" Relación imposible " [Oikawa Tōru]

U n o

Solo había pasado una semana desde la noticia, pero ya estaba subiendo al bus que me dejaría en Miyagi.
- Acuérdate de llamar cuando llegues -
- Ya se -

Me subí al bus y me dirigí a mi asiento "18" que casualidad es el número de mi edad, me senté y me puse los auriculares, pretendía escuchar música o dormir en este viaje.

Después de un viaje de 6 horas baje en mi destino, fui a buscar mis maletas y me dirigí a la salida del lugar donde me esperaba una señora de 78 años de edad con una sonrisa en su cara.
- Oh MitMit que grande que estás mi pequeña -
- Jaja, gracias abuela -

Empezamos a caminar hacia su casa, mientras le mandaba mensajes a mis padres para que sepan que llegué bien, mi abuela me contaba la misma historia de siempre.
- Entonces yo lo agarre por atrás y le pegue en la cabeza, y por último le dije -
- "Seré una mujer pero tengo más huevos que vos" -

Dijimos al unísono, ella rio y yo le seguí el juego, después de unos minutos caminando llegamos a una casa, era bastante grande para que sólo viva una persona. La abuela me guió hasta donde sería mi nueva habitación y me dejo desempacar mis cosas, no tenía mucho ya que la mayoría era ropa, y cosas básicas. Más tarde me mandaría en el resto de mis cosas. Cuando ya acomode la mayoría de objetos que tenia, le mandé mensaje a mi mejor amiga Kiyoe.

Kiki <3

Ya llegué, odio este lugar
esta demasiado vacío

No seas exagerada Mitsu-san.

Dices eso porque no esas
acá

Yaya, por cierto hablamos mañana,
tengo que estudiar un oral para mañana.

No le contesté nada ya que no sabía que decir, baje a comer.
- Mmm, abuela huele delicioso ¿qué estas haciendo? -
- Una antigua receta familiar, hace mucho no cocino para vos y te debo hace de mis mejores platos -
- Abuela no te preocupes -

Empece a poner la mesa, mi abuela era alguien amigable y confiable, también tenía un carácter fuerte cuando quiere, no deja que nadie le pise.
- Por cierto MitMit, que cuerpazo que tienes, me hace acordar a mi cuando era joven, los muchachos se morian por mi -

Pude sentir como mis mejillas se ponían roja y sentí calor.
- A-abuela no digas eso -
- Pero es verdad, mira esta cintura y esas sandias que tienes -

Me tape el pecho rápidamente y creo que el rojo que estaban en mis mejillas pasó por toda mi cara, y hasta se podría freír un huevo en mi cara.
- Jajajaja, estoy bromeado, es verdad que tienes un cuerpazo pero tranquilízate mi niña -
- ¡ABUELA! -

El resto de la noche pasó normal -por suerte- y al día siguiente, me levante hice mi higiene básica y me dirigí a lo que sería mi nueva preparatoria. El uniforme no me quedaba tan mal, prendí me celular para buscar el camino que debía tomar para ir. Caminando sentía algunas miradas en mi pero no le tome mucha importancia. Al llegar pude notar que era más grande de lo que imaginaba.
- Hola Hola, eres la nueva ¿Verdad? -