Tengo un nombre, sí, pero por obvias razones no lo diré, me pueden llamar "William", es un pseudónimo que utilizo para absolutamente todo. En realidad el pseudónimo completo es "William Hubert Gorvek". William viene dado por mi escritor favorito, William Borroughs que me llevó un par de años a través de historias psicodélicas; Humbert es el segundo nombre de mi abuelo (transformado a inglés, obvio), quien ha sido un pilar increíble en mi vida, es la persona que más amo en este mundo y daría lo que sea por ese viejo y Gorvek, es porque sí, suena genial (o al menos eso creo yo).
Escribo esto porque siento la necesidad de expresarme y nada más... desde que tengo 7 años he querido hacer algo en internet, he intentado de todo, hacer vídeoblogs, escribir libros, hacer vídeos convencionales, gameplays y un muy largo etc.
Este será una especie de último intento, aunque en realidad no intenté como tal... siempre he tenido miedo de qué dirá la gente, por lo que siempre que llegaba el momento de publicar, de mostrar mi creación, lo dejaba atrás, no quería que nadie descubriese que tengo ciertos sentimientos que solo comparto conmigo mismo. Pues eso se acabó, o algo así, la verdad es que no espero que nadie lea esto, y si lo haces, gracias, en serio.
Déjame decirte que solo el hecho de que estás haciendo scroll en tu celular o computador significa demasiado para mí y que vas a saber cosas de mí que muy poca gente sabe. Sí me permites (y no te aburro) voy a contarte un poco de mí.
Soy un chico de 19 años, gordo, tengo gatos y un perro. Suelo pensar demasiado las cosas y suelo hablar demasiado pero hacer poco; es por eso que la gente ya no cree en mi palabra. Me he planteado cambiar todo eso (y en serio quiero hacerlo) pero temo que se ha vuelto casi patológico en mí... como la necesidad que tengo de comer hasta que me duela el pecho o morderme las uñas o incluso odiar mis pensamientos a veces. Como notarás, querido lector, no soy la persona más interesante del mundo. Tengo amigos, o algo así; me gusta llamarlos "compañeros", ya que a veces siento que nunca me consideraron su amigo en realidad. Nunca he sido el famoso, el que le cae bien a todos, el que tiene muchos amigos y va a fiestas ni nada por el estilo, tampoco soy un cliché del otro tipo... de los que tienen buenas notas, que leen cientos de libros, usan frenillos ni nada por estilo.
Creo que me estoy enrollando demasiado, así que lo diré como muchos dicen que soy: raro, siempre paso hablando y cansa al resto de personas, orgulloso y presumido. Suelo despreciar las ideas de los demás y a pesar de pasar descansando me gusta decir que me esfuerzo demasiado. Cuando estoy con un grupo de personas -según un chico al que llamaremos Kevin -parezco agobiado, como si no quisiera estar ahí, así que cuando quiero incluirme a la conversación o hacer un chiste queda articial; como si algo no cuadrara.
Se me olvidó decir algo, estoy un poco triste. Recuerdo que en The Good Place dicen: "Los humanos estamos un poco tristes siempre, porque sabemos que un día vamos a morir." palabras más, palabras menos. Creo que es por eso, todos le tememos a la muerte y más todavía a una muerte que no sea "digna". Creo que por eso la gente recurre a veces a la eutanasia, le tememos a la muerte, pero le tememos más a la imagen que se llevará la gente que amamos con nuestra muerte.
Hay un vídeo que me rompe el corazón siempre que lo veo... es un señor de cincuenta y tantos que está a punto de tomar una solución letal, tenía equis enfermedad que lo había recluido a no poder levantarse sin asistencia y le proporcionaba dolor increíble, tanto que incluso completamente sedado sentía dolor. ¿Te imaginas lo que es llegar hasta tal punto? La verdad no me encuentro a mí mismo en esa situación... si muero, quiero que sea rápido, y que todo lo que haya hecho sobre la Tierra se vaya conmigo, de manera que no quede rastro de mí. Volviendo al tema... él sufría, demasiado, todos los días de su vida, 24/7 y afirmaba odiar tener que tomar la decisión de morir en la ilegalidad, cuando lo podía hacer en un hospital, tomando la mano de su familia, mientras se iba en paz consigo mismo. No sé ustedes, pero creo que le tememos a la muerte por el miedo natural y completamente sensato a lo desconocido (misma razón por la que creamos teorías de después de la muerte como reencarnacions , cielos, etc) y porque sentimos que todavía tenemos cosas que vivir... Si llegas a un punto de tu vida en el cual ya no tienes nada más que vivir y sientes que has hecho todo lo que querías hacer y si haces más solo estarías alargando tu vida articialmente, entonces ¿para qué vivir?
No sé porqué estoy pensando en eso... tal vez porque tuve que hablar sobre eutanasia hace un tiempo para la universidad... es bastante complicado, pensé dos semanas enteras sobre el tema. No saqué conclusiones muy buenas, porque soy un pésimo pensador, me esfuerzo demasiado para obtener muy poco. Es por eso que incluso cuando uno de mis sueños hace un par de años era ser filósofo, luego me di cuenta que no tenía lo necesario para serlo, ni pensamiento crítico, ni la habilidad necesaria para cuestionar todo, ni el bigote perfectamente cortado, ni un ojo tuerto...
Sueños... sueños... son las cinco de la mañana mientras escribo esto, y he estado despierto toda la noche, y creo que es por eso que estoy escribiendo lo que sea: me siento demasiado cansado y he puesto mi mente en un "modo automático" en el que simplemente aporreo teclas en el teclado sin sentido esperando que lo que salga sea digno de leer. Sé muy bien que mañana cuando repase esto va a ser horrible, pero ya no importará, porque ya estará subido a la red. Y me niego rotúndamente a eliminar cualquier cosa que escriba acá.
Si sigo escapando de la creación de contenidos, entonces seré un cobarde, y no quiero volver a ser un cobarde en mi vida. He sido un cobarde toda mi infancia y me costó mi sueño. Así que no... ya no más, al menos por ahora. Si la cobardía está ahí es porque alguien necesitó ser un cobarde alguna vez para poder sobrevivir: algún cavernícola que en un momento de iluminación se dio cuenta que no podría ganarle una pelea a mano descalza a un tigre dientes de sable... o algo así. Aunque sentimos la necesidad de estar vivos, está escrito en nuestro código genético que nos deberemos mantener vivos todo lo posible para preservar nuestra especie. Por eso nos alejamos de todo lo que nos pueda hacer daño: riscos, objetos cortopunzantes, guayacos, grasas trans, altas dosis de cafeína, tabaco, alcohol, drogas psicotrópicas y la peor de todas: los mensajes de Whatsapp que dicen "tenemos que hablar".
No sé ustedes, pero cuando tengo la sensación de que algo va mal con alguien que hablo siento debilidad, es un escalofrío que me recorre todo el cuerpo como si todo el calor dentro mío se escapara con la exhalación... se me amortiguan los brazos y las piernas, se me secan los labios, sudo frío, y siento ganas de llorar... algunos dirán que estoy exagerando, pero en realidad es así. En persona no me sucede tanto, creo que puedo sobrellevarlo un poco mejor... no, no estoy muy seguro, cuando cierta persona rompió conmigo, llamemosla señora R... Cuando señora R rompió conmigo solo me dijo "por favor no llores" y no lo hice. Fui a mi casa, me acosté en mi cuarto y no lloré. Tuvieron que pasar meses, varios remember y el estrés postraumático correspondiente para poder llorar. E incluso en ese momento no sabía si lloraba por ella o porque había empezado un avismo del cual me está costando demasiado salir. Eso fue hace 5 años.
Dios mío, hace 5 años tenía 14, y era un idiota que no sabía nada del amor. ¿O fue hace 4 años? No sé, no recuerdo, no me interesa... el punto es que era un idiota, en todo el sentido de la palabra. Lo sigo siendo, pero me gusta creer que ahora por lo menos intento cambiar mi forma de pensar y de ver al mundo. En ese entonces no... como muestra mi pensamiento alrededor de un Dios. No el Dios abrahámico que está en la biblia, al que las abuelitas le rezan... no no, sino Dios como ente creador del universo. Hace 5 años hubiera negado por completo la existencia de un Dios y hubiera tildado de idiota a los que creían que existe... y si me hubieran pedido pruebas hubiera dicho "porque está en contra de la ciencia" y ya. Lo irónico es que en ese tiempo no sabía nada sobre ciencia (sigo sin saber, pero al menos ahora lo acepto). Ahora, en cambio, tengo una postura un poco más abierta sobre la existencia de un Dios. Me he vuelto en una especie de agnóstico escéptico y un poco tirando a teísta. Explicaría porqué pienso eso, pero ahora mismo estoy demasiado cansado, y formular preguntas solo haría que me canse más así que intentaré explicarlo otro día.
Supongo que por ahora lo único que haré es despedirme. Si llegaste hasta acá, gracias. Lo aprecio demasiado. Voy a seguir escribiendo, y si quieres seguir sabiendo sobre mí y sobre mis pensamientos (y algunas cosas sobre mi vida que voy a contar eventualmente) entonces si deseas seguir leyendo o enterarte de quién soy y cómo he llegado a ser quien soy: nadie. Por favor, sigue leyéndome.
En seri, gracias, no sabes lo mucho que significa importarle a alguien al punto de que haya leído 1667 palabras de balbuceos.
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Esto no es una novela: historia de mi vida
Non-FictionHola, por obvias razones no te daré mi nombre verdadero, pero me puedes llamar William H. Gorvek, soy un chico que no tiene nada interesante que contar. No soy bueno para crear historias, para hablar con la gente, hacer reír. No tengo pensamiento in...