Una Casa De Locos

Capítulo Dos: Sin Cena.

—¿Quien hace la cena? — pregunta Tyler.

Alternamos la mirada entre cada uno, claramente todos negamos, digo ¿A quién le gusta cocinar?

—Nadie al parecer —dice Andy llegando de la cocina con un plato de patatas fritas y un jugo de manzana, se sienta frente  nosotros con un aire de superioridad por tener comida.

—A tí quien te hizo eso — le pregunta Ryan señalando el plato de comida.

—Ah, no les diré porque si les digo ya no va a ser un secreto— todos lo miramos sabiendo que nos dirá quien le cocinó las patatas— ¡Agg! Como insisten, bien les contaré, que le digo a la vecina que es hermosa y me regala patatas fritas — todos nos miramos entre sí y soltamos sonoras carcajadas, Andy podrá tener encanto pero no el suficiente, Andy se nos queda viendo hasta que se da cuenta lo que dijo y niega.

—No, realmente fui yo él que las hizo — dice echándose una a la boca.

—¡Como sea!, ¿quién hace la cena? —  vuelve a preguntar Tyler.

Y todas las miradas se dirigen hacia mí.

—¿Que? no solo porque que sea mujer significa que haga la cena, además ustedes son más deberían hacerla entre todos mientras yo los observo —reprocho.

—Escriban sus nombres en un papel y lo echan a un recipiente sacan dos papeles y esos serán los que preparan la cena, ¿Qué les parece? — opina Andy mientras come, todos asienten menos yo, por más que intento reprochar ellos me pasan un lápiz y un papel.
Escribo mi nombre y lo echo en el recipiente que había pasado  Ryan. Todos los nombres se encuentran en el recipiente mientras Josh los revuelve.

—Andy mete la mano y retira dos papeles sin mirar —le dice Josh, este asiente y luego mete su mano al recipiente para luego sacar dos nombres y leerlos.

— Y vamos a ver quién es... Alexa — dice como si nada, murmuro cosas sin sentido para luego levantarme e ir a la cocina, ni siquiera esperé para escuchar a la  persona que me ayudaría.

Si creen que voy a cocinar, lo único que haré es unos espaguetis en salsa con jugo de naranja y ya.

— Que vas a cocinar — escucho a mis espaldas al amigo de mis primos,

¿Escuche mal o dijo "vas" a cocinar?

—Vamos a cocinar — le corrigió.

Giro para verlo sentado en uno de los taburetes de la cocina.

—Tú, yo no, solo te voy a mirar mientras cocinas, no se cocinar—responde indiferente  mientras teclea su celular.

—¿¡Es enserio no sabes cocinar nada!?.

— No, y no seas tan ruidosa — responde con cierto hastío.

Lo veo con desaprobación y empiezo  a sacar un paquete de los espaguetis, el atún y la salsa para ponerlos en la mesa de preparar. Hago todos los procedimientos, los pongo a hervir para que se cocinen.

Me dan unas terribles ganas  de ir al baño, veo a Stephen que está con su celular muy  concentrado, al percatarse de mi mirada levanta la vista y me mira arqueando una ceja.

— Una foto te duraría más — dice egocéntrico y con una sonrisa pícara.

—Para que sepas te miraba para decirte que si podías vigilar los espaguetis mientras voy al baño y no se queme la cena — respondo de mal humor, este chico sí que me saca de quicio.

— ¡Vaya que humor! — exclama divertido.

—Tú eres el causante— respondo molesta — Vigila los espaguetis que no se quemen ya regreso —digo para luego ir al  baño.

Hago mis necesidades y lavo mis manos, salgo del baño para dirigirme a la cocina, un olor invade mis fosas nasales, un olor a algo quemándose, sin pensarlo dos veces corro hacia la cocina para ver que es lo que se quema, cuando llego me doy cuenta que los espaguetis se estaban quemando.

Me giro para mirar a Stephen que sigue con su celular en mano. Parecía que no se habia despegado de allí.

— Te dije que vigilaras los espaguetis—le digo cuando levanta la vista.

—Estas diciendo la verdad, tú dijiste vigilar los espaguetis, no dijiste bajar la llama de  los espaguetis o apagar la cocina — habla burlón, baja la vista nuevamente a su maldito celular, la idea de arrebatarle el celular y hacerlo trizas era muy tentadora.

— Si no hubiera corrido para apagar la cocina se hubieran quemado y si saben algo ahumados será tu culpa —le hablo amenazadora.

Salgo de la cocina muy molesta, esto será más difícil de lo que creí.

—Con esa cara que traes parece que viste  un demonio —dice Chris mirándome sonriendo.

—No molestes— advierto.

Me dirijo a mi habitación y cierro la puerta para enseguida tirarme a la cama.

Dos toques en la puerta me hacen bufar y  levantarme de la cama para luego abrir la puerta, me encuentro a Tyler

— ¿Qué quieres?

—¿No vas a comer?, la mesa está servida — habla con una ceja alzada.

—Tal vez después. —digo para luego cerrar la puerta y volver a mi cama.

Estar con Stephen será más difícil, no es nada simpático, no obstante; es jodidamente atractivo, su cabello rubio y sus labios tentadores...

Me coloco una almohada sobre el rostro, estoy abrumada.

Poco a poco me quedé dormida pensando en Stephen.

------------------------------------

Aqui les dejo otro capítulo.
Esperamos les guste. ❤️ ❤️ ❤️
No olviden dejar sus opiniones mediante los comentarios.

¡Nos leemos luego! 📖✍🏻❣️