Oh vida ingrata, por ti he perdido la calma.
Oh vida ingrata, por ti he suplicado ser libre
Oh vida ingrata, que por ti estoy condenada a mi alma.
Pongo el grito en el cielo, solo en busca de desaparecer, quiero olvidar pero no puedo, algo me carcome por dentro, me succiona hasta la más última gota de esperanza y tranquilidad; no puedo ver, no puedo apreciar el color de la vida, me duele tanto que no puedo respirar.
Necesitaba ahogarme para volver a intentar encontrar la felicidad, pero eso solo es una efímera suposición de lo que creo necesitar, porque por más veces que intente saciar mis interminables ganas de al fin querer volar en el calor de la alegría, jamás podré hacerlo.
Si estoy vacía, lo estaré por siempre.
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Cartas Para Las Estrellas.
PoesíaEn las noches podemos pensar que estamos solos pero además de eso tenemos la compañia de las pequeñas luces que adornan la oscuridad, Las Estrellas.
