Dedicado a Jaylong_Black_333
—Puedes confiar en mí, te aseguro que nadie nunca podrá encontrarte si así no lo deseas-ella sonrió irónicamente
—Te debo mi vida, gracias a ti estoy de vuelta, creo que lo que me reste de existencia no me alcanzara para pagarte y agradecerte está segunda oportunidad que me diste —lo miro fijamente a la cara
—Hace mucho me juraron amarme el resto de su vida,—dio un suspiro nostálgico —Thomas nunca prometas nada que no puedas dar o cumplir, es mejor aquello que no se promete —se levantó de la meza en la cual se encontraban sentados
A cientos de Kilómetros un hombre recordaba ese día en el que hizo aquel juramento, los recuerdos estaban nítidos como si hubiera ocurrido el día anterior pero de aquellos sucesos había transcurrido un tiempo prudencial
Inicio del Flashback
Octubre
Era una noche tranquila a finales de otoño, se celebraba el cumpleaños de Alexander Corvinus, es que celebrar 1606 años no era cualquier cosa, muy pocos podrían siquiera aspirar celebrar aunque fuera un centenario, los hombres de confianza de Alexander se encontraban en la fiesta que se había organizado ese día se celebraba un año más de vida del primer inmortal, Clarise con ayuda de François habían organizado toda la celebración, quería que ese día fuera memorable para su esposo, los gemelos se encontraban estudiando lejos de casa por ende no estaban con sus padres, la celebración había sido por lo alto, se encontraba vestido con un smoking negro para la ocasión a pesar de que no era del todo de su estilo se sentía a gusto con el, ella estaba enfundada en un vestido rojo que había admirado toda la noche, la celebración había sido amena habían chistes y recuerdos de anécdotas pasadas que sucedieron en labores, más de uno de los invitados se habían marchado ya, algunos con más licor en la sangre que otros, los anfitriones se habían retirado para dormir una vez concluyó la reunión, subieron al segundo piso de la casa rumbo a la biblioteca ya que el había insistido en querer hablar con ella en un lugar tranquilo
Ingresaron con cautela a la biblioteca principal la instancia parecía una amplia habitación repleta de estantes y libros de la familia, al ingresar ella el cerro la puerta con seguro—Señorita Clarise, me pregunto si ese vestido fue elegido de manera deliberada o con algún motivo en especial ?—pregunto un desinhibido ojiazul , ese vestido lo traía muerto desde hacía mucho, no era que tuviera una afición con los vestidos femeninos solo era que en aquellas armoniosas curvas todo se veía increíblemente provocativo
—Creo que eso tendrá que averiguarlo Sr. Corvinus—susurro de manera coqueta buscando que el pez mordiera el anzuelo —Con que hay que averiguarlo—la miro maliciosamente
—Ya lo veremos—termino de acortar la distancia que los separaba se acercó al rostro de ella tomándolo delicadamente para comenzar a besarla de manera lenta pero apasionada al cual correspondió ella enredando sus manos al rededor de su cuello, sus manos descendieron a su cintura la cual acarició con ansias demostrándole el deseo de sentirla, ubicó sus labios cerca a su oído para susurrarle —Hoy te haré ver las estrellas, está noche no habrá nada que me detenga de hacerte pasar una noche en vela —la cargo por la cintura mientras reanudaban su apasionado beso, la descargo en un sofá, ubicó una de sus rodillas para soportar su peso en medio de las piernas de ella
—Yo quiero que hoy las estrellas envidien nuestro fulgor —le acarició el pecho por encima de la ropa, se acercó a su oído —Anhelo que lo que tú desequilibrada mente imagino lo conviertas es una acción —le dio un sensual beso húmedo en su cuello, ante la caricia el ojiazul cerró los ojos disfrutándola, comenzó a hacer un camino de besos desde el cuello de su esposa hasta su vientre, con maestría levantó aquel vestido rojo que lo había enardecido, acarició con suavidad las piernas de la joven, con las palmas de las manos separó la cara interna de estas, trazo suaves círculos sobre las piernas y su vientre mientras observaba la reacción a sus caricias, acercó su cabeza al punto deseado para comenzar a tocar aquella tersa piel, su lengua recorría con deseo aquel recóndito lugar, la sentía estremecerse ante sus caricias, daba pequeñas succiones en aquel punto neurálgico que la hizo presionar su cabeza contra ese lugar, aumento la intensidad de sus caricias escuchándola jadear placenteramente por la acción, introdujo dos largos dedos en su interior tocándola de manera magistral, sentía lo apretada y estimulada que estaba, un lento pero profundo ritmo pronto la arrastró a un orgasmo demoledor del cual bebió como si de un manantial se tratase
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UNDERWORLD: UN NUEVO ORDEN
Fiksi PenggemarTras siglos de guerra y limpieza, la misión se comienza a hacer incierta, soledad, amor, azares y una eternidad son una mezcla peculiar