Géminis, un nuevo comienzo- fanfict

Capítulo 16

   Caminaron durante todo el día aguantando las quejas de Seb, el hermano de Géminis, todo el camino. Él siempre había disfrutado atormentado a su hermana y rara vez cerraba la boca, aunque los últimos acontecimientos lo habían dejado sin habla ya había vuelto en sí. A Aragorn le sorprendía que fueran hermanos, Géminis siempre silenciosa y él tan hablador aunque físicamente todos los arquenses se parecían Aragorn logró ver parecidos y difierencias entre su amiga y el resto de su familia. La familia de Géminis al igual que todos los habitantes de Arcus tenían sus característicos cabellos y ojos marrón oscuro completamente liso y sus facciones duras, ella sin embargo, aunque compartía con ellos el color del pelo el suyo era tan rizado, salvaje y esponjoso como una nube y sus ojos no eran de un color definido sino de una mezcla de tres, se podía ver el marrón claro, el verde y el gris luchar para predominar en sus ojos, por esa razón era tan fácil quedarse hipnotizado mirándolos, Aragorn sabía que Géminis siempre apartaba la mirada, ella sabía que sus grandes y pálidos ojos traicionaban sus sentimientos cuando caía esa máscara de friladad que usaba para ocultar sus sentimientos, ella a diferencia de sus padres y su hermano, cuyos labios se componían de un fina línea, tenía unos labios gruesos y rosados y una cara de facciones suaves y redondeadas que le daban un aspecto un tanto infantil y soñador.

Aragorn iba en cabeza y Géminis caminaba junto a su familia sin decir palabra cuando una flecha surcó el aire y se clavó en un árbol frente a Géminis que dio un paso atrás sorprendida. Aragorn observó la flecha aún clavada en el árbol y sonrió a su compañera que la miraba fijamente.

  - Es una flecha del Bosque Negro -dijo él. Ella sonrió y sus ojos se iluminaron como nunca lo habían hecho, Aragorn se preguntó cómo no se habían dado cuenta de que esa pequeña tenía magia en su interior. 

  Géminis corrió con todas sus fuerzas para llagar hasta la arboleda desde la que habían lanzado la flecha, no estaba muy lejos se podía ver desde donde habían estado. El corazón de Géminis se aceleró cuando vio salir de entre los árboles a un sonriente elfo de grandes ojos azules. Ella corría tan rápido como sus piernas le permitían sin pensar en un modo de frenar hasta que estuvo casi encima del elfo, él la agarró y la atrajo a sus brazos estrechándola con fuerza, Géminis le rodeó el cuello con los brazos y sintió que volaba al no tocar el suelo cuando él empezó a darla vueltas. Géminis sabía que luego tendría que justificarse por ese abrazo, tendría que buscar una razón por la que estuviera tan repleto de cariño, probablemente se mentiría diciendo que era amistad, pero ahora no importaba.

  Finalmente se separaron, sonrientes hasta el momento en el que vieron la expresión horrorizada de los padres de Géminis que empezaron a despotricar, ella sabía que se habrían enfadado menos si lo hubiera abrazado como a Aragorn pero para ella no eran iguales extrañaba a Aragorn mucho pero a Legolas lo necesitaba como necesitaba respirar y por eso se había aferrado a él como si su vida dependiera de ello. Ella se sonrojó y dió un paso atrás bajando la mirada como una niña que se prepara para una reprimanda pero Legolas la agarró del brazo y volvió a acercarla haciendo caso omiso de los gritos. Sacó de su bolsillo una cadena con un anillo plateado colgando de ella y se lo puso a Géminis.

  - Teniamos una promesa ¿Recuerdas? -susurró sonriendo y acarició su mejilla con suavidad lo que provocó un estremecimiento por parte de Géminis que lo volvió a abrazar como gesto de rebeldía.

  -Nos equivocamos al pensar que no cometerías la imprudencia de confiar en un elfo -dijo su madre colérica- Apártate de él.

  -No, no lo haré por que vosotros me lo ordeneis. Confío en él -dijo orgullosa de sus palabras.

  -Por muy crédula que seas tú eso no hará que él deje de considerarte una aberración, por donde naciste eres su enemiga y eso no lo cambiarán que tú confíes en él.