Creo que nuestra condición (de seres sexuados) es nuestra motivación (para ponerla en práctica). Practicamos el sexo porque somos sexo.
-Valerie Tasso.
Nunca, ni en sus sueños más salvajes, se imaginó estando en esta posición o mejor dicho nunca im...
"El sexo nos descubre, el sexo nos revela como somos, por eso es tan estremecedor, nos despoja de toda apariencia"
-"Cosmópolis" (2003), Don DeLillo.
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Trompetas de ángeles y coros celestiales era lo que resonaba en la cabeza de Kageyama en este preciso instante, sabe perfectamente que está vivo porque puede sentir los labios de Kuroo recorrer todo su cuerpo, pero ciertamente se ha olvidado de respirar por un momento, la mano fría de Kuroo se posó con fuerza en la nuca de Kageyama agarrando en el camino un poco de su cabello para forzarlo a echar la cabeza hacia atrás y darle espacio para besar su quijada hasta llegar a su cuello y alternar entre mordidas y besos tan calientes que Kageyama siente que su piel hierve, si esto es el infierno definitivamente no quiere dejar de ser pecador, ya ha probado un poco de lo maravillosa que puede ser la boca de Kuroo, si esto se tratara de recitar poesías, Kuroo siempre puede recitar las más apasionadas y dramáticas, cada movimiento perfectamente calculado para despertar placer, con una intensidad sofocante, pero igual de suave como lo es el algodón al tacto, es tan contradictorio y la vez tan excitante, definitivamente su boca recita la lengua del infierno de lo caliente, demandante e intenso que es, pero te lleva a los lugares más preciosos, aquellos que muchos describirían como el cielo.
── ¿Sabes algo? Me encanta lo dispuesto que estás para mí, se nota que quieres que te haga mío ¿Serás un chico bueno y obedecerás? «cada palabra que Kuroo pronuncia es un manjar para Kageyama quien está demasiado hipnotizado como para decir algo coherente»
── S-sí, lo seré.
── Mi nombre, utiliza mi nombre cuando me respondas.
── Si Tetsurou.
── Buen chico, vamos a quitarte esto que no lo necesitas «diciendo esto Kuroo procedió a quitarle la ropa a Kageyama y dejarlo solo en bóxer, y luego despojarse de la suya, el calor entre ellos aumentaba con rapidez, parando sus acciones por un momento quedó frente al setter deleitándose con la vista de su piel clara, su cuerpo definido, su respiración ansiosa y por supuesto su erección creciente, Kuroo está maravillado por esa imagen y se siente más que hambriento, necesita sentirlo, probarlo, quiere embriagarse de él, pero puede esperar, solo un poco más»
── Quiero que me escuches bien ¿Sí? Quiero hacerte sentir bien, pero quiero que hagas algo por mí, si estoy siendo demasiado rudo, te estoy lastimando, o sientes que simplemente no puedes aguantar solo dímelo ¿Está bien? Si te sientes incómodo con algo dilo, si te cansas dilo, si no te gusta algo dilo. Estoy aquí para ti, estoy aquí solo para hacerte sentir bien gatito, pero tienes que decírmelo ¿Entiendes?
── S-si Tetsurou. «Kageyama está embobado con la vista que le regala el mayor, no importa si es la primera vez que lo ve así, ya está memorizando el ancho de sus hombros, o como en su torso se delinea cada músculo, o como las venas sobresalientes en parte de su abdomen, cadera y brazos pueden verse tan malditamente deliciosas, o lo fuerte y divinos que se ven su trasero y sus piernas, no importa cuantas veces lo viera de esa manera, Kageyama ya estaba reclamando esa imagen como su favorita, Kuroo es demasiado atractivo para su propio bien y parece que ni siquiera tratara, en absoluto»
