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Respirar
Mirar los ojos
Pensar
De nuevo respirar.
Por qué me costaba tanto hablar de lo que sentía? Por qué no era tan fácil decir estoy mal? Le tengo miedo a eso? Tantas veces me pregunté a que tenía miedo y nunca pensé en que eso, decir estoy mal, era un miedo.

No era una emoción, rareza o estado de ánimo. Era el miedo de sacar lo que estaba ahí pudriéndose
Siempre quedaba muda al pensarlo y lo ví como una reacción, un mecanismo de defensa, de decir "estoy con miedo pero también quiero que me acompañes". Después de todo, mi silencio también era mi peor enemigo

Siempre quise evitar las preguntas, esconder lo que sentía y dar una sonrisa ante todo pero mi silencio era el reflejo de lo que claramente me tomaba días y horas esconder y como nadie sabe leerlo simplemente se aceptaba que era una respuesta y no una forma de que me mires, que mires que había cuando no estaba nadie y que hacia cuando todo parecía estar bien.

Así era como estaba. Sentada, muda y con miedo
Y el único que estaba a mi lado era tu psicólogo
Acaso entendía lo que me estaba pasando? Sabía lo que pensaba o debía decir?
Ya el sol se estaba en su punto máximo, así cuando lo miras y te quema los ojos y quedas un poco ciego. Supongo que hay personas así. Las miras y quedas asombradas pero siempre es mejor la tarde o el amanecer, después de días entendés que el brillo quema, te deja marcas y huís de él pero también es necesario para vivir. Yo había aprendido así.

Cuando te ví por primera vez me resultaste algo raro. Siempre estabas al final de todo con tu lapicera y callado. No hacías nada más que eso. Algo tan simple
Obvio que todos ya tenían un concepto de vos. No es necesario aclararlo pero tampoco hacías nada para cambiarlo. Y por qué? Que tan necesario era? A donde iban las opiniones de ellos? Dónde te escondías de todo lo que no eras?

No fue hasta que supe que mi primo, quien estaba en su último año de la facultad de psicología, me comentó que un amigo suyo ya había empezado a ejercer su profesión. Y como todo, el primer trabajo no es sencillo. Pero, ¿Cómo se podía seguir después de saber que una vida que dependía de vos no pudo seguir? ¿En que parte de la carrera te explicaban que no era tu culpa o la suya?

Uno estudia lo que le gusta
Uno aprende de lo que estudia
Yo aprendí de vos
Y hoy estudio lo que dejaste.

Y cuando uno se va deja algo. Todos buscaron por días esa carta. La famosa carta de explicaciones y no la encontraron nunca. Encontraron el vacío
Pero habías dejado algo? Cuando no querías comer con tu familia y te retaban pero no preguntaban porque habías dejado algo en tu silencio? O cuando te iba mal en el colegio, volvías de tu casa y pensabas "es sólo un malestar", te ibas a dormir y te levantabas a ducharte, habías dejado algo en esa cama desordenada? Cuando me viste mal porque una amiga me había traicionado y solo me abrazaste fuerte por 10 minutos, me habías dejado algo en tu abrazo? Habías dejado que lo entendías

Entendías que no entendías. Entendías que nadie entendía. Que la mejor arma para seguir era saber que no lo iban a entender y aceptar algo que tal vez dábamos por hecho.
Entendías que estabas solo. Y para entender como era estar solo se lo vivía, lo enfrentabas, le llorabas toda la noche y hacías un desastre para dejar en claro que eran eso pero no rompías, no destruías ni lastimabas porque el desastre no se intercambia, se lo lleva y el que sabe que es eso jamás hubiera dejado que esto pasará. Entendías que nadie sabia que era estar solo.

Que hasta yo, que te había conocido de una manera y terminaste siendo mi amigo, te había dejado sola. No porque quería sino porque había dejado que lo hicieras.

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⏰ Última actualización: Oct 11, 2020 ⏰

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