Feride abrió la puerta y entró lo más silenciosamente posible... arriba había un poco de luz, lo que significaba que él estaba allí... ella sabía que Mahir pasaba algunas noches en esa casa y esperaba encontrarlo... lo necesitaba... aunque en ese momento estuviesen enojados... aunque él lo estuviera...
Cuando entró, lo vio recostado, todo despatarrado, tapado con su saco en el sillón y sonrió sin poder evitarlo. Tan grandote como era, parecía un niño pequeño y ella lo observó un buen rato, enternecida...
De pronto sintió que sus motivos para estar allí no eran solo de deseo físico. Quiso recostarse a su lado, dormir con él, como aquella noche en que él la había ido a buscar y se había quedado dormido en el sillón luego... y ella se había sentado a su lado y habían dormido toda la noche abrazados...
Se quitó el abrigo, se sentó a su lado y él se movió apenas, presintiendo su presencia...
Feride se acomodó entre sus brazos y suspiró. No había otro lugar en el que quisiera estar...
Cerró los ojos, concentrada en el aroma del perfume que él usaba y que ella ya conocía de memoria y luego de algunos recuerdos, se fue quedando dormida...
Mahir abrió los ojos lentamente, un par de horas más tarde y sonrió adormilado, sintiendo su presencia, rodeado de su calor y su fragancia suave, tan personal...
Giró la cabeza y la vio durmiendo en sus brazos, sonriendo apaciblemente...
Recordó su último encuentro, en el que habían discutido, como otras veces... ya ni recordaba por qué...
- Mi Feride...- dijo en voz bajísima y besó sus labios con suavidad.
Feride sonrió en sueños cuando él la rozó con su bigote y él continuó mirándola. La acomodó en sus brazos y disfrutó de su cercanía. Había estado enojado con ella porque no lo entendía, porque le ponía piedras en el camino por hacer lo que él creía que estaba bien, a su manera...
Pero ella no había podido evitar ir a buscarlo, aunque se hiciera la ofendida con él, cansada de sus enojos y eso para él significaba mucho...
Besó su frente con suavidad y ella suspiró. Mahir sintió que su cuerpo reaccionaba a los sonidos que ella hacía. Deliberadamente continuó con sus besos y pasó por su cara y llegó hasta su cuello, y los suspiros se convirtieron en jadeos placenteros...
Se separó de ella y la vio abrir los ojos. Ella se perdió en su mirada, por un momento seria, no sabiendo si él podría seguir enojado y lo vio sonreír con ternura...
- ¿Qué haces aquí? - le dijo y ella se mordió el labio para no sonreír.
- Sabes lo que hago aquí... necesitaba estar cerca de ti...- le dijo y bajó la mirada, como solía hacer cuando decía algo que le causaba más timidez...
- ¿Aunque estemos enojados? - le dijo él sobre sus labios, era tanta la necesidad que tenía, pero no quería dar por terminada la discusión...
- ¿Estás enojado? Recién no parecía...- le dijo mirándolo con ternura.
- Bueno... siempre pensé que seguiríamos hablando del tema...
- Podríamos hacerlo en otro momento... ¿no te parece? - le dijo y alzó las cejas.
- Dices que deberíamos dejarnos llevar y olvidar nuestras diferencias por un rato...
- Algo así... ¿qué piensas? - le dijo ella y lo vio apretar sus labios para no reírse.
- Ojos de gacela... no dejaremos de querernos por tener un par de diferencias...- le dijo y acarició su cara, estaban muy cerca...
ESTÁS LEYENDO
Dejarnos llevar
FanfictionEsta historia corta es un poco atemporal, solo puedo decir que ocurre luego de que Feride se entere de quien es Mahir y luego de una discusión de las tantas que tienen por pavadas. Espero que les guste! A dejarse llevar!!!