormir -gruñó el chico ojón.
-La primera vez que dormimos juntos eras más cariñoso -respondió Jongin con pucheros.
-Si no te gusta, déjame -a pesar de la seriedad con la que lo dijo, Jongin sabía que su novio no lo decía en serio, por lo que rió en lugar de propinarle un pequeño empujón. El cuál sabía que le iba a ser regresado tan pronto como se diera cuenta.
-Eso jamás -contestó juguetón-. Nunca te vas a librar de mí.
-Tengo mucha suerte -dijo Kyunggie sonriendo apenas.]
Un año exactamente había pasado, Jongin y Kyungsoo seguían juntos. Con diferencias y momentos dulces, ambos lo habían hecho funsionar. El tratamiento del chico había llegado a su fin y ahora todo estaba en orden en su vida, todo. Había elegido el mismo camino que el moreno porque tanto como él, amaba la carrera de medicina, pronto... O tal vez mucho después, ambos esperaban poder vivir juntos en cuanto D.O terminara sus estudios.
-¿Y bien? -dijo expectante-. ¿Cómo me veo?
Kai lo observó en silencio durante unos segundos más hasta que logró salir del trance en el que estaba. Con una brillante sonrisa dijo:
-Perfecto, te vez perfecto -con tres pasos más acortó la distancia entre los dos y envolviendo sus brazos alrededor de Kyungsoo, continuó-: tú siempre serás perfecto para mí.
El chico más bajo sonrió a mas no poder y enrolló sus brazos alrededor de él, correspondiéndole. Había decidido teñirse el cabello de un castaño poco más claro y Jongin sin duda, cada vez se enamoraba más y más del chico. No le importaba trajera lo que trajera, el siempre lo querría. El amor parecía ser así.
Y Kyungsoo, no se quedaba atrás. Le amaba tanto como nunca creyó amar a nadie y sabía que en lo que sea que ambos necesitaran, se tenían el uno al otro para poder superar todos los obstáculos en el camino de la vida, porque no es mentira lo que muchos dicen, el amor sí existe y lo puede todo.
-Y tú para mí.
-Y si te gusta causar problemas en habitaciones de hotel y tener pequeñas citas secretas...
-Ya, cállate -lo interrumpió el «ahora» castaño sabiendo que se refería a aquella canción que solía cantarle seguido. Kai soltó una risita al tiempo que juntaba sus labios con los de su novio, quien gustoso le correspondió.
Jongin era así, juguetón, travieso, divertido. Su pequeño y gran hombre infantil y sensual, y sabía que así pasaría sus días con él, feliz... Porque se amaban.
-Vámonos -dijo el más alto-. O vamos a llegar tarde.
-Suho es más impuntual -le recordó Kyungsoo-. Probablemente él y Lay sean los últimos en llegar.
Aquellas palabras le provocaron una sonora carcajada a su novio quien al mismo tiempo le tomaba la mano y lo dirigía hacia fuera de casa instándolo a apurarse.
-Quiero que me acompañes al centro comercial, necesito unas camisas nuevas -empezó Kai.
-Ni loco, tardas una eternidad en escoger una y al final te llevas todas las opciones -dijo D.O.
-Oye, eso es porque quiero verme bien para ti -se quejó el moreno.
-Si, por eso te doy mi opinión, pero aún así sigues indeciso -explicó el otro.
-Mi novio me hace Bullying -dijo Kai para sí.
Kyungsoo rió.
-Ven acá -lo abrazó-. Sabes que sí iré, sólo estoy molestándote un poco. Yo también puedo -se encogió de hombros dejando sorprendido a su novio.
-Vaya, el chico puede bromear -rió.
Una vez en el coche, Jongin puso la misma canción que le intentaba cantar hacía unos instantes al castaño. Le encantaba enfadarlo, y más por la que le acababa de hacer, era seguro que tenía que cobrárselas.
No era que aquella canción le disgustara a Soo, era sólo que su novio la cantaba tantas veces que llegó a cansarlo.🎶I might never be your knight in shining armor... 🎶
-Una, dos... -comenzó D.O con voz tranquila, pero aterradora.
-Está bien -detuvo la canción con una risita-. Lo que ordene mi chico. ¿Qué quieres escuchar?
-Pon Obsession de EXO -contestó éste viendo por la ventana.
-¿EXO? -preguntó confundido el moreno.
-Si, es un grupo coreano que escucho mucho estos días. Apuesto a que va a gustarte.
🎶I want you, I want you want you,
I want you, I want you want you🎶FIN.
•••
Ya el final 🙌💓 espero que haya sido de su agrado este último capítulo, como la historia era corta decidí hacerlo así para no extenderme tanto, en fin...
Gracias por leer! Esperen el epílogo💜👋
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Cita Con El Dermatólogo → Kaisoo
Historia CortaAquellas pequeñas imperfecciones que suelen salir en la adolecencia o juventud, llenaban la cara de Kyungsoo, sin embargo, nunca creyó que ellas servirían para algo más que sólo bajar su autoestima.