Ok, supongo que dije que nunca haría eso de "5 años más tarde", pero aquí estoy a punto de hacerlo y en el "filo del cuchillo", nostálgica por recordar mis comienzos en esta industria... como dije, desde que tenía aproximadamente 3 años, o simplemente desde que estoy en la barriga, a mi mamá le gustaba ponerme música porque leyó en una revista de por ahí o New York Times, no recuerdo, ella realmente estaba bebiendo whisky barato cuando me contó eso, a los 5 años de edad; que eso ayudaba a desarrollar el cerebro del bebé. Y lo hizo. En lo absoluto, les estoy diciendo que vayan y les pongan música a sus bebés y van a salir cantantes o músicos, no. Así que siguiendo las recomendaciones de mi madre, en mi crecimiento, escuchaba Queen, The Jacksons, algunos singles de Monroe, The Backstreet Boys y las bandas y cantantes del momento, eso ayudó a desarrollar mi oído y a atraerme el rhythm and blues, el jazz, las baladas de las divas, como Céline, Xtina, Mariah. Cantaba lo que sea. Ok, esto es extraño, mi madre me acaba de sisear "tenías una voz verdaderamente dulce de niña" por supuesto que pondré eso en el libro, madre.
Siguiendo el hilo, encontré a Vetro, que fue mi vocal coach de niña, me enseñó cientas de técnicas, evaluó mi voz y la trabajaba mientras iba creciendo, ya que debido a la pubertad mis cuerdas vocales cambiaban y cada vez se volvía más aguda mi voz. Mi niñez creo que fue una etapa muy difícil en ese sentido, ya que siempre tenía que adaptarme y estar en esa incertidumbre de que tal vez al siguiente día mi voz cambie y tenga que volver a modificarla y más cosas sobre canto en lo que no me extenderé porque es realmente aburrido...
Otro aspecto que recuerdo de mi niñez traumante, además de lo de mi padre, fue el colegio, una etapa algo difícil... me acosaban, o coloquialmente conocido como "bullying". No podía asistir algunos días debido a una que otra grabación o presentación que por lo mismo, causaba burlas hacía mi.
Una vez que tuve la oportunidad de cantar el himno para una competencia de patinaje a hielo, cuando llegué el lunes al colegio las personas se burlaban de mi, me decían que quién me creía, me llamaban "bajita", "gorda", "fea" y todos esos insultos despectivos, lo cuál me hacía sentir algo mal (sí, algo) cada día incrementaban, cada día más personas se enteraban y los maestros siempre me echaban en cara que los cantantes no llegaban a ningún lado o que eso no era una profesión "decente" y me miraba de forma despectiva haciendo que el salón siempre estallara en risas. Varias veces llegaba a mi casa llorando, le decía a mi mamá que no quería volver y Frankie se quedaba a consolarme toda la noche hasta que me durmiera... él es un gran hermano. Hasta llegó un momento que quise parar con todo ese sueño y concentrarme sólo en el colegio, al final sólo era una niña, pero joder, me encantaba eso, era mi pasión. Frankie me dijo que no lo podía dejar, que yo iba a ser más grande que Grande. Me reía. Siempre lo hacía. Y seguía adelante. Eric Vetro también me iba a buscar a casa y me sacaba a rastras para presentarme en esos bares y radios, y me decía que sólo era un bajón, que las críticas siempre venían, que siguiera luchando. Que dramática vida a tan sólo mis, aproximadamente, siete u ocho años de edad. Bueno si a los dos años ya hacía fiestas de tiburones, ¿qué pueden esperar de mí?
Volviendo al hilo, empecé a los siete a practicar canto, a bailar, buscaba las presentaciones de Michael e intentaba bailar como él, escuchaba a Elton y trataba de imitar sus caras, y con el paso del tiempo fue fluyendo mis propias formas de bailar, como una loca. En realidad mi influencia mayor eran las divas, quería ser como ellas, conocerlas, ser toda una estrella, quería "hasta que me persiguieran los paparazzis". Grave error, Ariana. Rebobina.
El punto es que desde los ocho me presenté en bares, estuve estudiando con mi vocal coach Eric, él era muy dulce, debo mencionar que... bueno, irán sabiendo mientras transcurre la historia. Y Frankie era raro con él, Frankie espiaba a Vetro, hasta un día le encontré en su armario una foto de él, le pregunté que si eran amigos y me dijo que sí, que lo amaba, "QUE LINDO QUE AMES A TU AMIGO" le decía, muy dulce e inocente, Ariana. Aunque lo entendía, Eric Vetro aparte de ser un gran vocal coach, era un amor de persona.
A los nueve pude lograr ser algo conocida en Boca Ratón, aparecía en algunos carteles, me presentaba en los estadios de fútbol americano local a cantar el himno, fui hasta la radio de Boca Ratón, que era netamente escuchada en ese lindo pueblo. Yo me sentía la mejor, la famosa, recuerdo que un día una niña vió mis zapatos plateados que pude empezar a costear cuando me presentaba en estos lugares, y me preguntó si eres "Lil A" y yo estaba como "¿what the fuck?" obvio, en mi mente. Me pidió un autógrafo. Llegué corriendo a casa con los lindos zapatos en la mano, ya no podía más, eran algo altos, le conté a Frankie lo que me había pasado, le saqué la lengua, me dijo que era una mimada y le lancé los zapatos, mi mamá me regañó y me mandó a mi habitación. Recuerdo en la madrugada ir al cuarto de Fran a disculparme por mi actitud, lo encontré con mis tacones puestos, no entendía, pero se los regalé en modo de disculpa, yo no era así, no sé que me pasaba.
A finales de ese año, llamaron a mi mamá, que era algo así como una manager, y le preguntaron que si quería presentarme a una audición para un comercial de cereales, mi madre dijo que lo pensaría, obvio yo escuché toda la conversación y le rogué por ir, y ella obviamente me decía siempre que debía ser buena niña, mantener los pies en la tierra, estudiar más que ayer, estaba realmente preocupada por exponerme mucho. El comercial iba a salir en todo el país, eso era mucha exposición para todos y ella tenía miedo a eso, le dije que eso era lo que me gustaba, lo que llenaba mi corazoncito y que era una increíble oportunidad para obtener más trabajo, más dinero. Terminó aceptando. Obvio me rodillé primero y le prometí que rezaría más que ayer, que me cepillaría los dientes 5 veces al día (sólo lo hacía 3 veces, era floja) y que estudiaría al máximo.
Y llegaron mis amados diez añitos... yaaaaaa vaaaa, espera mundo, antes de que entremos en lo interesante... ¿novios? Nunca jaja, sigamos. Bueno, si tenía un pequeño crush con alguien del colegio, pero al estar mi reputación por el suelo y ser el "hazmereir" mi oportunidad estaba por Saturno, oh, por cierto, me encanta ese planeta.
Entonces, retomo... mis diez años: sale el comercial en toooodos los canales nacionales, empecé a ganar seguidores en mi Twitter, bueno algunos pocos. Para ser más exactos, en el comercial salía cantando la canción del cereal, que he de decir que es bastante pegajosa y comiendolo, típico, parecía esa escena de Matilda con sus poderes mágicos, ¿sabes? esa.
Al volverse mi cara relacionada con algo tan pegajoso en Estados Unidos empezaron a llegar propuestas de trabajos más "serias" y no sé si fue por mera suerte o pura casualidad que recibí una llamada de, ya va que me emocionó...
-ALEEEEEXAAAAA, mejor amiga, ayúdame a dar la noticia- grito. Ella sólo viene corriendo y se tira encima mío y escribe...
-Disney.
--------------
Heyyy, se que me tardé un poco, mañana, o sea más tarde creo que escribiré otro capítulo porque ya tengo la idea más formada en mi cabeza, ya sé de donde partir, tuve un pequeño bloqueo (mi primero bloqueo que emoción) y bueno. Lissssto. Espero les guste.
Y si, esta historia es la vida de Ariana Grande pero cambia algunas cosas como alguna vez me la imaginé. Habrán muchas cosas por las que me odiaran.
Decidí involucrarla con Disney y no con Nickelodeon, porque creo que sería muy buena Chica Disney, o controversial, y encajará perfecto en el mundo de los Jonas Brothers, Selena, Demi, Miley, etc...
Ya verán lo que tengo pensado. También quiero agregar como la historia de cómo se conocieron Alexa y Ari. Disculpen mis errores. Qchao.
ESTÁS LEYENDO
R.E.M.
Fanfiction"La otra noche, chico te conocí..." "...Disculpa, mmm, te amo..." "...¿Quién comienza una conversación así? Nadie, pero yo lo hice..." Ella lo hizo. La conocí. Lo conocí. Fue tan malditamente pasajero, pero oh Dios, sólo tú y mi cuaderno de escritu...