Para mi, uno de los honores más grandes que he podido tener, es cuando un empleado se acerca para comentarme sus preocupaciones personales en un ambiente profesional. Ser terapéuta, pero además representante de una empresa de desarrollo humano, como lo es la Universidad Gestalt, es un puesto de honor y de responsabilidad.
Muchas veces los jefes olvidan que están ahí. A pesar de ser líder por imposición (dueños o hijos de tal) o simplemente líder por inspiración. El jefe debe de tener una idea clara y un gusto extremo por trabajar en equipo.
Si la idea de un jefe de la era industrial es algo que te apetece como líder, entonces tu desarrollo emocional como intelectual aún no evoluciona al modelo nuevo de las empresas de servicios y de la era digital.
El jefe de hoy, debe de cumplir con dos áreas imprescindibles:
1. inteligencia emocional y 2. Gusto por la gente
A pesar de que estamos a finales del 2012, aún hoy encontramos líderes nocivos y rencorosos que creen estar ahí porque la empresa los necesita, en vez de humildes y desarrolladores de personas, que saben que son parte de un grupo.
La inteligencia emocional no sólo se adapta de la piel hacia adentro, sino que también se guía en lo que es la predicción emocional. Un tema aún no muy conocido por todos y que lleva a la reflexión sobre el éxito de algunas personas que tienen casi los mismo talentos que otras.
La predicción emocional, es un elemento fundamental en un líder inspiracional. Es la forma en que podemos entender lo que el otro puede o sintió cuando le digamos o hagamos algo.
Para concluir, quiero agradecer a mi equipo de trabajo en la Universidad Gestalt, por su retroalimentación constante y el amor que tienen a apoyar el crecimiento de la gente que los rodea.
Adrián Salama
Psicoterapeuta y Coach Gestalt
Dudas, sugerencias y contrataciones: adriansalama@gestalt.mx