El diario de una inconstante.

Hoy leo tus cartas.

Amo extrañamente las palabras, son tan vibrantes, calurosa y tiernas, en ocasiones opacas, fácil de leer, pero complicado de comprender el misterio que ella guarda, son tan profunda.

aún más cuando se trata de ti, aun mas cuando ese par de poesías son para mí, desnudas mi alma, besas mi piel, con tus palabras acaricias lo más profundo de mi corazón consiguiendo orden en mi desorden habitual. Eso, eso amo.

Cada carta de amor levanta una parte de mí que jamás imagine que estaría despierta, dentro de tanto vacío no creí estar llena de eso que tanto mencionas, amor.

He aquí trato de descubrirme en cada palabra, en cada frase que hace estremecer mi diminuto cuerpo. Sin duda un padre amoroso y pasivo, dispuesto a abrazar, pero, casi no me gustan los abrazos. Veo la diferencia entre tu mirada y la mía propia ¿Por qué me ves tan grande? ¿Por qué yo? ¿Por qué tu mirada me persigue aun cuando trato de ocultarme?