Noventa y uno

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Las visitas se habían ido hace algún rato y tras limpiar la loza ocupada, Taehyung quedó libre para acompañar nuevamente a su novio, quien descasaba sobre el sofá.

- Te ves más tranquilo – dijo el menor mientras se acurrucaba al costado de su novio.

- Si, creo que me hizo bien la visita de los chicos, a veces es bueno un poco de caos.

- Siempre tenemos mucho caos.

- Si, pero este es de un tipo más tolerable... Y hace que me replantee algunas cosas. No quiero pasar años aquí intentando limpiar la compañía de mi familia, no es algo que me interese y definitivamente no quiero tener 50 y estar amarrado a esta situación...Namjoon y Hoseok tienen razón cuando dicen que esto no es lo mío, pero... ¿Soy como un niño que quiere ser mimado? – Taehyung lo miró fijo sin entender – Puede que en el fondo quiera que mamá me aplauda por mis logros, nunca lo ha hecho, no al menos de corazón, y quizás si logro dejar la empresa en sus manos sin tener a esos viejos inútiles haciéndole la vida imposible ella va a reconocer mi esfuerzo.

- ¿Por eso haces todo esto?

- Puede que suene patético, y quizás lo es, pero en el fondo, quiero que valore mi esfuerzo, no quiero que me vean como un tipo depresivo que no puede hacer nada por si mismo, y por eso se escaba y esconde cada vez que puede, quiero que sepan que puedo hacer las cosas tan bien como ellos, que no soy menos que ellos, que estoy a su altura, y luego cuando se den cuenta de eso, me iré y recuperaré mi vida tranquila y ordinaria en Seoul, haciendo edificios extraños y llegando a casa para encontrarme contigo... Eso quiero.

Taehyung se abrazó aún más de su novio, en su interior suponía que lo que tanto le afectaba a su alfa era el desprecio que había sentido por parte de su familia, y escuchar que esas palabras salieran de su boca lo alegraba en cierta forma porque ya no tenía esos sentimientos apretados en su interior, ahora los había compartido y podían dar un paso adelante, podían intentar superar los miedos para dar el primer paso.

- Estaré contigo Yoonie, te lo he dicho y lo repito mil veces. Sea lo que sea que tengas planeado aquí estaré.

- Lo sé bonito – le acarició el cabello. – Lo primero que debo hacer es contactar a Seulgi, no puedo seguir evitándola, ella ha sido increíblemente tolerante conmigo, es decir, llevamos año trabajando juntos, he tenido miles de sesiones y parece que no hemos avanzado nada, me siento en el sillón y lleno las horas con divagaciones sin sentido solo porque temo dar un paso adelante... Me avergüenza decirlo, pero a veces es cómodo estar así, es decir, te acostumbras a estar deprimido, te acostumbras al mal estar, a no querer hacer nada, a no pensar en el futuro porque no quieres uno, a esperar morir en cualquier momento, pero... ¿Ya me aburrí de eso? Creo que ya no quiero vivir así, no quiero cumplir 30 y seguir viviendo así, seguir atormentado con cosas que pasaron cuando era un niño, no quiero seguir así... Quiero que el día que muera sentir que he hecho cosas importantes en mi vida, y eso no lo sentiré si sigo así... Quiero ponerle un fin a la relación tormentosa que tengo con mi familia, quiero cortar con ese vínculo doloroso que me une a ellos, quiero que sean solo mi familia, y nada más, no un cúmulo de malos recuerdos, y así podré decir simplemente que no me interesa que todo se vaya a la mierda, que ahí ellos ven cómo se salvan. Pero les demostraré que soy capaz de hacerlo, y luego cuando finalmente lo reconozcan, podré ponerle fin a esto... - Yoongi sonrió genuinamente, su rostro se mostraba iluminado y lleno de energía, como hace mucho Taehyung no lo veía.

- Rawr – soltó el menor para luego reír.

- Te estoy contando algo serio y tu me gruñes. – Le revolvió el cabello.

- Siento mariposas en mi estómago alfa, y una alegría gigante en mi corazón.



Fragancia [Taegi/Yoontae] Historia CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora