Look at me, just at me. KTH+JJK

Hotmate Pt. 2

Comenten mucho por favor.

Kooktae.
Th. 18 años.
Jk 19 años.

Adv. Contenido explícito.

Jungkook gimió practicamente en alto.

Masturbó un poco más rápido su miembro, maldiciendo con un temido grave sin dejar escapar la imagen de Taehyung en su mente.

Su otra mano sostenía su teléfono celular, con un video de Taehyung de no más de tres segundos reproduciendose repetidamente.

No era más que Taehyung de espaldas, moviéndose sobre lo que parecía un cojín, su falda demasiado corta dejando ver todo su trasero por el corto movimiento. Y el débil gemido del chico acompañado con el nombre de Jungkook.

Porque el echo de haber intercambiado números no provocó más que tensión.

Pláticas sucias, en la escuela, durante clases o en receso.

Y desde luego por las noches.

Se volvieron amantes de acabar sus deberes temprano, o al menos Jungkook, para intercambiar mensajes con fotos y videos bastante comprometedores y sucios.

Se sintió demasiado cerca, así que siguió con sus movimientos, sintiendo su muñeca doler y su brazo cansarse, pero siguió masturbandose para después, sin ningún remordimiento, se dejó ir sobre su teléfono, imaginando que era sobre Taehyung.

Después de unos segundos se maldijo por ensuciar su móvil, así que retiró su propia esencia con un papel.

Pero su teléfono comenzó a sonar. Y aún estaba sucio de su propio se en, así que con rapidez lo limpió, en el proceso respondiendo la llamada.

-¿Jungkookie? - escuchó a Taehyung al otro lado de la línea.

-A-ah... Taehyung. Dijo nervioso, intentando limpiar su teléfono. Logrando poner en altavoz el mismo.

-No contestaste después de que envíe ese video. Creí que llegaría a tiempo para llamarte y escucharte. ¿Qué tanto hacías? - dudó divertido.

-Y-yo... Estaba aliviando lo que provocaste. - dijo entrando el pánico al ver cómo su móvil se volvía loco por el touch y la pantalla sucia, la llamada no se había cortado gracias a todo.

-¿si? ¿Qué tanto hiciste?-dudó. Con una sonrisa traviesa.

Y Jungkook al intentar sostener bien su móvil lo dejó caer. El mismo se estrelló, y desde luego se apagó.

-No no... - maldijo intentando encenderlo, pero estaba la pantalla destrozada.

Se golpeó la frente, no sólo había descompuesto su teléfono, si no que había perdido la oportunidad de una llamada sucia con Taehyung.

-Aish me perdí escuchar su voz. - dijo. - ¿ya ves Diosito? Te dije que no miraras mis pensamientos. ¿Es esto un castigo?-

No lo pudo encender durante toda la noche. Así que tuvo que dormir lamentándose.

Al día siguiente, al llegar. Miró que Taehyung no le hizo caso. Seguro se había molestado.

-Hola. - saludó a sus amigos quienes chocaron sus puños con él.

-Hola Taehyung. - saludó con una sonrisa culpable, el mismo le miró de arriba a abajo, antes de girarse a ignorarlo. Y hablar con las chicas.

-Uf... - se escuchó a Namjoon el resto de sus amigos hicieron gestos de dolor.