Derrumbe

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-¡Señor Stark! Siento interrumpir pero... debemos irnos.

-¿Sucedió algo?

-Algo así, lo siento señorita Potts pero tengo que sacar al señor Stark de aquí -se acercó a mi oreja y me susurro- confía en mí, te explico luego por favor.

-Ok, no hay problema, yo me quedo a supervisar todo.

Me tomo del antebrazo, miro de izquierda a derecha todo el tiempo mientras nos dirigíamos a una especie de armario de intendencia.

-Steve ¿Qué significa esto?

-Eso mismo te iba a preguntar Tony –su semblante ya no era preocupado, sino que se transformó a uno molesto, su cuerpo se tensó- cierta señorita me entrego esto y me dijo que estas embarrado hasta la nariz.

-¿Qué dices?

Fue en ese momento que me extendió un sobre amarillo, estaba desconcertado pero tenía que saber de qué demonios hablaba y cuando las vi no lo podía creer.

-¿Quién te dio esto?

-¿Entonces es verdad?

-¿¡Quién te dio esto!?

-¡Solo dime que no fuiste capaz de esto Anthony!

-¿¡Crees que sería capaz de algo así!? ¡Por supuesto que no Steve, por Dios! ¡No soy lo suficientemente estúpido para vender a ambos mandos! Yo me encargo de la ingeniería, del armamento, el trabajo de los contratos de la administración se la dejo a... -No puede ser, estuvo en mis narices- ...no puede ser.

-¿A quién Tony?

-Tengo que hablar con él.

-¡Tony no!

-Solo mantente cerca de mí, te avisare cualquier cosa, por favor Steve... solo mantente a la vista.

-De acuerdo -sostiene mi mano y le da un breve apretón, y al levantar la vista, que no sabía que la baje, me da una sonrisa que más bien parece una mueca preocupada.

Ambos no estábamos seguros de lo íbamos a hacer pero lo haríamos;salimos del armario aun con las manos entrelazadas rumbo a la salida, había escuchadoque Obi quería irse y con la prensa afuera se demoraría en irse. Se estaba tomando fotos cuando lo vi, sentí cuando Steve soltó mi mano y escuche un "cuídate" en mi oreja, eso solo me dio más valor para enfrentarlo

-Nos permite por favor- lo escuche decir mientras tapaba el lente de la cámara y lo alejaba.

-¿Ya viste etas fotos? Mmm ¿Qué está pasando en Turquía?

-Tony, no podemos ser del todo inocentes- me lo dijo y no alejo de la vista del público y con un movimiento de mano le confirme Steve que estaba bien.

-¿Te dijo algo? Yo fui inocente cuando dijeron que había una línea que no íbamos a cruzar, así se hacen los negocios ¿Ahora negociamos por debajo de la mesa? ¿¡Obi!?

Muestras miradas se cruzaron y nadie la iba a bajar, al menos yo no, pero el simplemente la desvió y me dijo que nos tomemos una foto.

-¡Ahora de las fotos!- nos abrazamos de lado e inmediatamente los fotógrafos nos invadieron con flashes, fue ahí que susurro.

-Tony ¿Tu quien crees quien te saco? Yo fui quien solicito que te sustituyeran... solo te quería proteger.

No me lo podía creer, solo sentí como me soltaba y lo vi bajar las escaleras faltantes e irse rápidamente hacia su carro con su ejército de guardaespaldas, no creí que fuera capaz.

-Tony hay que irnos –su mano sujetando la mía me saco del trance y lo mire- vámonos a casa.

Me deje llevar hasta el carro, le dije que no podía conducir y entendió. Esa noche fue la primera vez que caí en cuenta de la realidad a la que me enfrentaba; no solo me enfrentaba a un mercenario loco o una relación rara con Steve. Fue como si me sacaran de mi burbuja y realmente darme cuenta que no contaba con nadie, que estaba solo contra el mundo, como lo fue en el momento de perder a mis padres.

-Trata de dormir ¿Si? Estaré en la puerta por si me necesitas- escuchar su voz me saco de mi cabeza, vi mis piernas tapadas con la colcha de mi cama y por el rabillo del ojo pude distinguir a Steve sentado en mi lado derecho

¿Cómo llegue a mi cama? ¿Cuándo salí del carro? Me sentía perdido, por segunda vez en mi vida no sabía qué hacer, cambio mi perspectiva, así que decidí arriesgarme un poco, y esta vez yo sostuve su mano antes de que mi rubia compañía se fuera y se levantara de mi cama.

-Quédate, no te vallas, no... no dejes que me derrumbe por favor- mi voz se rompió y sentí como mis mejillas se mojaban. 

Y así como sentí que todo se derrumbaba, sentí que alguien mi sostenía, me ayudaba, me detenía todo que giraba y andaba sin cesar en mi cabeza; y ese alguien fue Steve cuando él poso sus labios sobre los míos.

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Holaaa queridos lectores, estooooy viiivaaaaaa y la historia más.

Sorry, me dio un bloqueo cañon.

Espero haber cumplido sus expectativas para este capítulo y al fin hubo beeesooo.

Cualquier corrección aganmela saber y algun dia lo arreglare, jijiji

Nos leemos luego😻💖


STONY»El guardespaldas«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora