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Era un nuevo día para los omegas en el estudio. Jin llegó temprano para empezar a limpiar y ordenar algunas cosas mientras llegaban sus compañeros. Prendió la calefacción y la computadora de su escritorio.

—Buen día, hyung–entró por la puerta el lindo omega castaño con una sonrisa.
Vestía unos jeans con sus típicas botas militares negras y una bonita chaqueta del mismo color.

—Hola Kookie.

—¿Ya llegó Yoongi?–preguntó al mismo tiempo que colgaba su chaqueta en el perchero de la entrada. Una manga de tatuajes a blanco y negro se hizo visible, dándole un look completamente diferente.

—No, sabes que llega a nada de abrir–soltó una risilla, negando.

—Taehyung vendrá en la tarde, quiere que Yoongi le haga una perforación–comentó acercándose a su amigo.

—¿Si? Ese alfa ya ni espacio tiene en las orejas para perforarse.

—Quiere aprovechar que vendrá Jimin hyung de Busan, él quiere perforarse también–decía mientras tomaba una raqueta de la mesa de ping pong para después tendérsela al mayor, invitándolo a jugar.

El pelimorado rodó los ojos con una sonrisa pero aceptó jugar un rato con él.

—Que lindo poder conocer por fin a Jimin, Tae habla mucho de él–sacó primero él la pelotita y empezaron una tranquila partida.

—Si, se conocen desde niños. Jimin-ssi es un alfa muy adorable, hyung–sonrió recordando los lindos mofletes del pelirosa—Tal vez te guste–dice coqueto, alzando ambas cejas divertido.

—No veo eso posible–rió

—¿Por qué no? Es lindo–alzó sus hombros.

—No busco un alfa ahora, estoy muy ocupado–contestó perdiendo un punto en el juego.

Minutos de estar jugando, Jungkook ganó (realmente Jin lo dejó ganar) y un omega con aroma mañanero a café entro por la parte trasera del pequeño local, lucía unas ojeras a penas notables y su cabello estaba revuelto.

—Tarde, tarde–canturreó el más joven dando unos saltitos hacia él, abrazándolo.

—Si, si–gruñó—Suelta ya–dice tratando de quitarse al menor de encima con una mueca.

—Yoongi-yah, ¿dormiste bien?–preguntó SeokJin al verlo más cansado de lo normal.

—Me desvelé consolando a Hoseok y en la mañana se cortó el agua y no alcancé a ducharme–dejó caer su mochila y pertenencias en el suelo y bajó su mascarilla para respirar mejor.

—Pobre omega, ven aquí–el castaño intentó volver a tomarlo en brazos pero el contrario puso una mano en su pecho y lo empujó.

—Puedes ir a mi apartamento a tomar una ducha si quieres y tomar una siesta cuando llegues–propuso el más alto, preocupado por él.

—Estoy bien, solo quiero recostarme un momento–dijo por lo bajo.

Seokjin guardaba su curiosidad por saber que había pasado con su hermano menor porque no quiso preguntar, eran cosas de Hoseok.
Miró como el pequeño omega se hacía ovillo en el sofá y se colocaba un gorrito de lana sobre sus blancos cabellos.
Le dio tanta ternura presenciar a Yoongi removerse en su siesta y como unos leves ronquidos salían de sus labios. No aguantó y se acercó a él, con cuidado besó su sien.

—Apuesto a que si yo hiciera lo mismo, me mete un golpe aún dormido–escuchó como hablaba Jungkook detrás de él con los brazos cruzados sobre su pecho.

Jin iba a contestar con alguna broma si no fuera porque su celular timbró. Varios mensajes aparecieron en su bandeja de notificaciones, eran por parte de la página del estudio. Fue a sentarse y contestó los más que pudo.

Seoulmates Ink | 𝑁𝑎𝑚𝐽𝑖𝑛 / 𝑇𝑎𝑒𝐾𝑜𝑜𝑘 / 𝐽𝑖𝑚𝑆𝑢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora