Lo extrañamos ¿Sabes?

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Alex y Frank habían estado sosteniendo una muy bonita relación en los últimos ocho meses, vivían contentos el uno con el otro, Alex y Jimmy no tardaron en adaptarse a la casa de Frank, en especial Jimmy, quien ahora no tenía la necesidad de vivir oculto. Frank era feliz, pues ya no corría el riesgo que corría antes al vivir allí, por ello, decidió ampliar su casa y convertirla en la que él siempre quiso, y Alex insistió en ayudarlo con algunas decoraciones, texturas y estructuras.

Los chicos de Calvaland al final se enteraron de lo que había sucedido en Karmaland con respecto a Frank y Alex, y ellos les ofrecieron un lugar en su aldea, pero ellos rechazaron la oferta amablemente, ahora vivirían en la casa de Frank permanentemente. Aunque sí, claro que Frank tuvo que ganarse el perdón de Ampeter luego de lo que había sucedido, finalmente ambos terminaron entendiendo las razones que tenía el otro para hacer lo que hizo. 

Alex y Frank de vez en cuando iban a visitar Calvaland y a los chicos, o ellos iban a casa de Frank. En una de esas visitas Frank tomó la decisión de llevarse a Perdigón a su casa, ahora no corría el peligro de que lo reconocieran los de Karmaland, así que le hizo un espacio en su hogar, sin un corral, ahora podía ir y venir cuando quisiese.

En el pueblo de Karmaland las cosas siguieron normales, pero, al contrario de lo que Alex creía, sí era notoria su ausencia, los habitantes no tardaron en extrañarlo. Fargan, Mangel y Rubius lo echaban mucho de menos, Luzu también pero él trataba de animar a los demás, Willy también extrañaba a su amigo, pero intentaba ocultarlo.

Un día Fargan tuvo una idea, pero no resultaría si lo hacía solo, y únicamente había dos personas en el pueblo que podrían ayudarlo, pero sólo una de ellas estaría más dispuesta a hacerlo, pues era algo ilegalísimo.

-Luzu –Lo llamó.

Era de madrugada, Luzu estaba trabajando en su hogar, cuando Fargan se infiltró silenciosamente, no quería levantar sospechas.

-¿Fargan? –Se extrañó por su discreción.

-Luzu quería pedirte algo –Continuó-, lo extrañamos ¿Sabes...? Somos muchos los que extrañamos a Alexby, y tú eres el único que sabe su ubicación y que realmente haría esto... ¿Crees que puedas llevarnos con Alexby?

-¿¡Qué!? –Exclamó en un tono alto, dándose cuenta de esto bajó su volumen- ¿De qué estás hablando tío?

-No lo niegues, a ti también te gustaría verlo y saber cómo está.

-Pero está fuera de las fronteras, nos vas a meter en algún lío.

-Pues si nos encuentran, todos daremos la cara juntos, no nos pueden desterrar a todos.

-¿Y qué hay de Willy?

-¿Crees que él querría ir a ver a Alexby, sabiendo que está con Staxx? Además él no lo haría, por eso vine contigo.

Luzu guardó silencio, él también quería ir a ver a su amigo y saber cómo es la vida fuera del pueblo.

-De acuerdo –Dijo finalmente-, nos veremos a las afueras esta noche, pero no vengan todos al mismo tiempo, no podemos levantar sospechas.

-Así se habla –Sonrió.

Cuando el sol comenzaba a ocultarse y el día comenzaba a hacerse noche Luzu salió de su casa vestido de negro, nadie podía saber que estaba ahí, se acercó a la frontera, por el lado de la antigua casa de Alex, tenía suerte pues la colina en la que estaba ésta podía ocultarlos mientras se reunían. El primero en llegar fue Auron, Luzu se sorprendió.

-Auron –Murmuró-, no pensé que vendrías tú.

-No creas que te dejaré hacer esto solo, necesitas todo el apoyo posible.

-Pero tú eres el juez de Karmaland.

-Hey, por ahora soy sólo Auron, además, alguien tiene que cuidarte allá afuera.

Ambos sonrieron y esperaron juntos a que los demás llegaran. El siguiente fue Mangel y finalmente Fargan.

-Es la primera vez que vamos, no puede ir un grupo tan grande, somos todos los que iremos hoy –Dijo Fargan.

-Pues vamos, no se separen, será un camino largo.

Todos empezaron a caminar tras Luzu, quien recordaba muy bien el camino que había tomado Jimmy cuando los dirigió hacia su amigo meses antes. El trayecto fue agotador, algunos tuvieron la necesidad de detenerse a tomar un respiro, y es que era muy arriesgado salir con animales para montar, alguien podía notar que se habían ido y delatarlos. No querían eso. Sin embargo, cuando la noche ya era plena, llegaron a casa de Frank y llamaron a la puerta, lo primero que oyeron fue el gruñido de la mascota de Alex, y claro que tardaron en abrir, probablemente ambos chicos que vivían en aquella casa estaban durmiendo, pero luego de un rato la puerta se abrió y dejó ver a un extrañado Frank.

-¿Luzu? –Preguntó confundido.

-Hola Staxx –Saludó.

-¿Qué hacéis aquí? ¿Tenéis permitido venir?

-No –Respondió Fargan-, no deberíamos estar aquí, pero queríamos ver a Alexby, saber cómo está después de tanto tiempo.

Frank sonrió levemente- Iré a buscarlo, podéis esperarlo adentro.

Frank se dirigió a la habitación que compartía con Alex y lo movió con suavidad para despertarlo.

-Alexby, pequeñito.

-¿Mm...? –Hizo un ruido, haciéndole saber a Frank que estaba consciente.

-Están tus amigos abajo, quieren verte.

-¿Qué? –Se levantó de golpe.

-Te esperan abajo –Sonrió ante la reacción de su novio.

Y sonrió aún más cuando Alex prácticamente saltó de la cama y corrió hacia el primer piso de la casa. Fue ahí cuando se encontró con sus amigos luego de meses y meses, se abrazó fuertemente con todos y hablaron animadamente, también se dieron el tiempo de conocer a la pareja de Alex, quienes no la conocían, claro, descubriendo así que era un gran chico y que realmente no quería hacerle daño a su amigo, sólo hacerlo feliz.

No pudieron quedarse mucho tiempo más, debían regresar antes del amanecer, pero prometieron que volverían pronto. Y así fue, cada tres o cuatro días un nuevo grupo era dirigido por Luzu o Fargan hasta la casa de Frank, en las siguientes escoltas comenzaron a sumarse Rubius y Lolito, todos queriendo ver a Alex, visitarlo y saber qué es de él, aunque debían tomarse turnos para ir, pues ellos mismos determinaron que si el grupo era mayor a cuatro, comenzarían a levantar sospechas.



(Parte 1)

Forastero | Staxxby en KarmalandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora